Bocadillo de Atún

1

Narra Ago
Miro la hora. Las 7:30. Mierda. Me he quedado dormido.
Decido ir directamente a la oficina y me visto lo más rápido
posible. Cojo una manzana y salgo por la puerta.

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- ¡Hernández!- Argh, es Cepeda, el insoportable de mi director- ¡Llegas tarde!

Me siento en mi sitio y abro el ordenador, mientras Cepeda siguehablando. Son las 8 y 45, así que he llegado una hora tarde, pero conociéndolo seguro que me monta un pollo.

- Por haber llegado una hora tarde, te tendrás que quedar a la
hora de la comida para acabar el trabajo.- Grita, haciendo que
frunza el ceño. <Genial, ahora me deja sin comida> pienso,
indignado, y inicio sesion en el ordenador. -Me has entendido,
Hernández?

- Sí... - Digo rodando los ojos.

- Sí señor director.- Dice Cepeda, fulminandome con la mirada.

- Si siñir dirictir. - susurro por lo bajini.

Y me pongo a trabajar. La verdad es que mi vida es bastante
aburrida. Vivo en Montgat desde hace dos años, pero toda mi
familia vive en Adeje. Vine aquí porque quería cambiar de aires y
empezar de nuevo, pero acabé trabajando en esta pequeña
empresa, donde tengo que aguantar al pesado de mi director. Lo
único bueno de esto es que he conocido a Alfred, que trabaja
conmigo, y Amaia, su pareja, que son mis mejores amigos.

- Tranquilo, al mediodía te escapas para comprar un bocata en los
Vazquéz y yo te cubro.

- Enserio? Gracias Roi.- Le abrazo muy fuerte. Roi es mi compañero
de trabajo, y es muy majo. - Pero... ¿Qué es los Vázquez?

- El bar de la esquina. ¿No has ido nunca?- Niego con la cabeza.-
Pues hacen unos bocadillos super buenos.- Dice, relamiendo los
labios, haciendome reír.

- Vaaaale, pues a las dos voy.

- Además, ahí trabaja un rubio super guapo, Se llama Raoul. Haríais
buena pareja. Los dos teneis un culo...

-¡Roi!- De verdad este chico a veces me saca de quicio - ¡Que tengo
novio!

- Ah es verdad. Pero creo que no te hace bien.

- Llevo con Ricky tres años, no voy a romper con él porque creas
que no me haga bien. - Digo, y Roi rueda los ojos ante mi respuesta.

- Agoney.

- Roi.

- Mira haz lo que quieras, es tu vida, pero yo lo dejaría. Además,
me cae mal.- Ahora ruedo los ojos yo y río. Este chico es un caso.

Narra Raoul

Cojo otro plato y lo limpio, mientras observo como un chico rubio
sale de mi cafetería. Como siempre que me aburro, me pongo a
analizar a la gente de dentro el local.

Hay dos chicas hablando, una rubia y la otra morena. La morena
es canaria, se nota por su acento.

Siempre me ha gustado como
hablan los canarios, su acento es súper bonito. Entonces veo como
se dan un pico. Que monas. Y eso me recuerda lo solo que estoy, y
frunzo el ceño, acordandome de Jordi y del daño que me izo.

Miro hacia la puerta y veo a un chico moreno entrar. Madre mía.

De repente noto que la temperatura de la habtación sube.

El chico en cuestion tiene barba y unos ojos oscuros y intimidantes.

Y tiene unos rasgos... Dios. Es simplemente precioso.

Empieza a andar hacia mi dirección y de repente, choca con la mesa de las chicas de antes y se cae al suelo.

Que mal por dios.

Voy corriendo hacia él y le ayudo a levantarse.

- ¿Estás bien, te has hecho algo? Si quieres te doy hielo o algo...- digo, visiblemente nervioso, a lo que él se ríe.

- Tranquilo rubito, estoy bien.- Dice, levantándose y riendo.

Rubito. Me ha llamado rubito. Ala, seguro que parezco un tomate.

- ¿Estas bien?- Dice la rubia de antes.- ¡Anda Ago! ¡Cuanto tiempo!

- ¿Mimi? ¿Que haces en Montgat?

- Un festival de Barcelona.- Dice, y hace un gesto quitándole
importancia.- ¡Por cierto maricón!- Chilla, y abro los ojos ante esa
palabra, pero el moreno parece no importarle.- ¡Esta es Ana!- Dice
mientras coje a la canaria.

- ¡Hola!- dice el moreno, mientras le da dos besos.- Mimi me ha
hablado mucho de tí. - Dice, haciendo que la tal Ana sonría.

- Encantada. Bueno, nosotras nos ibamos ya, ¿no- Dice esta, mirando a su novia.

- Execto, ¡adiós!- El chico les saluda mientras se va y después fija sus ojos en mí.

- ¿Tu eres Raoul Vázquez, no?- Dice, y noto como me sonrojo.

- ¿C-Como sabes mi nombre?- Consigo tartamudear.

- Me lo ha dicho Roi, trabajo con él. ¿Sabes quién es?

- Roi... Ah, ya se quien es. Es un chico que viene algunos días a
comer bocadillos. ¿Así que trabajáis juntos?

- Sí, y me ha dicho que venga aquí a comer.- Dice, y me sonríe.

- Vaya, pues me alegro.- río y me situo detras de la barra. - ¿Cual
quieres?- Le digo, mientras le doy la lista de los bocadillos.

La coje y la mira durante un rato, que se me hace eterno.

- Vaaale, pues un bocadillo de atún.

- ¡Oído cocina!- Digo con una sonrisa, y él ríe. Dios que risa mas
bonita.

- ¡Arranca muchacho!- Dice, chasqueando los dedos, y vuelve a reír
al ver que me sobresalto. - Que te has quedado embobao.

- Oh vaya.- Digo, y río avergonzado. - Ahora te lo preparo.

Cuando, minutos mas tarde, llego con el bocata, me encuentro al chico hablando por teléfono con una sonrisa.

- Esto... Aqui tienes.- Digo, y el canario me mira.

- Ah gracias- Dice, sonriendo, y se dirige al teléfono otra vez.-
Adiós amor, nos vemos en casa.- Dice, y frunzo el ceño.

-¿Amor?

- Estaba hablando con mi novio.- Dice con una sonrisa.

Vaya.