Realidad.

9 2 0
                                    

El vestido que Daniel me dejó es precioso. No puedo creer que exista algo tan bonito. Es rojo con una cola de sirena y pedrería que hace que el vestido se vea aún más elegante de lo que por si es.

-Joder...ya verás tu como lo rompa o algo.- sí hablo sola.

Me lo pongo y enseguida me doy cuenta que no se ni maquillarme ni peinarme.
Miro rápidamente tutoriales de youtube que me dejan en las mismas que antes. Cuando voy a darme por vencida me ocurre un milagro.

La puerta de casa toca y pienso que es Daniel así que voy a abrir rápidamente.

Mi sorpresa es enorme cuando me encuentro a mi amigo de infancia.

Liam. Esta enorme y super cambiado. Si no fuera por esos ojos tan bonitos dudo mucho que lo hubiera reconocido.

- ¿No me vas a saludar enana?- salto a sus brazos y el me agarra intentado no caerse.

-Liam!!!! ¿Cómo? ¿Cuando? Joder no se ni por si de empezar a preguntar.- el se ríe y me baja al suelo con cuidado.

- Creo que te has cargado el vestido.- ¡MIERDA!

Miro el lado izquierdo del vestido y efectivamente está roto.

-Mierda. ¿Que hago ahora?. Tengo una fiesta muy importante, ni siquiera se  maquillarme y ahora me cargo este hermoso vestido.- creo que voy a llorar. Me tiro en el suelo y respiro profundamente. Liam se tira a mi lado y me mira sonriendo.

-Hoy seré tu hada madrina. Déjame hacer una llamada.- llama a nose quien que llega en 15 minutos. Son dos mujeres, una me maquilla y peina mientras la otra se encarga del  vestido. Liam me propuso traerme otro pero este es el que Daniel me dio y no quiero decepcionarlo llevando otro.
Me arreglan en menos de lo que imaginé yo arreglarme , con lo cual me arreglan bastante la vida. Veo la hora y voy realmente bien de tiempo.

La puerta vuelve a sonar y va Liam. Pasan los minutos y escucho murmullos, voy directa por si es alguien que busca a mi padre.

Veo a Daniel con un semblante bastante frío.

-Hola-Miro a Liam quien me mira con una sonrisa todo lo opuesto a la expresión que Daniel lleva.-Daniel, él es Liam. Siempre estuvimos juntos cuando éramos pequeños. Ha venido a visitarme y me ayudado un poco.- ni siquiera me mira. Parece que está llevando una conversación silenciosa con Liam.

-Ah ya veo.¿Qué tal? Soy Daniel.-dice a modo de saludo.

-Bueno, creo que es hora de que me marché. Ya ha llegado tu caballero. Cuidate Gabi.- Liam se marcha junto con las dos mujeres que me han ayudado y aún tengo tiempo para darme los últimos retoques. Daniel sale y le dice a alguien  algo que no logró entender. Parece que venía con alguien, pero estoy tan sumida en mirarme como he quedado que no presto atención.

Daniel se posiciona detrás mío y por fin me sonríe.

-Estas preciosa- dice mientras me coloca un colgante que lleva en su centro la inicial de mi nombre.- ahora estas perfecta.-dice.

-La única persona que me dio un colgante con la inicial de mi nombre fue mi madre. Ella fue la que escogió mi nombre y antes de nacer me compro un colgante parecido a este.- sonrió por qué siento que mi madre me ha enviado una señal.

Puede que ella le este dando su aprobación desde donde quiera que esté.

-¿Nos vamos?- dice Daniel a lo que yo asiento.

Nos lleva un poco de tiempo llegar al lugar de la fiesta pues como dice Daniel está bastante alejada. El sitio es bastante acogedor pero a lo lejos puedes apreciar que los anfitriones son personas con mucho dinero e influencia. Espero no sentirme fuera de lugar.

Yo prefiero los feos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora