Querido Ex: Te Extraño

capítulo 11

En la noche ya no estaba tan enfadada, así que decidí no volverlo a molestar con ese tema, ya que ni siquiera queria darme una explicación de lo sucedido.

Ya casi se acerca mi cumpleaños y estoy muy feliz, voy a cumplir 17 aunque no hare nada especial, pero sentir que estoy creciendo me pone muy contenta.

La siguiente semana fue ordinaria, tanto que me sentí olvidada, nadie hablaba mucho conmigo o me preguntaba que iba a hacer para mi cumpleaños.

Ya es 30 de noviembre mi cumpleaños, en la mañana me levante muy feliz a pesar de que todos me ignoraban.

Al llegar a la preparatoria me sentía un poco molesta ya que mi supuesto novio no me daba la atención que necesito, así que trate de buscarlo pero no logre encontrarlo y eso me enfado aún más.

Al abrir mi casillero encontré un ramo de rosas blancas; mis favoritas, con una carta que decía "las flores son mías, pero el motivo eres tú".

Una frase sencilla y cautivadora. ¿Será  Jason por fin? ¿se habrá acordado del cumpleaños de su novia? ¿por qué no lo he visto hoy?

Al finalizar el día fui directo a mi casa y trate de llamar a Emy, aunque fue en vano porque no me contesto.

Me pase la tarde entera tratando de contactar a mis amigos, estaba tan molesta que decidí apagar mi teléfono.

Son las 9 PM y me encuentro acostada en mi cama, y de repente empieza a sonar una canción desconocida. Cuando me asomo por la ventana es Jason, me siento feliz y enojada de verlo. Me arreglo y bajo hacia el.

Ya a su lado me dijo que me tenia una sorpresa y me siento emocionada por saber que es, a pesar de que sigo enojada con él.

Me llevo a su casa y de repente desaparecio, luego fui guiada por un camino frases que me decía, y al final se encontraba Jason con dos boletos de avión a México y un anillo. No se que decir o como reaccionar, estoy tan emocionada por esta sorpresa y muy agradecida por el detalle. Me acerque a el y sin ninguna palabra en la boca lo bese.

El vuelo era hoy a las 11:50 PM y me acelere porque no tenía nada para llevarme, así que volvimos a mi casa a prepararme. Claro que el me ayudo a buscar ropa, mientras más ancha y larga más fácil entraba en la maleta.
No quería que nadie más que el me vieran con poca ropa.

Al llegar al aeropuerto vi a Emy y a Santiago acercarsenos con peluches y chocolates, fue una sorpresa verlos, aunque para Jason no. Pasamos los últimos momentos juntos antes de irnos.

No fue muy agradable pasarme las últimas semanas siendo ignorada, pero valió la pena por este resultado.