FRAGMEN CAELUM
EXTRA 4.1
Nota: El siguiente capítulo está ambientado entre el periodo comprendido del 1º al 7º año de James con algo del pasado de Tom, NO es necesario leerlo si no quieren, no afectara a la trama. Capítulo 100% Tom x James.
◈▣◈▣◈▣◈▣◈▣◈▣◈▣◈▣◈▣
Tom Morvolo Gaunt Dumbledore miro a los chiquillos de primer año entrar al gran comedor con aburrimiento, ¿Por qué, en el nombre de Merlín, tenía que estar aquí? Si, era el maestro de Defensa, ¿Y? en ninguna parte del maldito contrato decía que tenía que estar en la ceremonia de apertura viéndoles las caretas a esos mocosos de once años.
Fulmino con la mirada al Director, Albus solo le sonrió de manera amable y mustio un "compórtate" por lo bajo que arranco una risita de Pomona. Tom maldijo y clavo la mirada en lo chiquillos, quizás camino al taburete alguno cayera y le diera algo de que reír.
Lo niños comenzaron a pasar, unos más nerviosos que otros y varios sangres pura que se pavoneaban ¡Oh! Tom se iba a divertir de lo lindo bajándoles los humos ese año. Cuando el chico Black quedo en Gryffindor, Tom encontró la primera diversión del día, la vieja Walburga que tanto presumía de la belleza de su Tabellarius en cuanta fiesta social se le cruzaba rompería sus vestidos de seda cuando viera que su niño bonito termino entre los Leones.
Tom tuvo que callar sus risas cuando sintió un fuerte pisotón, y Albus volvió a mustiar que se comportara.
Maldiciendo su suerte, Tom volvió a ver a los mocosos de primero, entonces uno en específico le llamo la atención, era pequeño, muy seguramente un portador, de piel ligeramente bronceada y cabello tan negro como un cuervo ¿Tenia herencia Black acaso? El niño Potter cruzo mirada con la suya por un instante, el café chocolate del iris brillaba alegremente, había algo en el maldito chiquillo que le llamo la atención, el niño ya había sido seleccionado y corría a la mesa rojo-dorada con una sonrisa de oreja a oreja. Tom le siguió con la mirada todo el rato, a su lado Albus rio. Maldito vejete.
James Charlus Potter Black, el único hijo de la vieja pareja, mimado y malcriado hasta decir basta, James sacaba ventaja de su condición de Tabellarius y sabía que cara ponerle a la vieja Macgonagall para que redujera sus castigos ¿Cómo es que ese mocoso no había terminado en la casa de las serpientes? El chiquillo era soberbio y egocéntrico, gustaba de gastar bromas a quien se le cruzara –algunas, tenía que admitirlo, crueles- Tom siempre se mantenía con la guardia alta y disfrutaba cuando atrapaba a James infraganti. Probablemente, era el único maestro de todo el cuerpo docente que no caía ante sus tretas y lo obligaba a cumplir sus castigos al pie de la letra. Y para qué negarlo, la cara enfurruñada del mocoso cada que lo castigaba era hasta... adorable.
No Tom, olvida eso último.
El moreno era inteligente, aunque su magia estaba apenas arriba del promedio, tenía un instinto para saber cómo y cuándo canalizarla, Tom sabía que el mocoso tenia potencial y era precisamente por eso que se empeñaba aún más en corregir sus faltas, lo que menos quería que es que ese diamante en bruto terminara como muchos otros Tabellarius. Recluidos en sus casa, esposos de un Mago influyente y dedicados a traer más y más niños mágicos al mundo. Un completo desperdicio de potencial si le preguntaban y poco le importaba si James se lo tomaba como una venganza personal de su parte por todas las travesuras que realizaba. Si fuera por Tom, James pasaría todo el maldito año escolar –y los siguientes, compinches incluidos- recluido entre las cuatro paredes de su despacho y muy, muy alejado de sus insulsos intentos de bromas. Si ni sus padres ni el resto de los maestros podían meter una pisca de sentido común dentro de esa calavera él se encargaría de ello. Y Merlín sabía que cuando a Tom se le metía algo entre ceja y oreja lo cumplía. Y no, no era porque le estaba agarrando cariño al chiquillo como Albus pregonaba cada que iba a su despacho a quejarse largamente del heredero de los Potter.
ESTÁS LEYENDO
Fragmen Caelum
Romance-Está historia no sera actualizada por el momento, disculpen las molestias- La primera vez que Draco Malfoy vio a Harry Gaunt-Potter fue en su cumpleaños número siete, una fecha especial, un número mágico. Lo que ninguno esperaba es que aquel cumple...