~Daddy King~

[1]

.Dos horas antes.

Jimin se encontraba durmiendo hermosamente en su cama, la cual no era tan grande pero para el es más que suficiente.

Sus padres estaban de viaje en Italia por trabajo y no volverían si no hasta el mes próximo y como Jimin a pesar de tener 17 años, siempre fue muy responsable, lo dejaron sólo en la casa.

Faltaban tan sólo dos hora para que su clase de Biología con el profesor Jeon comenzara.

Jimin olvidó programar para esa mañana su alarma, ya que la noche anterior se había desvelado mirando una maratón de Harry Potter.

Se despertó 30 minutos antes de que su clase comenzará.

-Mierda..- musitó el menor mientras miraba la hora en el reloj que tenía en su mesita de noche.

Se levantó rápido de la cama y se tomó una ducha "rápida" de quince minutos, se vistió lo más rápido que pudo, tomó su mochila, bajó de su habitación, tomó una manzana de la cocina y luego salió de su casa, no sin antes cerar la puerta con llave.

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Corrió hasta la secundaria y tras pasar como un alma en pena por los pasillos a la velocidad de la luz, se detuvo en la puerta de su aula, pues no quería entrar por dos razones: Una, por que estaba llegando 40 minutos tarde ya que el colegio quedaba muy lejos de su casa y dos, por que no quería tener que soportar el discurso que seguramente el profesor le daría por interrumpir su clase y además llegar tarde.

Respiro profundo antes de entrar y tomó el picaporte para luego abrir la puerta.

Al entrar efectivamente, Jeon, su profesor estaba allí, lo miraba desde la silla de su escritorio, con el semblante serio de todos los días, el hombre era todo un calienta bragas y Jimin sabía eso, por eso nunca se hizo ilusiones con el, por que se supone que es su profesor y nunca le miraría con otras intenciones, además siempre lo ve con una que otra profesora por los pasillos en situaciones comprometedoras y eso a Jimin le parece completamente vulgar.

Lo que Jimin no sabía era que el pelinegro estaba completamente loco por el rubio y tenía unas ganas inevitables de llevárselo a la cama, aunque obviamente no dejaría que su reputación como el mejor follador de la institución se echará a perder, por eso tenía que ser muy cuidadoso a la hora de tratar de seducir al menor.

Jimin, sin hacer ruido alguno, se colocó en su pupitre y comenzó a escribir en su carpeta lo que estaba en el pizarrón, cuando terminó sólo se dedicó a observar lo escrito y enseguida lo entendió, pues se le hacía fácil.

Luego de haber entendido todo, se dio cuenta de que su profesor lo estaba mirando desde su escritorio y sin darse cuenta Jimin le sostuvo la mirada.

Jungkook notó eso y continuó mirándo cada parte de su rostro, a pesar de estar a una distancia de algunos 3 metros, podía apreciar perfectamente las facciones del chico.

Paso de mirar sus ojos, a mirar su nariz, sus mejillas rellenitas, que ahora se encontraban algo rojizas, sus labios.... sus malditos labios, esos que tanto quería probar, esos con los que soñaba hace más de meses, cuando el menor comenzó a asistir a sus clases, esos hermosos labios...

Tuvo que salir de sus pensamientos cuando su celular empezó a soñar, aunque no quería despegar la mirada de Jimin, debía atender, su madre era quien lo llamaba.

-Chicos, voy a salir un momento para atender una llamada- Habló Jungkook para luego salir, eso hizo que Jimin volviera a la tierra y se diera cuenta de cuanto había mirado a su profesor.

Todo el rostro de Jungkook quedó grabado en la cabeza del menor, sus hermosos ojitos, esa nariz tan peculiar, sus hermosos labios y esa sonrisa de conejito que enamora a cualquiera.

Sin embargo comenzó a plantearse varias preguntas sin respuesta alguna, "¿esta mal mirar de esta forma a mi profesor" "¿por qué se me hace tan lindo?" "¿me gusta?" "¿gustará el de mi?" "Que te pasa Jimin, ya no pienses en estas cosas".- Habló para si mismo.

La clase avanzó normal, era la única que tenía ese día, así que luego saldría a tomar algo con sus amigos.

Cuando el profesor volvió a entrar al aula, tomó asiendo en su escritorio.

Al finalizar la hora, el timbre que daba por terminada la clase, sonó, y todos se apuraron a salir casi corriendo como si se estuvieran haciendo pipi.

Jimin tomó sus cosas y las guardo en su mochila con tranquilidad, cundo levantó la mirada vio que el profesor Jeon y el eran los únicos allí.

Hizo ademán de salir del aula pero el lo detuvo con un simple aclaro de garganta.

-Mggm..- soltó aclarando su garganta.- Park Jimin, hoy haz llegado tarde e interrumpiste mi clase.- hablo Jungkook dándole una mirada de enojó a Jimin.

-Lo-Lo se profesor, disculpe no volverá a pasar- hizo una reverencia e intentó por segunda vez salir del aula, pero fue imposible ya que Jungkook lo tomó del brazo.

Se dio vuelta y Jungkook soltó su brazo para tomarlo por la cintura y acercarlo más a su cuerpo para luego depositar un tierno y suave beso en los carnosos labios de Jimin.

Luego de separarse de su alumno por completo, habló- Claro que no volverá a pasar Park.- y seguido vio como Jimin salía corriendo del aula.