La voz que ilumino a la oscuridad...(Male! Reader X Erik)

Capitulo 2: "Conociendo a Alexander"

Los rayos del sol me quemaban la cara,por lo cual tuve que levantarme, acaricio mis ojos medio dormidos y llego hasta mi cuello haciendo lo mismo masajeandolo. Volteo a ver a mi prima, y la encuentro aun durmiendo pacíficamente. Sonrió. Siempre es la cosita mas linda en todos los aspectos.

Me levanta y me estiro.

Bien, ¿ahora con que me visto? No puedo estar ropa sucia y mojada en la calle. Un recuerdo se me vino a la cabeza, ¡Madame Bilwing! Ella me recordó que también quedaba algo de ropa que sobraba en la opera y nos la dio. Aquella mujer es nuestra verdadera salvación...

Abro un armario madera sin pintar y veo unos pocos trajes que seguramente nos podrían durar mucho. Me pongo un traje , que sorprendente mente es de mi gusto.

De acuerdo, buscare ingredientes para preparar el desayuno, llegare a tiempo según mis cálculos, conozco un poco Paris a pesar de haber nacido en Boscherville.

Escribo una nota,en caso que se despierte mi prima, de que salí y que se vista con los atuendos del armario de la habitación. Beso su pequeña frente y llevo a cabo mi objetivo.

La ciudad es hermosa sin duda, la gente es sofisticada y elegante, los paisajes son bellos y la cultura igual.

Conociendo a mi prima, ella estaría ahora mismo saltando de emoción. Hablando de ella....no le gusta las verduras...aunque...siempre le gusto la sopa, pero con fideos, podría hacer una mini trampita para que ella aprenda a comer.

-buenos días joven-me hablo un hombre mayor, me encontraba en este momento en una verduleria.

-buenos días señor

-¿nuevo en la ciudad? Yo nunca olvido una cara y usted no la reconozco

-eh..si, de hecho soy nuevo, vine aquí junto a mi prima pequeña-le informe mirando alrededor la cantidad de verduras que había.

-ya veo, en ese caso bienvenido, créame que le gustara estar aquí-

-muchas gracias señor eh....-

-Francis, mi nombre es Francis, a sus ordenes-sonrió el buen señor con calidez.

-Un gusto, me llamo T/n Banfen-le regalo una sonrisa algo forzada, no me acostumbro a sonreír demasiado, pero mi abuelo contó que tenia que hacerlo para ser cortes y amable, "nada que una sonrisa pueda alegrar el día de muchas personas"

El señor sonrió mientras ponía las verduras en una bolsa para entregármelas. Preparaba las monedas que me pedirían rápidamente,no quisiera tardar mucho para ver a Alice.

-¿y donde se esta hospedando, joven T/n?-me preguntó de repente. Dude en responderle, ¿por que querrá saber?

-pues...yo me hospedo en la Opera Garnier-respondí.

-¡¿En la Opera Garnier?!-levanto su voz y vi como sus ojos reflejaban miedo, la gente nos miro por un momento.

-si...¿sucede algo?-

-Vera...hay mucho rumores que había un fantasma deambulando en aquel lugar...mi hijo menor recientemente fue aceptado en la orquesta y mi hijo mayor es ahora el secretario del director de la opera, estoy orgullosos de ellos, pero me preocupa lo que les puede pasar si aquel ser les hace algún daño...-hablo preocupado el hombre.

-Debe de estar orgulloso de tener hijos tan talentosos...y...volviendo al tema,hasta ahora no me he topado con ningún fantasma o extraño adefesio...-le informe con una sonrisa. Lo se, mentí, pero si sigue teniendo aquellos pensamientos sus hijos no podrán seguir por su sobreproteccion.

-¿en serio?...en ese caso supongo que no debo preocuparme...-suspiro aliviado. Termino de poner mi compra en una bolsa- seria 10.

Asiento y le doy la cantidad exacta de dinero, que por suerte logre salvar de la casa después del accidente, también logre salvar los instrumentos y herramientas del abuelo para formar cajas musicales. Todo lo deje escondido en el taller del abuelo, ya que no podía llevarlos conmigo al orfanato que nos llevaron, al menos están protegidos y los buscare cuando logremos instalarnos completamente.