No es mi vida, es solo una misión más

Capítulo 42

—Vaya, vaya. Miren que tenemos aquí —le dijo Bonnie a una chica nerd que estaba sentada comiendo sola a un par de mesas de aquí.

—Alexa, Alexa —me llamaba Sam, sacándome de mi imaginación.

— ¿Si? —la miré, escuchando como Bonnie le gritaba a la chica.

—Estabas algo ida —se rio y comió de su plato.

Recordé mi alucinación de sacarle las extensiones a Bonnie, y vaya que algún día lo haría.

—Mira ahí viene tu queso —la moleste indicando a Derek.

Se sonrojo.

—Necesitas algo de sal ¿no? —contraataco. Y yo me quede sin una respuesta.

— ¿De qué hablan? —se sentó al lado de Sam, Derek.

—De la tarea de Química —respondí.

— ¡Feliz Cumpleaños! —entre a la habitación de Thomas.

— ¡Alexa! —sonrió y camino hacia la puerta con las manos al frente tratando de alcanzarme.

—Feliz Cumpleaños —le pase una caja delgada envuelta en un papel con pequeños autos de colores.

—Gracias —la abrió sentado en su cama y saco un papel extrañado. — ¿Qué es?

Me senté en su cama a su lado.

—Cuando quieras, con esto —tome el papel de su mano. —Iremos a buscar a tu primer perrito —sonreí.

—Pero se me perderá —dijo triste.

—El siempre estará contigo, ira contigo a todos lados.

— ¿Lo juras? —giro su cabeza hacia mí y me miro con ojos vacios.

—Lo juro —el sonrió.

—Gracias —me abrazo con sus pequeños brazos.

Alguien toco la puerta.

—Pase —dijo Thomas.

—Feliz cumpleaños, campeón —entro Derek a la habitación con su traje blanco del instituto.

— ¡Derek! —se bajo rápido de la cama Thomas.

—Cuidado —él lo tomo y lo lanzo al aire, atrapándolo. —Hay alguien que le gustaría verte —le dijo Derek.

— ¿Quién? —pregunto Thomas mientras Derek lo bajaba.

—Entra —indico Derek a la persona detrás de la puerta.

—Hola —sonrió mientras entraba Logan.

Sentí como mi sonrisa se agrando sin mi permiso al verlo. Su mirada se encontró con la mía y el sonrió.

—Feliz Cumpleaños —dijo Logan tendiéndole una caja a Thomas. Quien al parecer estaba enojado por la ausencia de él. Thomas tanteo el aire hasta que alcanzo la caja y la abrió entusiasmado. Reí, todo enojo se le quitaba con un regalo.

—Ayúdame —le pidió Thomas a Logan tendiéndole la caja de un aparato electrónico.

El sonrió y le abrió la caja. Pasándole, luego de unos minutos, una bolsa pequeña con un teléfono negro dentro.

Thomas lo tomo.

—Es… —dijo feliz ya imaginándose que era. Toco las teclas de su nuevo teléfono y su sonrisa se acentuó más.

—Un teléfono en braille —termino Derek.

—Exacto —dijo algo celoso Logan.

—Y mi regalo —dijo Derek. —Es una tarde en —miro a Thomas. —Adivina.