Me desperté en la mañana después del extraño sueño de mi triste infancia. Me levanté de mi cama ya que hoy tenía que hacer algo para Hibiki-san, tenía que ver con los chicos. Ellos no recuerdan nada del pasado.
Me levanté, desayuné, me puse un hermoso conjunto que me había comprado hace un par de días atrás.
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Mire mi teléfono a ver dónde era que me iba a encontrar con Hibiki-san. Después de mirar y hacer todo lo que tenía que hacer salí de casa con ansias de ver al hombre que me crío y me protegió siempre.
Salió de su casa rumbo al parque donde había quedado con el mayor. Al llegar se encuentran y comienzan una muy animada
-Hibiki-san para que me llamo. Por favor tengo que estar con Kidou y el resto dentro de un par de horas- hablo el omega menor mirando al mayor con cierta curiosidad.
-Tachimukai como sabes tú eres la diosa de los pecados. Necesito que los vigiles a todos- hablo el alfa para mirar al pequeño -creo que ya perfeccionaste los viajes astrales cierto- completo el mayor sorprendido al menor
-Hibiki-san como sabía de mis viajes astrales- hablo Tachimukai con cierto asombro
-Se muchas cosas de ti que aún no es el tiempo de contarte pequeño. Pero créeme que llegara el día en que todos los secretos saldrán a la luz- hablo el alfa acariciándole la cabeza del pequeño omega con cariño -Bien ahora no tardes mucho. Me llamas cuando sepas algo de los chicos vale-
-Si yo lo llamare- hablo el omega levantándose de su sitio y despidiéndose del mayor para poder empezar su viaje.
Al llegar a su casa se conecto con su espíritu. Cerro sus ojos para concentrarse más y así poder salir de él.
Una vez que el espíritu de Tachimukai está afuera. Empieza el recorrido *me preguntó donde podrán estar. Bien empezaré con Kidou* llegó hasta la gran mansión de Kidou adentrando su espíritu en ella. Vio a Kidou dándose una buena ducha mientras cantaba su parte de la nueva canción *carajo la nueva canción. Lo olvidé por completo. Ahora iré donde Mido-chan* fue a la heladería favorita de Midorikawa y lo vio comer helado a montón. Una silueta lo hizo salir del trance de Midorikawa, esa silueta era más que conocida. *Tsunami eres tú* lo siguió al alfa hasta una enorme casa en donde entró y encontró a el resto de los pecados charlando mientras que varios acariciaban a sus acompañantes. *Tan bajo han caído chicos* hablo el pequeño mirando como una chica beta que con su ropa dejaba mucho a la imaginación se acercaba a Tsunami sentandose en sus piernas. Provocando que el pequeño le saliera un grito, haciendo caer uno de los jarrones más preciados para el escritor.
-Que fue eso chicos- hablo la chica beta que tenía Endo el los brazos
-Solo fue el jarrón que se callo- hablo el escritor alfa.
*Saben que hablaré ahora* se acerca y le susurra a Tsunami -Vete de aquí. Tú amas a otra persona un Omega para se especifico. Aún no te diré que es pero debes respetarla.
-Ya callence chicos no me deja concentrarme- hablo el surfista mientras sus amigos se burlaban de el-
-Ya perdiste la cabeza palmera andante- hablo el chico alfa de cabellos castaños desordenado.
-De que hablan, si perfectamente escuché que me decían que me fuera de aqui- hablo extrañando al resto de sus amigos
-No enserio enloqueciste- hablo Goenji abrazando de la cintura al doncel que tenía en sus piernas.
*Volveré a hablar* -Tsunami Jousuke sal de aquí. Soy tu conciencia, hazme caso y sal de aquí ve a tu casa y allá hablaremos con calma- hablo el Omega mientras aguantaba si risa.
-Chicos tengo asuntos importantes que hacer. Nos veremos en el bar está noche- hablo el alfa moreno saliendo de la casa
*Jajajajaja soy un genio. Saque a Tsunami de esa casa. Y lo aleje de la perra que tenía en sus piernas*
Mientras que Tachimukai celebraba Tsunami llegó a su casa y comenzó a hablar con su "conciencia"
-Muy bien maldita conciencia, por qué me hiciste salir. Estaba apunto de tomar a esa hermosa chica- hablo furioso
-A ver tonto. Te lo dije alla. Alguien te ama y tú lo amas debes de respetarlo no crees- empezá a materializarse como una luz la cual los ojos se puedan acostumbrar -no crees que el necesita respeto por parte de su amado.-
-¿Qui-Quien eres tu? Eres mi conciencia- hablo nervioso.
-Mas que tú conciencia. Soy tu amigo. No siempre estaré aquí pero cuando esté hablaré contigo si tú lo deseas- se acerca y posa un suave beso en los labios de Tsunami
El alfa no sabía qué hacer ese espíritu le había besado. El sentía que esos labios ya los había probado pero donde y peor aún cuando. Tantos betas y omegas que lo besaban, no recordaba aquel suave tacto de unos labios a los cuales puede volverse adicto.
-Debo irme. Adiós- sin más desaparecio dejando a Tsunami confundido.
Tachimukai volvió a su cuerpo y despertó enviándole el mensaje a Hibiki enseguida.
*Después de hoy como no me respetes te sacaré de la casa en la que estes. Y si estás en tu casa te haré la vida imposible* pensó el menor para ir con sus amigos al ensayo
