Creature Feature

Capítulo 04.- Children Of The (Pop)Corn

La cita al cine fue algo... interesante. Y esa era la mejor definición que podía dar Severus acerca de una salida entre amigos que terminó con él bañado en refresco, Harry repleto de palomitas y una sustancia que antes habían sido gomitas de dulce y una Luna Lovegood corriendo detrás del tal Ron Weasley quien a su vez se cubría con el cuerpo de un atolondrado Neville Longbottom.

Todo había empezado muy normal... normal para Luna. Ella llegó en una especie de coche que recordaba a un platillo volador y se estacionó cerca del auto-cine para pagar por las entradas de ambos, Harry tenía un coche antiguo... icónico para cualquier amante del terror: un Plymouth Fury del 58... Christine. Severus sonrió ante eso. Su Harry era una caja de sorpresas.

Él, Severus, no tenía un auto, así que llego en transporte público y pensaba regresarse igual, aunque su madre le había dado un celular para emergencias, él no estaba dispuesto a llamarla hasta que de verdad fuera necesario.

Luna hizo que Severus se sentará en el auto de Harry, ya que "casualmente" había invitado a su amigo Neville y este los miraba con miedo, como diciendo "No me maten, fue su idea". Severus era excesivamente listo para su propio bien, sabía el juego que jugaba luna pero no le importaba mucho en realidad. Luna le estaba dando tiempo a solas con Harry.

Apenas empezó la primera película, Luna arrastró a Neville hacía la dulcería luego de preguntarles a ellos si querían algo. Harry pidió media dulcería mientras Severus solo quería un refresco. Luna tomó nota y llevaba a Neville a rastras, aunque no parecía estarse resistiendo mucho a su amiga rubia.

Los minutos pasaron y Luna llevaba ya media hora lejos y Harry estaba empezando a preocuparse, pero Severus empezó a platicar con el chico y pronto se relajo y estaban comentando sobre la película (El Hombre Invisible) cuando Severus vio la oportunidad de hacer un acercamiento y uso el movimiento cliché de citas más viejo... bostezo y estiró su brazo detrás de Harry.

Su brazo estaba sobre los hombros de Harry y este último se sonrojo pero no hizo nada para quitarlo de ahí. En general, estaba siendo una "cita-que-no-era-cita" bastante agradable. Severus solía ser agradable cuando no había nadie alrededor y le tomaba tiempo sentirse bien como para profundizar en cualquier relación, ya fuera amistad o algo más, incluso con sus padres no solía ser "demostrativo".

Si todo no se hubiera ido directo a la basura...

Algo parecido a un "chist" se oyó y Severus volteó. No había nadie y Severus no le prestó atención. Se volvió a oír un "chist" y Severus escuchó además un ruido cerca del auto y estaba por salir cuando Harry apretó el botón de la capota del auto.

Un montón de refresco fue volcado sobre él y una sustancia como gomitas de sabores derretidas cayó sobre Harry quien alcanzó a ver la parte dos de la broma y empujo a Severus mientras un aluvión de palomitas caía sobre él. Ninguno de los dos chicos estaba seguro de que fue lo que pasó, hasta que vieron a un muy pálido Ron Weasley viendo a Harry con una mirada suplicante y a un Neville Longbottom que obviamente intentaba parar al bromista pelirrojo.

—¡Los gemelos dijeron que estaba calibrado! —Ron Weasley tenia en sus manos una bazuca casera, que Harry sabía pertenecía a los gemelos Weasley, quienes habían sembrado el terror en un Halloween hace 3 años en la ciudad, llenando de bromas a un montón de pobladores, que iban desde el baño de refresco y gomitas derretidas hasta la miel con plumas.

La bazuca era su "arma" más querida, pero George había estado quejándose de que el disparador había estado inestable y que había que hacerle ajustes a la mira, la habían dejado por la paz hasta que la repararan. Evidentemente, no habían logrado reparar nada.

Severus estaba bastante furioso cuando llegó una soñadora Luna con una bandeja de golosinas. Le tomó segundos ver toda la escena y mirar fríamente a Ron Weasley. Dejo la bandeja sobre el toldo de su auto y agarró uno de los vasos de refresco y le dio una mirada calculadora a Ron que empezó a correr.