Capitulo 6: No poder.

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Muchas gracías por los comentarios y votos:) en serio!

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 Capitulo 6: No poder. 

Sus dulces labios tocaron los míos, haciéndome sentir feliz por un simple beso. Sus manos se sentían calurosas por tocar mi cintura, haciendo que el cuerpo se me calentara a una elevada temperatura, haciéndome estremecer por lo que causaba él en mi interior. De golpe se separó de mí y me sonrió cálidamente, cosa que izó que se me derritiese el corazón y me palpitara rápidamente, haciéndome sentir mariposas en el interior del estómago. Con una voz que nunca había oído dijo.

-Corea y yo queremos que vengáis todos a nuestra boda, las invitaciones se os enviaran a vuestros respectivos alojamientos. Muchas gracias, y esperamos que vengáis todos los presentes -dijo sonriendo, haciendo acelerar mi corazón por el simple echo que sonriera. De golpe sentí una mano sobre mi cintura que me acercaba a él, y me decía en la oreja.-No te hagas ilusiones.- dijo con una simple frase, pero que me hirió.

-Quien ha dicho que he pensado lo contrario?- le dije levantando una ceja cuando nos estábamos yendo del mini- escenario.

La noche paso entre felicitaciones y negociaciones, cosa a la que yo no quería estar al caso, dejaba todo eso en manos de Albert que era él el que manejaría más bien todo. Al fin, cuando acabó todo, nos despedimos de todos y nos fuimos a nuestra casa, sin antes ir a la antigua mansión donde vivía, para recoger a Max, mi perrito husky. El camino hacía donde vivíamos fue en silencio, cada uno sumergido en sus pensamientos, mientras que tenía entre mis brazos a Max, el cual me miraba medio mareado. Cuando al fin lleguemos, cogí a Max y lo deposité en su sitio correspondiente, en el comedor, junto con su comida y bebida, agua. Después fui al cuarto matrimonial, donde estaba sin saberlo yo, Albert. Abrí la puerta y vi a Albert con sus boxers y sin nada más, poniéndome roja de vergüenza.

-Ponte algo!- le dije, y me giré.

-Perdona, pero yo siempre voy a sin para dormir- me dijo sin vergüenza alguna.- Y a más, si yo fuera tu, estaría la mar de contenta por ver a tu querido amor verlo a sin- dijo, señalándose él mismo.

-P-per-pero...-dije titubeando, pero icé ver que no había oído las últimas palabras- como tu quieras-dije resignada, encima que íbamos a vivir juntos por la fuerza, mejor sería estar como en su propia casa, y le dije- Vale, pero... te podrías ir, o ir siquiera al lavabo? Es que me tengo que cambiar- le dije toda roja.

-No-dijo cortante- tranquila, que no me gusta mirarte- me dijo, y me enfadé, y me empecé a cambiar. Me puse un camisón azul cielo, que me llegaba hasta las rodillas, de manga corta. Cuando estuve cambiada le dije- Que tal si te vas a dormir en el sofá?

-No, yo no iré, y seguro que tu tampoco, así qué que tal si dormimos juntos, cada uno en su lado de la cama?- me dijo, y yo asentí y me metí en la cama, cogí el portátil y me puse en el Twitter. Tenía dieciseis publicaciones, cuatro de Naila, una de Lisa, siete de Clarck, tres de Lucas y la última de Dilan. Los mensajes que me había enviado Naila no los respondí, me quería despegar de ella para no hacerme más daño sin querer saber como se sentíria ella. Miré el de Lisa y ponía; Ese mensaje me puso la piel de gallina, supongo se abría enfadado por lo del beso ese y le contesté. <Lisa, estate atenta con quien te metes, estate atenta quien te habla y estate atenta a quien la estas amenazando.>, después me fui a ver las demás publicaciones, las de Clarck ponía; , etcétera... lo quería mucho, era el hermano pequeño de mi mejor amigo y nos llevábamos genial, lástima que dijese esas palabras pervertidas y que fuera un mujeriego, porqué sino, ya sería el típico hombre perfecto. Leí las siguientes publicaciones de Lucas, y ponía, cosa que me hacía gracia; , , <Bueno, como no contestas me voy! Te quiero! Buenas noches princesa!>; de golpe le empecé a contestar muy contenta, y sin darme cuenta se instaló en mi rostro una gran sonrisa. Cuando acabé de contestar fui a revisar el mensaje de Dilan, que izó que se me acelerara el corazón; en el celebro se me reprodució cada palabra y cada silaba, el corazón se me aceleraba cuando repasaba cada vez las palabras , parecía que me iba a salir del pecho en cualquier momento sin darme cuenta yo misma. Estaba tan contenta que tuve ganas de hacer una llamada telefónica a Naila para contarle todo lo que me había pasado esa noche -de lo malo hasta lo bueno- pero me contuve, no quería sufrir más de lo que ya sufría. Apagué el portátil y lo deje en un sofá que estaba justo a mi lado, a dos metros. Entré otra vez en la cama y cerré los ojos, en mi mente recopilaba cada momento vivido en ese fiesta. -Como Albert no sabía que mi madre estaba muerta si yo misma lo había dicho en la comida que hicimos?- pensé, pero una voz me sacó de mi pensamiento.

-Estas despierta?- dijo Albert.

-Si...- dije con la voz soñolienta.

-Es que...- se aclaró la voz y dijo- yo no quiero dejar a Lisa- dijo con la voz de un niño pequeño y añadió- me gusta, no la quiero perder por culpa de estar despojado...

-Y que quieres que haga si se puede saber?- dije un poco molesta pero dolida a la vez- Te crees que yo también tengo ganas de casarme contigo? Aunque nos casemos te puedes quedar con ella, cada uno ara su vida- dije con sufrimiento, pero que logré esconder con voz dura...

-Créeme que és muy probable que no lleguemos a casarnos...- dijo en un susurro.- Pero en fin, ahora empezaran a venir los fotógrafos y cámaras a grabarnos, como un ''celebrity''- dijo diciendo irónicamente celebrity- así que tendremos que hacer ver que estamos felices juntos, de acuerdo?- dijo, haciéndome maldecir en mi interior por haberme enamorado de este completo imbécil.

-No sé, ni me importa.- dije, y me despedí- Buenas noches.- y cerré otra vez los ojos y me puse dándole la espalda. En mis pensamientos empezó a rondar lo que había dicho y lo que había dicho una vez- , creía que no lo había escuchado? Pero... que quería decir con eso?- La piel se me puso de gallina y empezé a pensar cosas muy malas que me podía hacer; contratar un asesino para que me maté, ir en el coche y que me empuje sin más, que me tiré cuando un coche pase... muchas cosas rondaban en mi mente, hasta que al fin me dormí sin darme cuenta.

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Abrí los ojos, estaba en la habitación de Albert y mía, él estaba apoyado en el respaldo de la cama. Al verme se quedó mirándome sin decir nada, haciéndome sentir incomoda por la situación, de golpe abrió la boca y dijo.

-Buenos días- y añadió- me voy a duchar, así que no entres.

-Claro...-dije con desgana, y se fue.

Me quedé unos minutos sentada en la cama, sin saber que hacer y recordé que Dilan me había enviado un mensaje en el twitter, conforme que lo llamara. Así que me levanté de un salto y fui a buscar el móvil, pero al no encontrarlo tuve que esperar a Albert para pedirle si me podía dejar el suyo, así que espere a que saliese del baño. No espere ni diez segundos, que ya había salido del baño, con una toalla enrollada a su cintura y dejando su abdomen al descubierto, pudiendo ver su tableta dura y musculosa, haciéndome babear con tan solo verla y queriendo sentirla en mis dedos finos. Él, al verme que miraba su torso al descubierto, dijo con una voz atrayente.

-Te gusta?- dijo mirándome directo a los ojos y acercándose más hacía mí, haciendo que las mejillas se me tiñeran de rojo y no pudiese decir ni una sola palabra. Estaba a pocos centímetros de mi rostro, haciendo que pudiese oler su champú de playboy de chocolate, haciéndome relamer los labios sin darme cuenta y atrayéndome más hacía él, hasta quedar a pocos milímetros, él se acercó más haciendo que nuestras narices se tocaran. Él desvió su mirada que estaba puesta en mis ojos azules hasta mis labios rojos y carnosos, poco a poco se fue acercando, haciendo rozar sus labios con los míos, hasta darnos un dulçe y apasionado beso, que se fue haciendo más intenso cada vez.

Sus manos se posaron en mi cara, ardiendo por la vergüenza y por el beso. De golpe se separó bruscamente y...

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Siento haber tardado tanto en colgar, en serio! :( Siento el capi tan corto tambien, pero... mañana juro que cuelgo el otro!!!;) 

Beeeesos!

Simple y único (Completado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora