Enamorada De... ¿Mi Hermano? (Editando)

El Cañón Del Sumidero

Capítulo 39

Asa se subió al bote primero, después me ayudo a subir.

-Tengan mucho cuidado. Por aquí hay muchos cocodrilos hambrientos -dijo el señor-

-Claro. Gracias -Asa me miro sonriendo.-

El motor encendió y comenzamos a andar por el río. Era muy profundo, las aguas eran claras, podía ver a los animales ahí. Incluso, algunos cocodrilos; las paredes del río eran demasiado altas, por lo que había leído, miden más de 1000 metros. ¡Mucho!.

-¿Te gusta? -pregunto Asa sacándome de mis pensamientos-

-No sabes cuanto. Todo es tan bello.. -mire hacia una bella ave. Era color verde claro, muy hermosa.- ¡Mira, Asa! -señale emocionada al ave, como una pequeña niña-

-Si, es muy linda. Como tu.. -lo mire sonriendo. Se acercaba a mi lentamente, hasta sentir su respiración a milímetros de mi. Hasta qué yo misma, termine con ellos. Asa y yo nos besamos, fue un beso largo, tierno y muy lindo. Con el.. Con mi.. Novio, se puede decir.-

-Te quiero mucho, Asa.. -mi voz era entrecortada. La sonrisa de Asa se hizo más grande al escucharme. De nuevo, sentí sus labios en los míos, yo seguí el beso sin preocupación alguna. Sin pensar, sin decirme a mi misma, que tal vez nuestra relación estaba mal. Claro, lo esta. Lo de Asa y yo es incesto, pero, ¿a quién le importa?. Si el y yo nos queremos mutuamente, sin pensar en que sucederá si nuestros padres se enteran. Si ellos saben, obviamente nos odiarán como nunca lo han hecho con alguien más, es seguro.-

-Yo te amo, mi pequeña bestia -susurro cerca de mis labios, provocando que mi piel se estremeciera con su cálido aliento-

-Eres... Único, Asa... -susurre de la misma manera. Ambos permanecíamos fuera del mundo, tan cerca..-

El recorrido por el gran río fue un poco largo. Eran las 13:47 y ni Asa, ni yo, habíamos probado bocado alguno, a excepción del desayuno, pero ese fue a las 8am, así que.. Cuenta como si no hubiésemos comido nada.

-¿Tienes hambre? -pregunto mirando hacia el frente, mientras tomaba mi mano-

-Si -respondí mirando el suelo. Mi mochila estaba más ligera de lo que creí. Estábamos en "Chiapa De Corzo", un bello lugar. Las casas eran muy hermosas, coloniales, de madera, de colores.. Muy lindo.-

-¿Qué quieres comer? -pregunto mirándome.-

-No lo se. Lo que quieras, es bueno. -reí-

-Bueno, vamos aquí. -caminamos hasta llegar a un pequeño puesto de comida típica.- Buenas tardes, ¿qué es lo que tiene de comer? -pregunto Asa. Una chica estaba ahí, atendiendo. Ella lo miraba mucho, para ser más claros, se lo tragaba con la mirada.-

La chica nos dio los menús, yo pedí enchiladas verdes y Asa tacos. La chica nos atendió durante toda la comida, ella veía, preguntaba y platicaba con Asa. El trataba de evitarla, pero no, era difícil.

Al fin, cuando terminamos de comer, el pago y caminamos hacia donde habíamos dejado el auto. Eran las 14:33, temprano. Así que buscamos lugares turísticos ahí. Por suerte, ese lugar no carecía de bellos lugares. Habían grutas, bosques, lagos, etc. Hasta qué nos decidimos a ir al bosque. Podíamos regresar al hotel por la mañana, así que nos aventuramos a ir, al bosque. Donde habían juegos, y un sin fin de cosas. Decían que podíamos acampar allí, lo que se me hizo divertido, pero ningunos de los dos teníamos ropa.

-¿Quieres acampar, o quedarte un rato? -pregunto Asa al volante-

-Acampar no suena mal. Pero no tenemos ropa. -mi vista estaba concentrada hacia afuera. Habían árboles verdes, aves muy lindas, etc.-