Take Over You [ Ksj • +18 ]

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—Puedes dejar tu chaqueta en el perchero...

Tae asintió e hizo lo que le recomendé. Terminamos de entrar a mi apartamento.

Mi amigo me había estado esperando en frente de la puerta en altas horas de la noche, solo para hablar sobre algo importante referente a Kim SeokJin.

La situación, no lucía muy normal. Conocía a TaeHyung desde la universidad y jamás lo había visto tan serio o intranquilo como para estar actuando de esa forma desde que todo lo de la malversación había comenzado... O específicamente, desde que nos habíamos topado con Jin.

— ¿Quieres algo de tomar? ¿Café? —Le pregunté mientras sacaba mis tacones y me apoyaba en el mesón de la cocina para masajear mis adoloridos tobillos.

—No, está bien—Respondió mientras bajaba su mirada a mis pies y soltaba una ligera sonrisa—Prefiero que vayas a ponerte cómoda. Te he tomado en mal momento. Sé que ibas llegando de la confe...—Tae apretó los labios sorprendido.

Curve mi ceja.

— ¿Sabías donde estaba?

Este suspiro y peino su cabello para tomar una posición menos formal.

—NamJoon me ha contado.

Director Kim NamJoon, tan confiable... no puedes guardarte nada ¿Cierto?

Gire los ojos mientras negaba.

— ¿Te ha dicho algo más?

Él iba a responder cuando soltó un gran suspiro de sus delgados labios.

—Es un cuento largo...—Hizo una mueca—Ve a acomodarte—Giro su mano como pidiendo que me apresurara a ello.

Yo negué con los brazos cruzados mientras avanzaba a mi habitación.

—Puedes sentarte. Me pone nerviosa que solo te quedes ahí parado.

—No iré a espiarte, si es lo que esperas—Dijo burlón y yo me gire solo para regañarlo con la mirada y retirarme.

—Solo espera aquí...

Y así abandone a mi amigo en la sala. Entre presurosa a mi cuarto y al desastre que había dejado unas horas antes. Saque mi gabardina y las prendas. Quite mi vestido en frente del espejo, me maldije por un segundo a volver a recordar a SeokJin y desear que él hubiera hecho eso. Me coloque un conjunto de pijama de camisa y short no tan corto, al menos a mi parecer, más un buzo. Despeiné mi cabello para liberar un poco de tensión.

Era tan grave... ¿Lo que escucharía sobre él? Una parte de mí quería saberlo, en verdad, tal vez aclararía todo el misterio que hay detrás de ese hombre... pero había otra mitad que tenía miedo de lo que podría enterarse.

Suspire y salí de mi cuarto unos minutos después, cuando fui hacia la sala noté que Tae no se encontraba ahí.

— ¡Estoy Aquí!

Gire en dirección de donde provenía su gruesa y grave voz, para topárme con él en mi cocina... calentando una olla de agua. Bufe y me acerque con diversión hasta él.

— ¿Qué haces ahora Kim TaeHyung? —Observe cómo este había arremangado su camisa hasta sus codos mientras destapaba unos paquetes de ramen que guardaba en la despensa.

—Cocino—Respondió con su cuadrada sonrisa.

—Tú no cocinas.

—Vamos... hacer ramen no tiene ciencia. Si puedo operar para colocar un marcapasos ¿Quién dice que no puedo hacer ramen? —Bromeo mi amigo, cuando abrió la bolsa y salieron pedazos de pasta disparados por todos lados.