Historias en Guerra

Bruselas (2°parte)

Paul ~ artillero alemán del Glory

"Hay que salir de aquí"

Tenía a esos americanos en el punto de mira, solo tenía que pulsar un botón y saltarían por los aires. No se ha que esperaba el capitán, quien me tenía que dar la orden para disparar, hasta que me dio la orden. Iba a disparar el proyectil, cuando el Panzer IV que también estaba allí explotó y dejando el tanque sin torreta. Alguien gritó: "¡Antitanque!" Y acto seguido el capitán, nos pidió retroceder, los refuerzos aliados habían llegado y eran demasiados. Tan rápido como pudimos giramos el tanque y volvimos por donde volvimos, disparando contra nuestros enemigos para atrasar su avance, los demás soldados alemanes hicieron lo mismo.

» Una hora más tarde.

Había que salir de Bruselas, pero los aliados nos ganaban terreno y cada vez más. No nos preocupaban la infantería aliado, sino los antitanques enemigos, que eran más fuertes que nunca. Íbamos con el Glory por una calle que se dividía en dos: una calle principal de la ciudad, que posiblemente este llena de tropas o un pequeño callejón por donde podría pasar el Glory, pero no podría girar la torreta. Decidimos ir por el callejón y utilizando la ametralladora nos cubriríamos las espaldas. Y bien que hicimos porque cuando estábamos en el callejón, los aliados nos avistaron y vinieron por adelante y por la retaguardia, solo eran soldados pero pronto vinieron con los lanzacohetes antitanque, yo me encontraba apuntando hacía adelante y no podía girar la torreta, íbamos avanzando por el callejón y al final de él se veía el campo, uno forma de huir y salir de la ciudad, lo único que lo impedía era una barricada de sacos de arena, le metí dos disparos con el cañón pero todavía sequía en pie, lo único es que la arena se caía poco a poco, Hask ordenó ir a toda maquina y embestir la barricada, cuando quedaba poco nos agarramos fuerte y ¡PAMMM! Toda la arena saltó por los aires y nos fuimos campo a través.
"Si los aliados seguían avanzando así la guerra se acabaría pronto" eso fue lo que Hask dijo al salir de la ciudad.