«El mundo es demasiado grande»

16 2 0
                                    

Cris se levantó corriendo a abrazarme. No la veía desde antes de ir a Escocia, y nos habíamos echado mucho de menos mutuamente.

- ¡Candela!

- ¡Cris!

Nos fundimos en un abrazo que duró largos segundos. Cuando por fin nos separamos empezé hablando yo.

- Que guapa estas chiquilla, te echaba de menos.- Dije con tono andaluz, ya que ella es de Málaga.

- Osú mi arma, cuanto te he echado de menos.

Nos reímos las dos, ya que estábamos haciendo burla al acento andaluz. Seguidamente, y después de un beso en la mejilla, nos unimos al grupo.

- Hola chicos.- Dije alargando la O de «Hola».

- Hola Candle.- Ese es mi apodo, todos tenemos. Sonreí.

- ¿Que tal todos?

- Genial.- Contestó Carlos mirándome. Oh, Carlos. Que bueno está.

- Me alegro. Bueno, ¿Que estáis haciendo? ¿Os bañais? ¿No tenéis cartas? ¿Y esa cámara? ¿Y mi toalla? ¡Mierda! Me la he olvidado en casa.

Todos se quedaron atónitos con mi interrogatorio. Fue Manu el que contestó.

- Madre mía Candela, si que llegas curiosa hoy. A ver: Íbamos a bañarnos ahora mismo, estábamos haciendo selfies, la cámara es de Meri, con ella nos hacíamos fotos, tu toalla está en tu casa, supongo.- Dijo esto último haciéndose el listillo.- Ah, y por lo de la toalla no te preocupes, tenemos de sobra.

- Vale, gracias, pero se te ha olvidado responderme lo de las..

- Oh, cierto, las cartas.- Dijo poniendo cara de aburrimiento. Sabía que nos divierte a todos.- No, hoy no tenemos cartas, no nos apetecía. Y si lo dices porque son tuyas, ya nos hemos ocupado de dárselas a tu madre mientras que estabas fuera.

- Muchas gracias a todos, y a ti Manu.- Dije sonriendo. Me senté.

- Mientras estabas fuera...- Dijo María para sí misma. - ¡Ah! ¡Candela! ¿¡Que tal tu entrevista!? ¿Bien, no? ¡Me alegro! Dijo lanzándose encima mío.

- ¿Qué...entrevista?- Dijo Gutman curioso.

- A ver- empezé mientras me ponía otra vez de pie y tomaba aire.

- A ver la Candela que se nos pone seria.- Dijo Cris entre risas.

- Oye, ¡no tiene gracia!- Dije mientras todos nos reíamos.

- Bueno venga, sigue por favor.- Dijo Gutman intrigado todavía.

- Pues sabéis que una de las cosas que me gustaría ser de mayor es actriz ¿verdad?- Todos asintieron. - Pues me he presentado a un Casting  para una película española, y... hoy he tenido la entrevista, y... bueno me han dicho que tengo "dotes de actriz". No sé, decía la entrevistadora que veía algo especial en mí.

- Impresionante. - Dijo Carlos.

- Y, ¿Qué más? - Dijo Gutman todavía intrigado.

- Pues...- Dije intentando recordar- Ah, sí, el casting es el próximo Jueves.

- Wow. Mola.

- ¿Y qué película es Candle?

- No creo que sea muy conocida. Se llama «Antes del atardecer».

- Luego lo miro en internet. - Informó Cristina.

- Y ¿de qué haces? ¿Personaje principal? ¿Secundario?

- Yo, si es que me dan el papel, haría de la hermana de uno de los personajes secundarios. Creo que salgo en 3 o 4 escenas.

- Vaya, eso ya es bastante.- Dijo Carlos.

- Pues ¡Felicidades!- Dijo Gutman.

- Sí, espero que te salga bien- Dijo también Manu.

- Aw, gracias.- Dije, y abrazé a todos. Pero al abrazar a Carlos no sentí lo que había sentido cuando abrazé a los demás, cariño. No. Una especie de cosquilleo recorrió todo mi cuerpo acabando en un escalofrío. A la vez, el corazón iba acelerándose vertiginosamente. Creo...que él se dio cuenta.

- Candela... ¿estás bien?- Dijo apartándome cogida por los hombros.

- Emm, ¿yo? Sí, sí, ¿por qué no iba a estarlo?- Dije nerviosamente.

- Estabas temblando, no sé... quizá fue...

- Imaginación tuya, si yo también lo creo.- Dije cortándole rápidamente mientras falsificaba una sonrisa.

- Bueno, vale, te creo. Quizás si que fuese imaginación mía. - Dijo devolviéndole la sonrisa. Me gusta que me crea a la primera, que confíe mí, es...un encanto.

- Gra...gracias.- Le dije muy contenta.

- ¿Candela? - Dijo María mirándome a la cara.

- ¿Qué...? ¿Qué pasa? - Dije bastante confusa por la cara que me estaba poniendo María. Ésta, rueda los ojos, se agacha rápidamente y me susurra algo.

- Candela...tus manos...

«Mis...¿manos?» me dije para mí misma. Me las miré. Oh, dios mío. De lo contenta estaba con Carlos no me había dado cuenta de que le había cogido las manos. Me retiré y me levanté cómo una flecha. Miré a todos. Todos me miraban con ojos como platos excepto Carlos que sonreía. Sus hoyuelos. Oh, dios mío, de nuevo. Me puse el pelo detrás de la oreja. Sentí que el mundo era demasiado grande, yo no era más que una hormiguita insignificante, pero que en este momento todos me miraban.

- Bueno yo... creo que me tengo que subir...supongo...Os veo luego por la tarde, tal vez. Eh...adiós.- Esto último lo dije muy rápido. Subí corriendo por las escaleras todavía pensando en la sonrisa de Carlos. Abrí torpemente la puerta, me deslicé dentro de la casa, y cerré la puerta detrás de mí mientras me sentaba en el suelo. Suspiré y apoye la espalda en la puerta. Que vergüenza. Pero...¿Por qué Carlos sonreía?

♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡

Por favor, si habéis leído éste capítulo u otros anteriores votar :)

Vote please. Mil gracias <3

Un beso y catorce deseos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora