«El problema no radica en quienes mienten, el problema radica en quienes creen»
«Meses después»
Todos los amigos se encontraban en casa de los hermanos Scott, incluso Luifer se hallaba en casa. Estaban entretenidos jugando y bromeando juntos. Al escuchar la noticia todos se quedaron en silencio, atentos a boletín que a través de la televisión veían.
«Las autoridades han encontrado el cuerpo decapitado de un vagabundo de la zona. Los peatones de la zona aseguran que muchas veces este individuo intento abusar de las mujeres que se acercaban a el, les prometía decir información valiosa a cambio de algo, una vez ya teniéndolas cerca se lanzaba encima de ellas quitándole la ropa a rasgados una vez desnudas abusaba de ellas, para luego maltratarlas, matarlas y picar en pedazos el cuerpo de su víctima para luego comer cada pedazo del cuerpo. Esto según las personas que frecuentaban el paso por ese callejón. Dicho vagabundo fue encontrado decapitado, en su pecho un gran hoyo, lo curioso del caso ed que el cuerpo del señor no tenia el corazón. Las autoridades había comenzado una investigación hace algunos meses la cual llego a un punto que tuvieron que detener la investigación. ¿Cual sería la razón? Eso es información confidencial, luego de meses la investigación se reanudó para encontrar el culpable o los culpables de este macabro asesinato»
Justo en ese momento Karen le dedico una mirada cómplice y temerosa a Luifer. El reacciono de una forma muy natural.
— Las calles de esta ciudad no son seguras — Interviene Cristhian.
— Nunca falta el miedoso del grupo — Aporta Peter.
— Oye, no es miedo, solo me aterra que algún vagabundo o cualquier individuo quiera atentar contra mi vida ¿Te imaginas?
— Entiendo, entiendo pero tranquilo, nada te pasará.
— Chicos iré a tomar un poco te aire ¿Alguien viene? — Interviene Karen.
— Yo…… Yo voy contigo Karen — Responde Luifer dudoso.
— Vayan ustedes, nosotros nos quedaremos aquí a seguir disfrutando de un día en familia — Concluye Matias. Los dos chicos se dirigieron a la puerta para salir al patio de la casa.
— ¿Acabas de ver eso Luifer? ¿Ahora que haremos? ¿Que pasara si descubren que fui yo quien mató a ese asqueroso vagabundo? — Karen empezaba a ponerse histérica y nerviosa por lo sucedido aquella noche.
— Tranquila querida — Dice Luifer acercándose a Karen y acomodando un mechón de cabello detrás de la oreja de la chica — Todo estará bien, recuerda que estoy contigo siempre, si te pasa algo yo te ayudaré.
— ¿Por que dices eso Luifer? ¿Por que de un tiempo para acá me proteges tanto? — La chica se aleja dos pasos de el.
— Soy un demonio Karen, en el infierno no hay chicas tan puras como tu, has tenido problemas pero nada que un poco de magia negra no ayude, a demás tienes un alma muy valiosa, muy hermosa y negra. Me empiezo a enamorar de una mortal y es algo que nunca me había pasado ¿Quieres saber algo? — Al finalizar estas palabras el chico la miro fijamente.
— Si... Si dime — La chica se sentía intimidada e hipnotizada por la mirada de su demonio.
— Si te pierdo a ti… Lo pierdo todo — En ese mismo instante el chico besó a la mortal. El corazón de la chica se paralizó por esas palabras y como si no fuese poco ella podía sentir esos cálidos y carnosos labios de aquel demonio. En medio de aquel sensual beso Peter se asomó por la ventana que da al patio observando aquella escena, el chico se decepcionó, el sabia que ella solo era una mentira, una mentira que le valdría el autoestima. Los jóvenes ya habían terminado su "Demostración de de amor" Peter se dio cuenta se esto y rápidamente se alejó de aquel lugar donde se encontraba. Los jóvenes entraron a casa nuevamente, todos estaban igual que como cuando se fueron, solo que Peter, era el único que no estaba.
— Mat ¿Donde esta Peter? — Pregunta Karen.
— Esta arriba, en su habitación, me dijo que necesita hablar contigo.
— ¿Y…… No te dijo sobre que necesitaba hablar conmigo? — Indaga Karen.
— No. Solo me dijo que cuando regresarás, fueras a su habitación que necesita hablar contigo.
— Bueno esta bien, yo iré — Concluye la chica.
Poco a poco subía las escaleras, los pasos hacia la habitación del chico eran muy cortos. Al llegar a la puerta, la chica posó su oído para escuchar lo que sucedía en la habitación y se impresionó. Peter estaba llorando. Ella poco a poco tomo el picaporte de la puerta y la abrió lenta mente, solo dos pasos dio para acercar e al chico.
— ¿Cuando me lo dirías Karen? — Habló Peter antes de que ella se adelantara.
— ¿Cuando te diría que Peter? ¿De que hablas? — La chica se encontraba confusa.
— Tu y Luifer ¿Cuando Karen? ¿Que esperabas para contarmelo?
— Pet... entre el y yo.. no.. no hay nada te lo juro — La chica empezaba a ponerse nerviosa.
— Mentira — Grita el chico muy fuerte.
— Calmate Peter, no te pongas así — Dice la chica sentandose a un lado de el — esto se dio el día que fuimis a por los helados, el se acerco a mi y sin mas, me besó.
— ¿Me hablas enserio?
— Desde ese juramento, te e dicho la verdad Pet ¿O aun dudas de mi?
— No es que dude de ti Karen, es que... me aterra que me sigas diciendo mentiras. La verdad fui un hipocrita pensando que eras para mi.
— Pero puedes seguir viviendo sin mi Peter, la vida sigue, no te aferres a algo que jamas sera tuyo — La chica empezaba a llorar.
— Ni si quiera se, como es eso de vivir, cuando fuiste quien mato lo que alguna vez sintió mi cuerpo y mi corazón Karen. No puedo negar que en el fondo te admiro por que me enseñaste a ser fuerte, me enseñaste a madurar y a cambiar muchas cosas que hoy me ayudan y me están ayudando a crecer.
— Peter, te amo, un amor mas allá de hermanos. Pase los mejores momentos contigo y te agradezco. No todo acaba aquí Pet, seguiremos siendo hermanos, seguiremos luchando codo a codo ¿Me prometes estar mas tranquilo?
— Lo prometo Sofia — Estas palabras a la chica la helaron, ella sabía que cuando Peter o Matias la llamaban de esa forma, era por que las cosas iban bien. Karen salió a la sala, todos quedaron viéndola ella sólo siguió su camino hacia la puerta para una vez ya cerca de ella, saliera de la casa. Luifer se paró del sillón despidiendoce de todos y siguiendo a Karen hacia las afueras de la casa.
— Peter nos vio besándonos Luifer — Habla la chica dándole la espalda a su demonio.
— ¿Y que tiene que ver Karen? — Indagaba el chico confuso.
— El y yo tuvimos algo antes de saber que el y yo eramos hermanos — La chica agachó la cabeza por la decepción.
— Espera…… Entonces, ¿El todavía siente algo por ti? — El chico se asombro por la declaración de la mortal.
— Si, lamentablemente. Pero hablé con el y le dije que yo sentía lo mismo por el. Le pedí que se calmara pero tranquilo las cosas saldrán bien — La chica se acerco al demonio y le dio un beso muy sensual. El demonio estaba irritado por lo que había dicho anteriormente Karen.
— No vuelvas a besarme sin mi consentimiento — Habla el demonio muy irritado.
— ¿Que? — Dice la chica muy confusa.
— Ya me has oído — Reclamó.
— ¿Que harás si lo vuelvo a hacer? — Habla ella con una mirada muy desafiante.
— Estas jugando con fuego mi querida Karen.
— Me gusta quemarme de vez en cuanto querido Luifer.
