Capitulo 1

302 47 7
                                        

La temperatura en la habitación aumenta considerablemente. El sudor de mi frente no hace otra cosa que hacerse cada vez más notorio. Sin embargo, procuro no prestarle mayor atención, disponiéndome de esa manera a seguir disfrutando de tan placentera y ardiente tarde. Pero ningún paraíso puede ser eterno, y esta situación no podía ser una excepción. En cuanto una molesta bola de papel golpea mi cara es cuando abro los ojos con evidente molestia. Solo me basta mirar al frente para encontrarme con un par de ojos cual ámbar mirarme con cierto hastío. 

—Finalmente despiertas —dice el albino con enojo y por como veo en su apariencia bastante sofocado con este horrible clima—. Esto es el colmo Shadow, ya pasaron dos semanas y hasta el día de hoy no te dignas a reparar el maldito aire acondicionado. Te dije que si no lo haces por lo menos contrates a alguien para que haga el trabajo.

—¿Y gastar dinero en algo que yo mismo puedo reparar? Ni que estuviera loco —le respondo ya cansado de que me vaya con el mismo reclamo desde hace dos semanas —. Tú mejor que nadie sabe que nuestro tiempo libre ha sido muy limitado gracias a todo el trabajo que nos llega. Trabajo que por cierto llena tus propios bolsillos de dinero.— termino de decir para que ya no pueda reclamar, lo que por supuesto tiene éxito ya que el albino a pesar de mostrar su frustración ante esta situación termina por resoplar y concentrarse en el periódico a modo de evadir mi mirada. 

Sonrío ante mi evidente victoria, pero por mucho que no quiera reconocerlo sé que Silver tiene razón y ya es momento de arreglar ese condenado aire acondicionado. Yo mismo ya estoy cansado de sudar a causa de este endemoniado calor y que ese sentimiento de incomodidad no se vaya, sino hasta que logre tomar una ducha helada. Lo mejor será aprovechar este día ya que desde ayer que terminamos nuestro último trabajo y después de mucho tiempo podemos gozar de un merecido descanso. Me levanto de mi silla y rodeo mi escritorio para dirigirme a la puerta del  closet, que es donde guardamos la caja de herramientas entre algunos objetos para el aseo semanal de la oficina. Apenas logro encontrar la condenada caja un fuerte golpe en la puerta me sobresalta.

—¡Malditos sean! —exclama Silver quien pierde toda esperanza de que el aire acondicionado sea reparado el día de hoy —Por favor Shadow, hagamos como que estamos ocupados y no aceptemos ningún trabajo más al menos por una semana. 

—Sabes bien que no podemos hacer eso— le digo con la misma resignación —. Puede que sea importante y si tenemos la oportunidad de ayudar no debemos evadirlo. Ahora permite al cliente pasar.

En cuanto lo ordeno el albino obedece con una expresión molesta en su rostro. Pero en cuanto abre la puerta su semblante cambia a uno sonriente como el sol. Sin embargo, antes de siquiera poder dar la bienvenida al cliente que se acababa de presentar, este ingresa casi dando un empujón al erizo albino. No pasa ni dos segundos para que pueda deducir la clase de cliente que estoy a punto de atender. Su apariencia lo delata por completo. Los anillos de oro y diamante que adornan sus dedos, el lujoso traje y sombrero que porta orgulloso, esos zapatos negros que brillan casi como joyas, y cómo pasar desapercibido con ese bastón de oro y plata que porta sin temor a que alguien pueda arrebatárselo; todo eso no hace más que delatar toda la fortuna que este posee. No obstante, su expresión es de completa molestia y preocupación. No me imagino qué clase de problemas puede estar acarreando alguien de su posición, pero eso no me permite menospreciarlo. Tiene un problema y es evidente, razón suficiente para atenderlo con la misma cortesía que al resto y de ser posible tratar de ayudarlo. El cliente me observa ansioso y algo atemorizado por lo que me apresuro a sentarme en mi enorme sillón para así invitarlo a tomar asiento frente a mí del otro lado del escritorio. Por supuesto el cliente no se hace esperar y de inmediato lo veo descansar su cuerpo en el sillón indicado.

—Disculpe mi repentina intromisión, pero el problema en el que me encuentro es por demás muy importante - dice el azulado frente a mí —. Su reputación como uno de los mejores detectives en el mundo lo precede.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 18, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Rosa MisteriosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora