[ Blue Moon ] Nickroe = Grimm

Blue Moon

"¡Vete!"

"Monroe, ¡necesito tu ayuda!"

"Siempre necesitas mi ayuda. ¡Pues esta noche no la vas a encontrar!"

"Vamos Monroe, déjame entrar".

"¿Cómo eres un Grimm tan terrible? ¿No sabes nada de Blutbaden? Es la Luna Azul, Nick. ¡¡La Luna Azul !! "

No se refería a al color, se refería a la época del año. La Luna Azul fue el eufemismo para la temporada de apareamiento . La temporada de apareamiento Blutbaden.

Así que esta vez, Eddie no iba a ceder. De todos modos, no podía abrir la puerta; le habría dado un tiron al tobillo  izquierdo con  el grillete.

"Si se supone que eso significa algo, ¿me lo dirías?"

Eddie podía olerlo a través de la puerta. Olía absolutamente delicioso. Incluso el sonido de su nombre en su mente era encantador. Nick. Nick. Nick Burkhardt.

Había empezado a tirar hacia la puerta sin darse cuenta, sus pies hacían marcas en sus pisos cuidadosamente restaurados. Nunca antes había estado tan mal. En todas sus otras lunas azules, había estado luchando contra las ganas de salir y encontrar un compañero. No solo los amihos con los que podía salir y cazar, como Hap y Angelina. Su verdadero compañero.

Ahora, cada instinto le decía que su verdadero compañero estaba justo al otro lado de esa puerta. No importaba que fuera un hombre, o que estuviera comprometido para casarse, o que fuera un Grimm. Cada instinto que Monroe tenía le estaba diciendo que Nick Burkhardt era el indicado.

Lo había sospechado durante mucho tiempo, pero solo ahora lo sabía con certeza. Ahora su vida nunca sería la misma. ¿Por qué no pudo ese maldito Grimm haberlo dejado solo?

Un ruido agudo se escapó de la garganta de Eddie inesperadamente. Él quería a su compañero. Lo quería tan mal.

"¿Monroe? ¿Estás bien? ¿...Eddie?"

En respuesta, solo gimió y tiró contra su csdena aún más fuerte.

La ventana de vidrio en su puerta se rompió cuando Nick la golpeó con la culata de su arma. Después de derribar algunas piezas el los bordes, metió la mano en el interior y abrió la puerta.

Cuando Nick entró en la habitación, Eddie arrancó el cerrojo del suelo y se lanzó hacia él. En unos segundos, el Blutbad lo tenía atrapado en el suelo con los dientes alrededor de su garganta. Se quedaron así durante largos momentos, tan sorprendidos como el otro.

Con un esfuerzo supremo, Monroe quitó los dientes del cuello del Grimm. No le habían roto la piel, gracias a Dios, pero todavía luchaba contra la urgencia de sujetar su hombro, cualquier cosa para mantenerlo quieto. Luchó contra sus instintos y los retuvo el tiempo suficiente para hablar.

"Por favor, quédate quieto", le rogó Eddie. "No te haré daño, al menos eso es lo que puedo prometer".

"Déjame ir." Los dientes de Nick estaban apretados, y él respiraba con dificultad.

"¡Lo estoy intentando! Me estoy esforzando mucho, Nick, tienes que creerme. No quiero lastimarte, solo quiero..." hacerte entender lo que siento, hacer sientes lo que yo siento. Pero sabía que nunca podría hacer ninguna de esas cosas. Acercó su rostro al cabello de Nick y se dejó respirar profundamente. Su compañera Olía tan maravilloso. Como el hogar y la pertenencia y la familia y todas las cosas que nunca tendría.

"¿Nick? Necesito que hagas algo por mí." Monroe dijo suavemente al oído de Nick. "Voy a saltar lejos, ¿de acuerdo? Entonces necesitas que tomes tu arma muy rápido y... Entonces, bueno, ya sabes el resto".

Nick tardó un momento en captar su rumbo. "Eddie, no te voy a disparar," respondió.

"Tienes que hacerlo. Hay algo malo en mí, Nick" dijo, incapaz de evitar que un gemido escapara de su garganta.

Nick lo miró. Estaba más tranquilo ahora, y genuinamente preocupado.  ¿Cómo un hombre así llegar a ser policía? ¿O un Grimm? Pensó Eddie.

"¿Qué pasa, Monroe? ¿Qué es esto de... La Luna Azul?" Nick le preguntó.

Eddie suspiró y cerró los ojos. "Es la temporada de apareamiento. Y he elegido al compañero equivocado, uno que nunca me amará ni me querrá de vielta. ¿Sabes lo que le sucede a Blutbaden, cuándo eligen al compañero equivocado? Se vuelven locos. Totalmente salvajes. Es la necesidad más difícil denegar".

"Tal vez no sea tan malo como crees. ¿A quién elegiste?"

"Tenías que preguntar." Eddie negó con la cabeza. "Eres tú, Nick. Te elegí sin darme cuenta". Se levantó lo suficientemente alto como para mirar a Nick y ver la sorpresa en sus ojos. "Así que o vas a tener que dispararme, o..."

La sorpresa en la cara de Nick se desvaneció rápidamente, para ser reemplazada por esa maldita simpatíca en la que era tan bueno, y algo más que Eddie no podía leer.

"No te voy a disparar. Y no podría dejar que te vuelvas loco. Hablaremos de esto por la mañana, ¿de acuerdo?"

Entonces Eddie reconoció la mirada. Olío lo que significaba. Lo que vio en los ojos de Nick fue deseo.

Cuando Eddie lo besó, Nick le devolvió el beso.

§

Sus ropas terminaron hechas pedasos en el suelo. Monroe lo habría tomado en el piso mismo, pero Nick había sugerido entre besos que fueran al dormitorio. Lo que su compañero quisiera, haría todo lo posible por concedérselo, así que Eddie lo llevó escaleras arriba y lo tendió en su cama.

La llave de repuesto para el grillete de Eddie estaba en el cajón de la mesita de noche. Así como lo fue una botella de lubricante.

Su acoplamiento fue frenético y grosero: Eddie no contuvo nada. Nick era un Grimm; él podría tomarlo. El era perfecto. Era como si lo hubieran hecho para él, o tal vez era al revés. Eddie se preguntó si era cierto que los Grimm masculinos podrían llevar cachorros de Blutbaden, o si eso era solo otro cuento de hadas. Cuando entró en Nick una y otra vez, imaginó que era verdad.

Se durmieron envueltos en los brazos del otro.

Y por la mañana hablaron de ello. La situación era complicada; Nick todavía se preocupaba por su novia, y tenía al menos dos trabajos que consumían la mayor parte de sus horas de vigilia: su trabajo como policía y su trabajo como Grimm.

En lo que a Eddie se refería, mientras Nick acudiera a él en la luna azul, también podría tener su otra vida. No había pensado que obtendría tanto. Pero Nick, al parecer, quería darle más.

Encontrarían un compromiso, encontrarían un camino y encontrarían su final feliz, eventualmente.

§

Fanfic escrito originalmente al inglés en Archive of Our Own beta por:

Solo la traducción y adaptaciones me pertenecen.