Solo mentiras.

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Williams y Melanie eran una feliz pareja de adolescentes, ambos tenían la misma edad aunque muchos decían que Melanie era más joven por meses .
A los 21 años Melanie se enteró de que tendría un hijo y que era de Williams, ella creía que sería malo decirle porque podría abandonarla y dejarla sola con el niño pero, no ocurrió lo que ella creía. Apenas Williams se enteró, una gran felicidad se apodero de él.

-¡Es la mejor noticia que e recibido en años- dijo Williams con una radiante sonrisa teniendo a Melanie en sus brazos.

El 3 de septiembre de 2012 nació el primer hijo de Melanie Murphy y Williams Brown al cual llamaron Michael.

Todo parecía ir bien hasta el día 28 de junio de 2020 día donde, inesperadamente, Melanie dio a luz a su segundo hijo, Visent, cuando Williams se entero quedó devastado al saber que el niño no era suyo. No solo tenía la piel más pálida si no que también su cabello era rubio y sus ojos eran claros.

Melanie había quedado exhausta por el parto quedando inmediatamente dormida luego de ver a su hijo.

Al otro día, al despertarse, ella se levantó de la camilla en la que se encontraba y se dirigió a la habitación en donde se encontraba su bebé.

Cuando lo vio sonrió aunque lloraba sin darse cuenta, pronto su una de las enfermeras se acercó a ella y le dijo que un hombre le había dejado una carta antes de partir. La enfermera dejo la carta en manos de la mujer y se retiro, sin dudarlo ella abrió la carta, cuando la leía empezaba a sentir un agudo dolor en el pecho mientas las lágrimas brotaban sin posibilidad alguna de ser contenidas con las siguientes palabras en la hoja de papel:

"Querida Melanie se lo que debes estar pensando, ¿cómo pude hacer esto?¿porqué?, creo que las respuestas son obvias. Quien podría imaginar que una mujer como tu podría hacer tal barbaridad como esa, ¿acaso no fui lo suficiente bueno para tí?, No lo se, la cosa es que quiero el divorcio, llevaré a Michael conmigo luego de separarnos, tú podrás quedarte con tu hijo e incluso podrías pedirle a su padre que se haga cargo de él como debería ser.

Bueno, ya no tengo mas palabras para tí, lo siento.

con cariño Williams Brown"

Melanie calló rendida de rodillas al suelo arrugando aquella carta, intentando comprimir las lágrimas. El pequeño niño comenzó a llorar muy fuerte moviendo sus pies y manos levemente.

-¡No puedo creer todo esto!- gritaba con sus manos en la cabeza reprimiendo un grito de derrota.

Pasó el día y ella ya podía volver a su hogar con su hijo.

-Nadie nos espera-
murmuró vistiendo a su hijo con abrigos de piel, ya que era época de invierno, y enrollando una bufanda sobre su cuello.

Durante el camino a casa, Melanie cruzó cerca de un orfanato y pensó que quizás debía adoptar a un niño o a una niña para que Visent no se sintiera tan solo luego de que lo separaran de su único hermano.
Al entrar al orfanato vio a una niña de casi 10 años que, jugaba con los demás niños incluyendo los mas grandes.

-sería una buena hermana mayor ¿no lo crees?- decía Melanie acariciando suave la cabeza de su bebé, el niño movió sus pequeñas manos y sonrió, como si pudiera entender lo que le decía su madre.

Melanie había tomado su decisión, una niña sería parte de la familia.
-Bueno, supongo que eso es todo-
dijo una agradable mujer quien cuidaba a los niños de ese orfanato.
-Solo necesito su firma aquí - decía acercando un papel hacia ella junto con una pluma.

Continuará.

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