Defenceless 𝗛𝘆𝘂𝗻𝗜𝗻 [𝗘𝗱𝗶𝘁𝗮𝗻𝗱𝗼]

17

- diablos.me duele mucho — murmuró el más bajo con quejidos.

- ya pasará — dijo Hyunjin.

- No le dirás a nadie ¿cierto Hyunjin?

- No lo haré JeongIn. No quiero que nos molesten y en especial a ti que eres tan frágil.

- el menor suspiró —¿puedes olvidar aquellos te odios que dije? - apoyó su mentón en el pecho de Hyunjin mirándolo a los ojos y tomándolo del mentón-¿por favor?

- no creo necesario hacerlo porque aún así me gustaste y gustas JeongIn.

- Solo hazlo.por favor Hyunjin

- bien.lo haré — sonrió el más alto y levantó a JeongIn para darle un tierno beso en la frente.

- Deberíamos cambiarnos. Puede venir tu madre y te va a gritar.

- no te preocupes por mí ¿Si? Soy yo quien te protege a ti además que mi madre vendrá en la noche

- está bien —  sonrió de costado. Lo que para JeongIn parecía un simple gusto para Hyunjin era más que eso. Tal vez enamorado de sea la palabra indicada.

- eres tan lindo JeongIn — acarició la mejilla del menor mirándolo detalladamente desde los ojos hasta sus delgados y rosados labios.— ¿ que vas a hacer solo en casa? ¿No vas a extrañarme?

- ¡Si te voy a extrañar Hyunjin y mucho!— exclamó —  pero no quiero ser una molestia aquí.

- claro que no lo eres JeongIn. Eres una persona importante en mi corazón y aunque para los demás no. Debes saber que al menos una persona te ama y ese soy yo

- basta Hyunjin. No es necesario que mientas con respecto a tus sentimientos

— ¡no lo hago! No serviría de nada mentir sobre mis sentimientos

— entonces tú...¿me amas?

— te amo Yang JeongIn

Aquellas palabras se quedaron en lo profundo del corazón de JeongIn. Era como un eco que no tenía cuando acabar para sus oídos y sus sentimientos. "Te amo Yang JeongIn".

— ¿y dónde me quedaré? — cambió rápidamente de tema. Aquello era extraño para el menor pero se sentía muy bien.

- En mi habitación — Dijo el pelinegro.

- ¿estas seguro que tú madre va a querer?¿Y si se molesta porque un extraño como yo dormirá en la habitación de su hijo?

- claro que no JeongIn. Y si es así entonces te acompaño a casa y duermo contigo.

- ¡no no! —exclamó el más bajo— aquí está bien.

- asintió. 

Nos echamos a descansar un rato,me encantaba sentir su piel suave entre la mía,su mejilla apoyada en mi pecho,sus manos entre mi entrepierna.
Que más podía desear que esto.
Lo amaba,y más de lo que pensaba.

                                ***

-¿que te sucedió?

- herí mi ala,pero estoy bien, igual no es tan doloroso

- déjame curarla — dijo Hyunjin mirándolo con pena.

- ¡no! Te dije que no podías tocarme. Sanará,no te preocupes

- bueno. Esta bien — le sonrió — ¿pero tú si puedes tocarme?

- si,yo soy tu ángel y tengo todo el derecho de hacerlo

- y yo quiero cuidarte...pero no puedo