Prefacio.
Había pasado mucho tiempo desde que estoy aquí, recuerdo como era mi vida antes que esto, amaba a mi padre y a mis hermanos, mi madre había fallecido en un problema automovilístico, mi hermano menor, Jacob, era muy pequeño para recordarlo, mis hermanas, Rachel y Rebeca, claro que se acuerdan, Rebeca solo era 3 año mayor que yo que yo y Rachel 2, pero Jake era el menor, era un bebe de 1 año; después de eso todo comenzó a ir bien de nuevo, papá estaba en silla de ruedas ya que él iba con mi madre, un tiempo después cuando yo cumplí 13 y Jake 12, él pregunto por mi madre, le explique todo y se volvió cerrado y no hablaba con nadie más que con su amiga Bella, que solo venia de visita algunas veces al año, mis hermanas se fueron de la reserva para estudiar en otro sitio, mientras yo me quede en La Push para cuidar de Jake, cuando cumplí 16, un día estaba en la escuela alguien llamado Paul, me comenzó a molestar, recuerdo ese día, me convertí en lo que soy y en el motivo del cual me tienen encerrada; todo es obscuro, y frio, estoy en un sueño profundo del que no voy a despertar hasta que la puerta de Atenas se habrá, pero siento que hay alguien que la quiere abrir y no es ninguno de mis hermanos, es una persona desconocida, pero huele como los demonios, huele a enemigos y a humano, es raro, a veces escucho murmullos pero mientras más me concentro mas desaparecen, han pasado 3 años de eso, tengo 19, pero sigo aparentando 16, ya que al estar en este sueño no envejezco, Jake debe tener 18, más o menos, Rebeca 22 y Rachel 21, solo espero la hora que la chica abra la puerta para poder reunirme de una vez con mi familia y vengarme de los demonios que me encerraron.
