[Midnight: Colinas Ashes]
//PoV Normal//
Impresión, sorpresa, esa era la mejor forma de describir lo que veían. Aquella mujer que estaba frente a ellos, con un aspecto elegante, con un color inusual de cabello, así como sus ojos con aquellas pupilas. Sabían por Meikay, que aquella mujer era su maestra, pero era sorprendente... Demasiado sorprendente pues...
(¡Es joven!) -Era el pensamiento de los tres.
Y estaban completamente en lo cierto, aquella mujer era joven, si bien a simple vista parecía una mujer a sus 30 años, Meikay sabía perfectamente que no era así. Eran los beneficios de ser un Ethereo, el ser longevo e incluso poder moldear tu cuerpo a la edad y apariencia e incluso ahora sabía que podía alterar su ser para parecer a cualquier raza.
Para cuando salieron de la estupefacción, veían a Meikay y a Kazuko en el preciso momento en que ambos solo se dijeron algunas palabras.
Tenemos mucho, de que hablar -dijeron ambos mirándose seriamente.
Meikay, puedo ver por tu alma... Que aun cuando tuviste la oportunidad de matarlo, fuiste segado por tu ira. Eso te servirá de lección, pues al final, ¿De qué sirve pelear de esa forma? Al final de todo. No te llevo a nada –dijo la mujer seriamente a un Meikay que bajo la mirada- sin embargo... La derrota de ese supuesto dios, el recuperar Heiwa e incluso confiar en tus compañeros para dar pelea a algo como un Ancient Divine y dejarlo cansado son motivos de que vas creciendo mentalmente. Todo esto es parte de la lección que nos da la vida, estoy orgullosa -El joven miro sorprendido la sonrisa de su Maestra– jeje, parece que voy a volver a aumentar la dificultad de tu entrenamiento.
¿Qué? ¡EEEEEHHHHHH! –Grito Meikay ante aquello, solo para sorprenderse más cuando los Ethereos Celestiales que les rodeaban gritaban con orgullo– Kazuko-Sensei, no es por ser grosero y eso, pero, ¿Qué hacen todos estos Ethereos Celestiales? Sin duda me sorprendió, ya que me costó sentirlos.
Bueno, simplemente pensé que sería bueno que vieras a otros de tu misma casa Etherea... Y no es que te costara, solamente que olvidaste algo, puede que ya estes recuperado de tu pelea anterior, pero aún no te recuperas del todo. La magia y el Anima son cosas distintas, además de eso están tu [Dual Skill] no me había percatado nunca de estas... Pero la presión que tienes en tu cuerpo a causa de estas también afecta -explico mirándolo directamente- por ello voy a aumentar tu entrenamiento, pues el tiempo que estuviste sin usar esas habilidades, tienes que acostumbrarte a ellas para que no te pase eso tan rápido. Además de aumentar tus capacidades físicas y a controlar mejor tu magia y anima para cuando sea él momento... el tiempo corre después de todo.
Espere... Sensei, sé que necesito esto, pero necesito también hablar con usted de algo -dijo este seriamente- por favor.
... En eso tienes razón, además. Yo también necesito respuestas sobre algo -se volteó mostrando su espalda al Ethereo Dragón- sígueme.
Entiendo -Meikay camino hasta estar algo cerca de su Maestra.
¡Espera! -Ambos iban a seguir, pero fueron detenidos por un grito de Valentine- llegamos a esto juntos, es lo justo también acabarlo justo Kaychi.
Es verdad, ellos también deben venir -dijo Meikay sonriendo a sus acompañantes y luego volteando a ver a su maestra- por favor.
... De acuerdo, respetare eso -dijo seriamente- ustedes también vendrán -dijo a los otros Ethereos.
El grupo empezó a caminar junto a Kazuko, mientras eran seguidos por los otros Ethereos Celestiales. Tanto a Faye, Mercedes, Valentine y Sorem se encontraban interesados del grupo de Ethereos, incluso Meikay pues era la primera vez que veía a muchos de ellos. La mayoría se podría decir que eran humanos, pero algunos tenían rasgos de otras especies, Nekomatas, Elfos, había incluso lo que parecía ser un ser con rasgos de un pez remo, algunos gigantes que medían hasta los 4 metros.
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Legend Reborn [Re Edición]
AdventureElla era alguien que siempre dio todo de si, sacrifico muchas veces su bien estár por mi, salvaba a la gente y me dio todo, ella tenia un sueño, el sueño y deseo de que todos vivieramos como uno... Pero al final lo perdio todo, hasta la vida sin que...