Bocadillo de Atún

3

Narra Raoul

Son las 20h, y acabo de llegar a casa.
Me estiro al sofá después de un largo día de trabajo y de repente
recuerdo.

El canario.

Sonrío y cojo el móvil, marcando el número de Alfred. Pero no es e
quien contesta.

- Hola Raouuul- Dice Amaia con voz de dormida, y no puedo evitar
reir.

- Hola Amaia, te he despertado?

- Sí, pero da igual. - Al otro lado de la línea oigo como alguien abre
la puerta de la habitación y percibo un "con quien hablas" de
Alfred. - Raoul, te paso a Alfred, ¿vale? Yo me voy a dormir.

- Vale, adiós.- Digo, y ella ríe mientras le da el móvil a su novio.

- ¡Hola rubito!

- ¡Alfreeed! A que no sabes que me ha pasado hoy.

- A que si.

- A ver, adivina.

- ¿Chico o chica?

- ¿Que?

- La persona de la que te has encoñao hoy. ¿Es chico o chica?

Noto como me pongo rojo.

- C-como lo sabes?

- Raoul, hace dos días te encoñaste de un chico que te dió la hora.
¡La hora!

- Fue amor a primera vista.

- Si, como la de la semana pasada, no?

- Con aquella hubo química pura.

- Eras su canguro.

- Tenía 13 años, no era tan pequeña. Era muy maja.

- Eras su canguro.

- Se llama Paula, y es morenita bajita...

- Raoul

- ¿Que?

- ¿Para que me has llamado?

- Ah si - Digo, y siento como me pongo rojo. - Hoy he conocido a alguien.

 ¿Si?- Dice, y noto como se ríe. - ¿Como se llama?

- Eeh

- No sabes su nombre.

- Pues no...- Digo, ya completamente rojo aunque nadie pueda verme - ¿Pero no te rías!
- Joder Raoul. -Dice riendo. - Bueno explícame cosas de ella o él, va.

- Vale, pues mira, es un chico.- Digo, y me sonrojo más. - Tiene los ojos oscuros y profundos, la piel y el pelo morenos y una barba que le queda súper bien.

- Vaaaya.

Me he puesto rojo.

- Joder Alfreeed.- digo, y él se ríe. - Cabrón.

- ¿Y de que lo has conocido?

- Ha venido a comer a mi bar, y hemos hablado un poco.

- Vaya, ¿es majo?

- Sí, es muy bromista...

- ¿Y le caes bien?

- Supongo que sí. Hay un momento que se ha enfadado conmigo pero bueno...

- ¿Se ha enfadado? ¿Pero qué has hecho?

- Nada, solo se ha pensado que era homófobo. Pero todo solucionado. - Digo, y hago una risita.

- Raoul.

- ¿Qué?

- ¿Lo volverás a ver?

- ¡Sí! - Digo ilusionado.

- ¿Cómo lo sabes?

- Hemos quedado.- Susurro mientras me sonrojo.

- ¡¿Comooo?!

- Sí...

- Queee fueeerteeee.

- Alfred.

- ¿Que?

- Tiene novio.

- Oh. Vaya chasco, ¿no?

- Ya.

- Bueno da igual, lo importante es que romperán.

- ¿Ah si?

- Si.

- ¿Cómo lo sabes?

- Porque tu te pondrás en su camino, os enamoraréis, lo dejará y ala, felices para siempre. - Alzo una ceja, incrédulo.

- Alfred... Que cojones.- Digo, y noto como se rie antes deque se oiga el sonido del timbre de su casa.

- Raoul, tengo que colgar. 

- Vale, adiós.

- ¡Te quiero! - Dice, antes de colgar.

¡El fin de semana otro 😊!