Jinkook | Enséñame a estudiar.

1K 71 21
                                    

Nombre: Enséñame a estudiar.

Tipo: en donde Jungkook y Jin son hermanos. (Sí, me quedó gustando eso)

Descripción: Jin tiene 23 años y Jungkook 18. Jin es un hermano insufrible pero puede ayudar a Jungkook con sus problemas en matemáticas. Todo tiene un precio.

Clasificación : +18 (incluso si la mayoría de ustedes no los tiene), esto son cosas de Belcebú.

Clasificación : +18 (incluso si la mayoría de ustedes no los tiene), esto son cosas de Belcebú

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jeon Jungkook iba reprobando la materia. Esto era una preocupación muy seria para sus padres y profesores, pero no para él, sabiendo que su destino estaría en el ámbito artístico y no en el académico.

Jeon Jungkook es el chico perfecto. Extremadamente genial en todo lo que hace, es capaz de ser bueno naturalmente en tantas cosas, que pierde un poco la cuenta tratando de recordar.

Pero hay una cosa en la que no es bueno; las matemáticas.

Es así, como ahora se hallaba en peligro de perder su grado escolar, por ir fallando en tres asignaturas; álgebra, geometría y cálculo.

Era un verdadero problema porque de esto dependía su futuro académico, una mancha como las matemáticas no podía dañar su expediente, quería poder aspirar una beca, no porque la necesitará económicamente pero sí porque quería lograr cosas por sí mismo.

La carga que pesaba sobre sus hombros era muy grande, sus padres siempre se habían jactado de que tenían el hijo perfecto, nunca vivió a la sombra de su hermano mayor, su talento natural permitió que fuera su hermano mayor quién viviera a su sombra. Simplemente era la manera en que las cosas eran. Parecía natural.

Su hermano mayor, cómo lograba acomplejarlo a veces, quien tenía un carisma tan natural para atraer a las personas. Todos lo admiraban a pesar de no destacarse especialmente en algo, aún así llamaba la atención como si fuera un foco en la oscuridad. Ridículamente popular, no había persona que no conociera a Kim Seokjin, también llamado el Príncipe del hielo.

Eso era otra cosa, Jin era muy amable con todo el mundo pero eso no lo hacía una persona realmente cálida. Era como si fuera una especie de fachada que nadie aparte de su amigo Yoongi era capaz de atravesar. Todos conocían al príncipe del hielo, pero nadie lo hacía realmente. Entrar en él era inconcebible pero eso no hacía nada más que aumentar su atractivo y su exagerada popularidad.

Como su hermano, le parecía insufrible, nadie sabe que a puertas cerradas, el Príncipe lo molestaba todo el tiempo, burlándose de él, haciéndole bromas sospechosas y obligándolo a hacer cosas.

Detrás de su fachada, Kim Seokjin era un chico malo, del tipo que ves en la calle y te cruzarías de acera. Incluso ahora le parecía increíble que sus padres no hubieran notado todos los tatuajes que se extendían por el pecho y los brazos de su hermano.

Kim Seokjin vendía droga en su universidad a pesar de no necesitar dinero, sólo por el placer de que la gente le rogara por ello.

Kim Seokjin tenía notas demasiado altas y se le veía saliendo de las oficinas de los profesores a horas no adecuadas.

A pesar de todo, su hermano con tintes sociopaticos era demasiado inteligente.

Es por eso que ahora que tenía que entrar el taller de cálculo, tuvo que tragarse su orgullo para ir a tocar la puerta de su hermano mayor.

— Seokjin-hyung. — comentó detrás de la puerta esperando a verlo.

— ¿Qué quieres, mocoso? — escuchó desde adentro a duras penas por el heavy metal que se escuchaba de fondo.

—Abréme, necesito pedirte algo.

—Si no es una mamada, no entres. — Jungkook rodó lo ojos con fastidió y pegó su frente a la puerta con frustración.

—Sabes que no es eso. Hyung, necesito ayuda con matemáticas.

— ¿Y a mí qué?

— Pues, podrías ayudarme con un taller, sé que eres bueno con los números.

—Soy bueno con mi boca también, pero no quieres comprobarlo, sad. — Jungkook nunca había entendido porqué su hermano le daba esos comentarios sucios a su hermanito mejor pero ya se había acostumbrado.

—Basta, eres mi hyung, es tu responsabilidad ayudarme. — comenzaba a sentirse molesto.

—Y una mierda, no hago nada gratis. — todo se quedó en silencio hasta que abrió la puerta observando al menor estoico. — ¿Qué gano yo?

Jungkook pasó saliva, su hyung al parecer había estado haciendo ejercicio porque se hallaba sin camisa y con sudor resbalando por su abdomen marcado. La imagen lo hizo sentirse raro, pero sacudió su cabeza para dejar de pensar en aquello.

— ¿Qué es lo que quieres?

— Tengo algo en mente, pero primero promete que harás cualquier cosa que te pida. — respondió Jin con seriedad.

— Sólo si prometes ayudarme a pasar la materia.

— Bueno, tenemos un trato. — replicó tranquilidad el mayor encogiéndose de hombros.

— Prométalo, hyung. — Jungkook tenía algo de problemas de confianza cuando tenía que ver con su hermano.

—Lo prometo. Tu también, promételo.

—Lo prometo.

—Lo prometo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


— Hyung. — pronunció en cuanto el contrario contestó el teléfono al otro lado de la línea. — ¡Pasamos la materia!

Escuchó una risa como de limpiavidrios. — ¿Pasamos? — Jungkook se avergonzó un poco pero estaba demasiado aliviado como para preocuparse por eso.

— Aprobé. — corrigió. — Toda la rama matemática, incluso el profesor me felicitó, dijo que creía que yo era un caso perdido y que no sabía que clase de brujería había hecho para lograrlo, porque estaba seguro de que mis capacidades mentales no eran las mejores.

— ¿Tienes su nombre? Quiero pegarle. —. la voz de Jin se escuchó amenazante y entonces Jungkook recordó lo sobreprotector que su hermano siempre había sido con él.

— Está bien, hyung. De todas maneras ya no importa, estoy cerca de graduarme.

— Vaya, mi Kookie ha crecido tanto. — escucharlo así lo avergonzó en demasía, haciendo que sus mejillas quemaran y agradeciendo que Jin no lo pudiera ver. — Cuando vuelvas a casa, cierra con candado y ven a mi habitación.

— ¿Para qué? — cuestionó Jungkook inquieto.

— Te voy a contar cuál es tu parte del trato. — dijo Jin con sencillez.

— Espero que no sea nada ilegal. 

— Tranquilo, después de todo ya eres mayor de edad. Te espero. — Jin colgó la llamada.

¿Por qué Jin había dicho eso? ¿Qué importaba lo que fuera a pedirle?

Jungkook tenía miedo.

(1/2)

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 14, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Enséñame ✘ TaejinkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora