Capítulo 3

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Pasaron los años y los Nagisa y Rei se terminaron graduando y después decidieron vivir juntos, Rei  se dedicaba a ser maestro en la escuela de “El club de natación Iwatobi returns” y después de todo el entrenador Sasabe había aceptado que el trabajara ahí  pues quería que los mas pequeños aprendieran a nadar así como el lo hizo, por otro lado Nagisa era maestro de kínder pues se la daba muy bien cuidar a los niños.

Nagisa llevaba un tiempo planeando pedirle a Rei que se casara con el y el confiaba que aceptaría pues siempre decía que lo amaba mucho. Por otro lado Rei ya sospechaba lo que Nagisa intentaba hacer así que decidió hacerlo más fácil y reservo una cabaña enfrente de la playa e irían el fin de semana. Al enterarse de esa reservación Nagisa se dedico a buscar el anillo perfecto pues no quería que Rei no lo considerase hermoso.

Al fin le tuvo que pedir ayuda a Makoto pues no quería que Haruka supiera lo que iba a hacer o le terminaría proponiendo hacer algo con caballa. Al final del día Nagisa y Makoto salían de un centro comercial con una caja con dos anillos, las sortijas eran de oro y con pequeñas incrustaciones de Zafiro.

-Y ¿Cuándo se lo propondrás Nagisa?- le pregunto Makoto tomando una malteada

-Pues este fin de semana que vamos a ir a la playa- le dijo algo emocionado- y espero que acepte

-Aceptara, el te ama mucho Nagisa- le dijo el mayor

-Lo se lo se, solo espero que le parezcan hermosos los anillos- le dijo sacando la cajita y viéndolos

-Para el tu eres el hermoso- le dijo sonriendo el castaño y provocándole un sonrojo al otro

Llego el fin de semana y ambos hicieron sus maletas y salieron rumbo a la cabaña en la playa, el día estaba soleado y sin nubes en el cielo así que decidieron ir a nadar un rato y después ir a comer pero no se percataron de que el cielo empezaba a nublarse y ya para la hora de la cena ya estaba empezando a llover.

-Rei-chan  ¿Qué quieres de cenar?- le pregunto el rubio a su novio

-No se que haya de cenar, como creímos que iba a estar sin lluvia no trajimos comida- le dijo y enseguida sonó su estomago

-Yo traje pescado y hay huevos- le dijo entrando a la cocina

-¿No hay arroz?- le pregunto metiéndose a la cocina

-No, pero aquí cerca venden onigiris ¿Quieres uno?- le pregunto tomando un paraguas

-Pero yo voy por el- le dijo Rei

-Esta bien, ve tu pero no te tardes y no te vayas a mojar- le dijo tomándolo del cuello y jalándolo para darle un beso

Rei fue por el dos onigiris, uno para el y el otro para Nagisa pero mientras el estaba fuera Nagisa se ocupaba de ambientar el lugar para el momento de la propuesta, puso velas con olor y puso rosas en la mesa; al llegar Rei se sorprendió y dejo los onigiris en la cocina buscando a Nagisa el cual salió vestido de traje blanco.

-¿Que haces vestido así? – le pregunto Rei a su novio

-Nada, solo te esperaba- contesto tomando los onigiris y poniéndolos en los platos

-como sea vamos a cenar- le dijo el de lentes sonriéndole y sentándose

Al terminar la cena el menor llevo los platos a la cocina y salió de la con la cajita en su espalda, le llamo a Rei y este lo vio extrañado pues estaba arrodillado enfrente de el.

-Rei yo te amo y desde el momento en el que te vi lo he hecho por eso quería pedirte… ¿Te quieres casar conmigo?- le dijo abriendo la cajita y viéndolo a los ojos

-Claro Nagisa- le dijo con los ojos llenos de lagrimas y después de que pusiera su anillo se le hecho en los brazos a llorar de felicidad.

Esa noche festejaron juntos en su cuarto amándose mutuamente  y olvidándose de todos sus problemas, en ese momento solo eran ellos dos, la mañana los encontró abrazados y acurrucados durmiendo tranquilamente.

-¿Qué hubieras hecho si decía que no?- pregunto curiosos Rei mientras abrazaba a su ahora prometido 

-te hubiera insistido hasta que aceptaras, así como lo hice para que entraras al equipo de natación

-y seguramente hubiera terminando aceptando- dijo antes de reírse

Después de bañarse rápidamente fueron a desayunar a un  restaurant que estaba por ahí cerca, y ese Domingo se la pasaron mimándose cariñosamente en la playa, a veces entrando al mar y jugando y otras simplemente disfrutando se su mutua compañía; ese mismo sábado regresaron a su ciudad y llamaron a Makoto y a Haruka para avisarles de su compromiso, ellos los felicitaron y les sugirieron que fueran preparando su boda pues tenían mucho que planear.

Así fue como les informaron a sus familias y ellas lo aceptaron y dijeron que los ayudarían a organizar su boda, Rei y Nagisa querían una ceremonia clásica y la boda sencilla y sin demasiadas personas.

Al terminar de debatir los detalles la pareja de prometidos callo exhausta en la cama y después de ponerse sus pijamas se puso a dormir pensando en su futuro compromiso.

Nuestra historia (Reigisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora