Él pelinegro se revolvía entre sus tapas tratando de buscar un poco más de oxígeno ya que sus fieles compañeras -las sábanas- lo estaban dejando casi sin aliento, decidió sólo destapar un pequeño hueco para que sus fosas nasales recuperarán el aire y se volvió a acomodar envolviéndose completamente hasta él último cabello de su nuca. Desde pequeño tuvo la manía de cubrir su cuerpo entero al dormir al principio lo hacia para ocultar la tenue luz que desprendía su celular a las tantas horas de la madrugada mientras jugaba con él sin que su madre se diera cuenta y creyera que dormía en horario escolar; pero ya no lo hacia por aquello aunque su pasión por los vídeos juegos seguía intacta ya no debía ocultarse pues ya no era un pequeño que debía conciliar el sueño porque al otro día tenía clases, ahora ya era un chico adolescente con una extraña manía que se convirtió en costumbre para él.
Intentó conciliar el sueño una vez más aunque en su subconsciente sabía que ya era hora de levantarse de seguro ya pasaban las once de la mañana, pero no quería hacerlo, por alguna razón su cama se sentía mucho más cómoda a estas horas, quería seguir recostado mil años más. De hecho si tuviera que elegir un amor unilateral para él resto de su vida elegiría su cama sin duda.
Sintio como poco a poco caía nuevamente en los brazos de morfeo cuando un portazo lo despertó de golpe, gruño por lo bajo. Quién se atrevía a interrumpir justo en estos momentos, iba a correr sangre cuando tan sólo viera él rostro de aquel culpable, ese maldito/a rufián.
Se destapó de golpe dejando ver sus despeinadas cejas fruncidas listas para fulminar a quién sea que yacía al lado de la puerta de su habitación, observo con detenimiento acostumbrandose a la luz del sol que caía de golpe en su rostro y ojos impidiéndole ver quién era ese/a rufián.
- ¿Sabes la hora que es maldito perezoso? - La persona cuya voz no pudo distinguir por lo atontado que lo tenía el sol caminó hasta la ventana para abrir paso a las cortinas para que más luz inundara todo el cuarto del pelinegro - Me prometiste que hoy si o si saldríamos, no me digas que de nuevo te echarás para atrás y saldrás con la excusa que estas enfermo o algo por él estilo. Ya me sé cada una de tus excusas niñito. - Lo observó apoyando su cuerpo en el mueble que daba justo a su cama.
- Hyung.. - Suspiró despeinando su ya alborotado cabello. ¿Qué haría ahora? Era la milésima vez que lo dejaba plantado por así decirlo sólo porque su flojera era aún mas grande, pero definitivamente esta vez no se podría escapar de las manos del más grande, aún no entendía porque le gustaba tanto salir, él simple hecho de estar rodeado de miles de personas que van y vienen por todos lados le daba escalofríos. No porque las odiará, sino porque simplemente prefiria estar solo, se sentía cómodo así pero nadie parecía entenderlo porque su familia lo obligaban a salir cada vez que podían y para su mala suerte su único gran amigo, parner, compañero, todo, era su hermano mayor quién era todo lo contrario a él, amaba salir a cualquier lugar, y aunque no dijera ni una palabra desprendía tanta alegría y confianza que las personas por inercia se le acercaban para conversar o darle una de esas sonrisas amigables cosa que con él simplemente no pasaba.
- Jungkook-ah, vamos. Me lo prometiste... O esque acaso no quieres pasar tiempo de hermanos. Espera ya se..-Entrecerro sus ojos como si hubiera descifrado él mayor de los secretos del pequeño.- Te avergüenza salir con tu hermano mayor porque ya eres un chico grande ¿verdad? Te avergüenzas de tu hyung. - Puso su mano en su pecho para dramatizar lo dicho haciendose el mayor de los dolidos.
- ¿Qué dices? - Jungkook soltó una pequeña risa dejando ver sus dientes y su nariz arrugada, tomó uno de sus amados cojines y se lo lanzó al mayor en pleno rostro.- No digas esas cosas. Aunque pensándolo bien creo que si, solo te aguanto porque somos de la misma sangre, es casi un contrato. - Rio levantando sus hombros en signo de: es lo que hay.
- Hey! - Él mismo cojín se estampó en la cara del pelinegro haciendo que ambos estallaran de risa y comenzarán una mini guerra de almohadas.
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君
FanfictionTimidez: Sensación de inseguridad o vergüenza en uno mismo que una persona siente ante situaciones sociales nuevas y que le impide o dificulta entablar conversaciones y relacionarse con los demás. • one shot. © ilysope.