𝑩𝒂𝒄𝒌 𝒕𝒐 𝒚𝒐𝒖 |𝐶𝑎𝑠𝑡𝑖𝑒𝑙 𝐶𝐷𝑀𝑈|

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Al final si me inscribí a la carrera de Teatro y descubrí que mi hermano de alguna manera lo había hecho con la carrera de Arte. Por lo que tuve que ir a hablar con el señor Zaidi, que por cierto es el profesor mas hermoso y sexy que he visto (además del único), y resulta que tendré que asistir sus clases de Arte moderno y contemporáneo y todo gracias al imbécil de mi hermano, cree que no me puedo cuidar sola, si puedo hacerlo que él y mis padres no confíen es una cosa completamente diferente; solo hubo una cosa que me saco de quicio y eso fue la típica chica que cree ser inferior a los demás, sin embargo conseguí una nueva amiga. Se llama Chani, me pareció simpática y me gusto su forma de vestir. Y sin duda lo peor del día fue saber que mi compañera de habitación es la misma chica que se cree inferior al resto. Me molesta mucho las personas así, pero de todos modos tendré que acostumbrarme.

Y ahora que estoy recostada boca arriba mirando él techo de la habitación, tengo una pregunta ¿donde estará?, ¿será posible que estemos en él mismo edificio? No quiero pensar mucho en el ahora, quiero centrarme netamente en mis estudios y en bajar de peso. Todo el día tuve que arreglarme las para que nadie sospechara nada, y también preocuparme que nadie escuchara ni entrara al baño cuando me dirigía a sacar todas las calorías que comí; el señor Zaidi me dijo que consiguiera trabajo, por lo que fui a un café y había un chico que trabajaba allí (no me callo bien) espero haber conseguido él trabajo, él chico de nombre Hyun, quedo de llamarme si lo conseguía. El único problema es que voy a ver comida constantemente y tendré que luchar aun mas conmigo misma para que no me de hambre. 

***

Al día siguiente me despierto gracias a mi querida compañera de habitación (nótese el sarcasmo), la verdad es que me desperté por que el sonido de su despertador no es muy agradable y  además porque no es nada discreta para despertar. Sin embargo no tengo ganas de reclamarle por eso estoy mas preocupada de comprar laxantes y  que me los vendan. Es cierto que no tiene restricción de edad, pero los laxantes y diuréticos que compro son bastante fuertes por lo que no son muy fácil de conseguir. De todos modos siempre termino consiguiéndolos de alguna forma u otra. 

Después de vestirme me miro al espejo para saber si la ropa me queda bien, para mi desgracia se me ven las piernas gordas,  lo bueno es que dentro de poco recuperaré mi amado cuerpo delgado; recojo mi bolso con mi teléfono y llaves y al fin voy a mi primera clase de teatro, en este tiempo me he dado cuento que soy muy dependiente del teatro, es decir, no puedo estar mucho tiempo sin estar sobre el escenario. El teatro me sirve para muchas cosas, me hace feliz, es una de las pocas cosas que logra hacerme sonreír, siendo sincera no imagino mi vida sin teatro. Todavía recuerdo la reacción de mis padres cuando les dije lo que quería estudiar, si no hubiera sido por Castiel (que en ese momento estaba presente) mi padre no me hubiera pagado la carrera universitaria, pero ahí estaba Castiel. Apoyándome y tratando cambiar la opinión de mi padre y lo logro. Esa es solo una de las pocas cosas que conseguido, conquistarme es una y luego romperme el corazón, aunque se que también se lo rompí a el y eso es lo peor. Ahora todo cambio y hay días que desearía poderme haber quedado con Castiel y no haberme ido, pero las cosas ya están hechas. Mi vida ya es una mierda gracias a mi obsesión con verme delgada, sin embargo no me arrepiento de ser bulímica, se que esta mal decir eso pero es la verdad.

Al entrar al aula magna, donde se hace la clase de historia de teatro  lo primero que veo es una señora de unos 40 años y con un IMC de aproximadamente 36,4...a veces me pregunto si las personas así se ven al espejo o si alguien les dice como están.

***

–Alexa, ya que estas aquí dentro de poco una banda muy conocida dará un concierto en la ciudad...sería genial si fueramos– Rosalya estaba emocionada con eso, pero yo soy mas de festivales de música electrónica...sin embargo no puedo decirle que no a
Rosalya

–de acuerdo, supongo que iré –

–¡Si!– de inmediato me abrazo y me sacudió un poco

–Por cierto, ¿cómo se llama ese grupo? – digo mientras finjo desinterés

– Crowstorm, te encantará te lo aseguró– dijo con una sonrisa complice, al principio no entendí el  porque después de unos días entendí el porque de esa sonrisa y desearía haber sabido el porque tal vez así no hubiera acabado como estoy ahora