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"Vaya, que grande"  Murmura Harry al entrar a la casa.

Louis se muerde el labio intentando no soltar un comentario no apropiado para el niño bonito "Si pero no estudiaremos aqui. Iremos a mi habitación".

Harry siente atragantarse con su propia saliva. "¿A tu habitación?".

Louis reprime una sonrisa, le parecía graciosa   la actitud del chico pero tampoco era para demostrarlo "¿Tienes algún problema con eso?" Suena intimidante.
 
Si, queria decir Harry. Nunca había estado en la habitación de un chico y el que Louis fuera así- no ayudaba a bajarle los nervios "No, no. Solo que.. Nada. Olvidalo. Podemos ir".

Pósters de diferentes bandas de rock, ropa tirada en el suelo y acumulada en la cama, platos y vasos vacíos en el escritorio era lo que se veía en la habitación de Louis ni bien entras.

Harry arruga su nariz. Había un desagradable olor que no soportaba, parecía que escondieron un cuerpo en esa habitación y lo dejaron ahí para que se descompusiera - Tampoco para tanto pero el rizado suele exagerar.

Louis se da cuenta de eso. "¡Oops!" Dice mientras saca de debajo de su cama una caja de Pizza, aun con Pizza, pudriendose. "Creo que mi cuarto esta un poco sucio".

"Si, un poco" El rizado rueda los ojos procurando que el gesto no lo vea Louis. ¿Es que acaso no conocía la palabra 'Limpieza'?.

El castaño toma la ropa de la cama y lo traslada a una silla cercana, la ropa se cae y se encoge de hombres importandole poco "Sientate" Ordena.

Harry obedece y se sienta al borde de la cama poniendo su mochila en su regazo "¿Con que curso quieres comenzar?".

"Algo que sea fácil" Contesta Louis, tomando una pequeña pelota y lanzandola constantemente a la pared.

"¿Álgebra?".

"Tienes que estar bromeando".

Opuestos | Larry Stylinson. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora