Acosador [Bunny] [WhatsApp]

[~UPS~]

Desde lejos se podía apreciar al chico de naranja correr, para unos podría parecer algo normal, otros esperaban ver un desastre, el solo esperaba no morir y volver a empezar. Necesitaba llegar a el, lo necesitaba, ahora tenía más razones para amar a ese pequeño ser, tal vez al inicio solo le intereso sexualmente, pero se dio cuenta que realmente ese chiquillo de cabellos rubios y ojos de un azul celeste, podría ser lo mejor que le pudo haber llegado a la vida, ¿cómo es que nunca se dio cuenta de existencia de niño? De su hermosura, inteligencia, amabilidad, su todo. Como era posible que a ese hermoso ángel lo hirieran tanto.

Ya no más, el haría todo lo posible para tenerlo a su lado y nunca más sufriera.

Kenny había llegado hasta la casa de los Stotch, se apoyo en sus rodillas para tomar aire, nunca imagino correr mucho y salir con vida, o por lo menos sin alguna herida, volvió a tomar compostura y miro a la casa frente a el, ese era el momento, solo ese, nada lo podía arruinar. Nada.

-¡¡Butters!!- Grito lo más fuerte que su garganta podía en ese momento, llamando así la atención de quienes pasaban por ahí y también de su amor.

El chiquillo miro por la ventana, al notar quien era el portador de aquella voz ronca, salió lo más rápido que podía de su casa.

Al pequeño joven se le notaba que hace poco había llorado, sus ojos rojizos e hinchados, para nuevamente soltar lagrimas.

-Kenny- murmuro.

Ambos estaban a unos metros de cada uno.

Nada los podría separar.

Ni sus padres, ni las personas que se quedaban mirando.

-Butters, yo...-

Comenzaron a dar pasos cortos.

Estaban tan cercas.

-¡¡Kenny!!-

Un piano había caído arriba del chico de capucha naranja, matándolo al instante.

-¡Estúpido! ¿Cómo se te ocurre abrir la compuerta en medio del cielo?

-Perdón jefe

-¡AGH! Ahora perdimos mercancía

-¡oh vamos!, ¿qué podría pasar si no llevamos los pianos?

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Nope, aun no, aun estoy pensando en si dejarlos ser felices o poner un final triste... amo los finales tristes