Capítulo #9

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Luego de lo ocurrido en el centro comercial no pude evitar pensar en aquella chica ¿también se convirtió como nosotros de la misma manera? ¿Por qué mató a mi vecino? ¿Por qué no le da miedo que vean que es distinta? Con eso me refería a que ella era una Sirena.
También, no podría evitar más el mentirle a Tom y decirle la verdad el quien realmente soy. Durante este tiempo siento que debo ser sincera con el, realmente me di cuenta que estaba enamorada de el, pero si pensaba decirle mis sentimientos, debía decirle quien soy realmente también.

Caminaba rumbo a su casa, jugaba con mis manos por que estaba muy nerviosa. Miré una piedra y no pude evitar patearla, hasta que vi que en lugar de caer en un lugar apropiado cayó en el pie de alguien

—Lo siento —susurré apenada. —No era mi intención... Yo solo

—No te preocupes —respondió aquella persona amable que no olvidaría su voz.

—Abuela de Tom me alegra verla —sonreí mirándola. —Y lamento que el encuentro haya sido de esta manera

—No te preocupes —negó riendo levemente. —No pasa nada

—¿Vas a casa de Tom? —preguntó con una sonrisa.

—Humm... Bueno la verdad si  —hablé rascándome la nuca y moviendo mi pie de un lado a otro.

—Pues entonces vámonos juntas —animo amablemente, a lo que yo asentí y continuamos con el camino. —Y dime ¿por qué estás tan nerviosa?

—Es que —balbucee nerviosa, luego solté un suspiro, ella mas que nadie era la consejera perfecta para esta situación.  —Hoy pensaba decirle toda la verdad a Tom, usted sabe de que... Pero tengo miedo, mucho miedo que me rechace —susurre con tristeza.

—Olvídate de eso —negó tomándome de la mano. —Tu simplemente dile la verdad, el te aceptará tal y como eres por que el te quiere —sonrió mirándome. 

Esas palabras hicieron que mágicamente mis nervios se esfumaran, y como agradecimiento le di un abrazo, lo sentí un gesto muy sincero

—Muchas gracias —sonreí al separarme.

Continuamos caminando hasta llegar a la casa, la abuela de Tom abrió la puerta y gritó:

—Tom, tienes visita —su abuela caminó hacia la cocina despidiéndose con un gesto.

Yo me quedé junto a la puerta, cuando escuché pasos provenientes de las escaleras, volteé y vi a Tom ahí sonriente

—¡______! Me alegra mucho verte —dijo dándome un abrazo a lo que yo correspondí.

—Tom —susurré nerviosa. —Hay algo que quiero decirte

—¿Qué pasa? —habló preocupado tomando mi mano. —Dime

—Pero no aquí, vamos a un lugar tranquilo, como la playa

—Está bien —sonrió y asintiendo. —¡Mamá ya regreso! —gritó pero no obtuvo respuesta.

Caminamos a la playa que realmente no quedaba lejos de su casa, iba muy nerviosa y pensando en como se tomaría esto Tom. Aunque su abuela me había tranquilizado, una parte de mi tenia miedo al rechazo

—Tranquila —habló con su dulce voz tomando mi mano y entrelazando nuestros dedos, yo me sonroje.

—Está bien —sonreí mirando nuestras manos entrelazadas.

Al llegar a una playa solitaria, nos acercamos un poco a la orilla, admiramos un poco la vista y le sonreí. solté su mano y finalmente tome valor

—Solo necesito que no salgas corriendo después de esto —traté de bromear un poco para que mis nervios se fueran.

—Está bien —rió levemente.

Yo poco a poco entré al mar pero sin voltear hacia donde el estaba, me adentré al agua, mi aleta salió un poco del agua; no estaba segura de voltear pero tenía que hacerlo.
Al voltear me di cuenta que Tom tenía sus manos en la boca asombrado, lo cual fue un poco gracioso y solté una pequeña risa

—Tú... —alzó la voz por la distancia en la que estábamos.

—Yo... Deberías venir, no te hago ningún daño —grite de la misma forma.

Tom se quitó sus zapatos y su ropa quedando solo en ropa interior, después entro al agua y se acerco a mi

—Yo... Yo... De verdad no me esperaba esto ______ —habló sorprendido, mirando mi cola.

—Ni yo, simplemente pasó —me encogí de hombros. —Tenía miedo Tom, mucho miedo, que después de esto salieras corriendo o ya no quisieras verme —susurré cabizbaja.

—Pero ya viste que no paso —sonrió tomando mi barbilla para que lo volviera a mirar. —Quieras o no sigues siendo tu, y yo me enamoré de ti por lo que eres

Al escuchar eso me sonrojé, Tom me abrazó por la cintura y poco a poco se fue acercando, hasta que juntamos nuestros labios con un hermoso beso. Nos separamos y me escondí en su cuello, después de estar un rato así quedamos frente a frente y nos volvimos a besar. Yo sentía algo mágico, ese chico correspondía mis sentimientos. Sentía que alrededor de mi salían mariposas de muchos colores yendo a un mismo camino.

Mermaid [Tom Holland] (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora