Thanks God for gravity (Drabbletober Sense8)

Pet names

A Wolfgang siempre le había hecho mucha gracia, aun cuando sólo espiaba la vida cotidiana de Kala en la distancia, que Kala y Rajan se denominaran a sí mismos "esposos". Al principio lo encontraba entre infantil y arcaico. Luego, después de tener a Kala, de besarla, de acariciarla, de amarla... lo único que sentía eran celos de Rajan. Porque él tenia derecho a llamar a Kala "esposa", y veía los ojos de Kala, llenos de amor, cada vez que llamaba "esposo" a Rajan.

Pero eso había sido antes de su secuestro por la BPO. Desde el rescate, seguía sintiendo celos, pero Rajan era... bueno, Rajan. No podía sentirse celoso de que Kala lo quisiera, y sabía que la adoraba con locura. Tanto, que no había impedido a su esposa estar con él y amarlo, como Kala lo amaba a él.

Y por supuesto, mucho antes de la boda de Nomi y Amanita. Antes de poder compartir y vivir con Kala y Rajan la felicidad y el amor. A demás del sexo, claro.

Aún así, después de tanto tiempo, echaba mucho de menos que ellos no tuvieran un apodo cariñoso para él. Ni él para ellos. Tampoco se atrevía a pedirlo, demasiado sentimental. Era algo privado entre ellos. Como lo era la conexión sensate entre Kala y él, o las noches de cricket o fútbol y cerveza entre Rajan y él. Eran sus pequeños reductos.

Y aún siendo capaz de racionalizarlo y entenderlo, se sentía celoso de esa pequeña muestra de intimidad que no compartían con él. 

Le había preguntado a Danny y ella le había solucionado muchas cosas. Que no se dejara llevar por los pensamientos negativos, que fuera él el que les pusiera los motes cariñosos que quisiera y que sobre todo, si era muy importante para él, se lo dijera a Kala y Rajan. No sabia si sería capaz.

Al final había optado por dejar el tema un poco atrás. Ya pasaría eventualmente, si tenía que pasar. No era tan importante, sólo era un nombre cariñoso...

*****

- ¡Buenos días, mi amor! ¿Hace mucho que estás despierta?- Los susurros mal escondidos a través de la puerta, lo despiertan. Aún tenía tics de su vida en Berlín.

- Un rato, me ha despertado la luz y no he podido volver a dormirme. ¿Tienes mucho trabajo hoy?

- No, hoy había pensado quedarme en casa con mi bella esposa y mi amado Vrika a retozar en la piscina  un rato, salir a comer y llevaros al cine esta tarde- "Oh! Por favor, los estoy oyendo besarse desde aquí"

- Me encanta el plan... ¿despertamos a Wolfgang?

- ¡No! Tampoco hay prisa, déjalo dormir. ¿Has desayunado?

- Aún no, ¿Qué quieres preparar?

Momentos después sólo se oyen cacharros de cocina y risas de vez en cuando. Wolfgang lleva una sonrisa placentera desde hace un rato. Vrika...

- Es un demonio lobo hindú, que consiguió engañar a Shiva. ¿Te molesta?- Kala estaba ahí, en la cama, a horcajadas sobre él. Se inclinó para besarlo.

- No, para nada. Sólo que nunca me lo habéis llamado a mi.

- Rajan no estaba seguro de si te iba a gustar el nombre de un demonio- Wolfgang sonrió aún más, con autosuficiencia. Kala onduló las caderas levemente y sonrió también.- Como veo que ya estás despierto ¿Quieres salir a desayunar con nosotros?

- Quizás ahora no es la mejor idea... -Se vio interrumpido por Kala, besándole.

- Quizás es la mejor idea del día- Y con eso, desapareció.

Vrika. Le gustaba, tenía personalidad... Ahora tenía que buscar él unos apodos cariñosos para ellos...

Levantándose de la cama, sin molestarse en ponerse nada para tapar su incipiente erección, salió a la cocina a desayunar con sus amantes.