Desde enfrentar a villanos reales, poderosos y malvados en un entrenamiento normal.
El estrés de los juegos donde todos luchaban con gran determinación.
Ser pasantes de héroes reales.
El crecimiento de villanos tras un discurso de un loco que mataba héroes profesionales.
Hasta enfrentar aún más villanos peligrosos que iban por un compañero durante el campamento.
El secuestro de Katsuki fue algo muy fuerte para todos los alumnos que pensaban en las diez mil maneras en que estaría siendo torturado el chico explosivo.
El descubrir que el símbolo de paz ya no podía con el título.
Todo era realmente estresante.
La clase 1A sufrió lo que ninguna otra clase pasó antes.
Y aún no finalizaba el año.
Solo a ellos les tocó vivir esos momentos tan críticos.
No solo no podían relajarse sino que ahora vivían dentro del instituto tratando de ser protegidos de los villanos que atentaban contra los jóvenes.
El día que pidieron permiso para entrenar en la piscina, el profesor Aizowa interrumpió cuando empezaban a divertirse.
Una cosa era estudiar para ser héroes y otra que a causa de esa elección dejan de ser niños, porque aún eran jóvenes para ser considerados adultos.
Les faltaban muchas por vivir y se la pasaban más tiempo en hospitales que riendo.
La triste verdad es que ya no podían tener una vida normal, la muerte era algo que verían a diario, el peligro sería una dosis diaria por el resto de sus vidas.
Pero en ese tiempo, con esa edad de entre 15 y 17 años, lo común sería divertirse un poco.
Pese a estar más que prohibido, tanto el director como los maestros decidieron ceder a un petición hecha por los alumnos.
Una fiesta de halloween.
Quizás la última a la que podían ir o festejar, con el crecimiento de villanos era esencial el pronto ascenso de aspirantes a héroes, todos tenían que poner de su parte.
Y con tan mala suerte de la clase 1A que ya habían tenido contacto con ese duro y cruel mundo, una fiesta serviría para relajarse y disfrutar su juventud, disfrutar la vida y festejar que aún estubieron juntos y luchando por sus sueños.
El director Nesu acepto la solicitud de los chicos al recapitular cada uno de los problemas y dificultades que estos jóvenes habían tenido, y termino dando su aprobación antes está inocente petición de hacer una fiesta.
Quizás así olvidar un poco los malos ratos que por culpa de Tomura y su liga de villanos les ocasionaron.
Pero para ser imparcial tubo que permitir que cada grupo hubiese una pequeña fiesta, no iba a arriesgarse a ponerlos a todos juntos y que ocasionaran un alboroto.
No era un secreto que las otras clases tenían cierto rencor hacia la particular clase A, que fácilmente podía desatar una guerra.
Un salón a disposición de cada clase y su profesor a cargo evitaría los problemas.
All Might como profesional y maestro estaría recorriendo cada salón pera evitar que una clase irrumpiera la celebración de otra.
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