SIGUIENTE PÁRRAFO

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No llegue a casa esa noche.
Nos dijimos que esto no pasaría de nuevo pero fue algo que solo duro unos cuantos días.
Llegábamos a su departamento, nos desahogabamos un poco y las penas se iban entre besos y caricias carnales.
No hubo algo más que eso, no hubo sexo.
Él me tocaba y yo a él.
Esas tardes candentes que teníamos aquellos días era lo único bueno que pasaba en mi vida.
Una de esas tardes me confesó que yo era lo único que esperaba sin darse cuenta. Yo era la parte feliz de un día pesado pero nunca más allá de eso.
Sin relación, sin compromiso. Eso era lo que teníamos y estaba bien.
Los días en los que estrañaba a esa persona eran cada vez menos, 4 meses después de que la relación se acabo, se puede decir, lo olvide por completo.
A veces cosas insignificantes hacían sentirme sola una vez más pero al ver y sentir la cabellera suave, semirubia de mi gerente hacía que me olvidara de eso.
Lo nuestro era pasajero, no había por que cambiar eso.
Días después él encontró a la persona indicada en él momento indicado y tuvo que irse.

No era mío y no lo sería.

~AMORES~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora