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"Preocúpate el día que te miren como si fueras una persona normal. Tú mereces tener una vida extraordinaria."
― Benito Taibo, Persona normal
Hay ocasiones en que los libros se convierten en epidemia. Y no, no estoy comparando "Persona normal" con una enfermedad que te hace sufrir o que te mata poco a poco, más bien con el hecho de que, como buena enfermedad, te impide siquiera salir de tu cuarto: eso pasa con este libro, no puedes ni quieres dejar de leerlo en la comodidad de tu hogar.
También se parece a una epidemia porque, vamos, todos han hablado demasiado de dicho libro a lo largo de estos años, cuando tuvo su "boom" no podías entrar a ningún canal de Booktube México sin que no te saltara alguien hablándote de él.
Yo era testigo de todo esto, pero siempre fui con cuidado, y evite la "enfermedad". O eso hasta un par de días atrás, que el libro llego a mis manos, e inevitablemente me contagie, como todos los demás.
Y qué bonito se siente estar contagiado.
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Benito Taibo nos lleva a conocer a Sebastián, un huérfano de 12 años (o por lo menos al comenzar la historia) que acaba de perder a sus padres, así que termina viviendo con su nuevo (y muy raro) tutor legal: el tío Paco. Ah, y libros. Sebastián se muda a casa del tío Paco y de muchos libros. Estos dos factores cambian por completo la vida de Sebastián, que a partir de dicho acontecimiento trágico, comienza a contarnos (en primera persona) y en modo de capítulos cortos, como fue crecer de la mano de sus dos mejores amigos: Paco y las palabras.
La premisa es bastante simple: no hay ningún joven mago elegido para destruir al villano (aunque Sebas y Harry comparten el hecho de ser huérfanos), no hay princesas viviendo en una torre, y mucho menos custodiada por un dragón. No hay nada de esto, pero a la vez, el libro trata de eso.
Y es que el libro habla de libros.
Si eres un lector consumado y muy conocedor, vas a notar cada guiño que el autor (y a la vez Sebastián) hacen a lo largo de la historia, haciendo que al final "Persona Normal" se convierta en un homenaje a esas historias que, ya sea hace muchos o pocos años, hicieron soñar a la humanidad.
De la misma forma que Persona Normal lo hace en sí mismo.
El libro es sobre personajes bien construidos, al grado de que los sientes tan reales que deseas con todo el alma ir por un café con alguno de los personajes, y que te empapen en persona de todo eso que te hicieron amarlos en el papel ¡lo cual no es imposible, recordando que el libro trata del poder de la imaginación!
De poder ver dragones (y extraterrestres) donde no los hay, pero que aun así ahí están porque tu mente es capaz de verlos.
Trata de ti y de mí. Sobre cómo se siente amar los libros. Sobre como los lectores percibimos las palabras.
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Es un recordatorio sobre el poder de las palabras. O por lo menos para mí lo fue, que llegó en el momento que lo estaba olvidando.
Habla sobre la humanidad. Nuestro pasado, presente y futuro. Sobre lo que somos y cómo vemos todo a nuestro alrededor. De pasiones humanas y cómo lidiar con ello. Si, habla del amor en todas sus formas: a tu pareja, a tu familia, amigos...e inclusive al prójimo que tal vez no conoces.
Benito Taibo logra que el lector se encariñe con sus personajes, que llegue a conocerlos pero sobre todo a comprenderlos; logra hacerte reír, pensar, reflejarte, asustarte e inclusive llorar.
Te hace sentir. Te hace sentir tanto, al grado de tener un pañuelo a tu lado para limpiar tus lágrimas que caen de tus ojos, a la vez que de tu garganta brota una carcajada (historia real amigos).
Pero sobretodo, hace que desees con todo tu corazón jamás ser una "persona normal" y en cambio querer una vida extraordinaria.
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En algún rincón de mi corazón, se ha instalado tal vez para siempre este libro. Por favor, tienes que leerlo.
-Sarita
(Sólo la primera imagen me pertenece. Créditos a los respectivos autores de las otras imágenes que aparecen aquí).
