Caminando por el malecón

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La noche todavía era joven, cruzaron la calle y ya estaban en el malecón.Ron se rascaba la cabeza como un mono desconcertado y miró a Harry en busca de ayuda.
- ¿Y ahora qué hacemos? -preguntó Ron todavía fuera de lugar-
-Pues lo que hacen los muggles: sentarse en el muro junto al mar
-Ya... no ves eso un poco demasiaaado peligroso?
-No seas gallina, no ves q si fuera peligroso nadie lo haría. Vámonos antes de que me enfade- dijo Harry ya molesto por las tonterías del pelirrojo.
Sucedió q obtener un lugar no era tan sencillo , pues ellos no fueron los únicos que escogieron ese sábado la alternativa económica para variar...
El lugar estaba repleto de TODO TIPO DE PERSONAS desde frikis, emos locos, reparteros* ,pasando por parejitas en las esquinas oscuras.
Caminaron algo más de una cuadra (de las largas) buscando un lugar donde sentarse. Mientras estaban en eso ,entre la multitud una cabellera platinada llamó la atención de Ron y no podía pertenecer más que a...
-Draco Malfoy -Dijo Ron haciendo caras como si se hubiera tragado un limón.
Harry enseguida se incorporó y ante su asombro Malfoy no estaba solo. Tenía como compañera ,en una de las esquinas obscuras, a una chica de cabello oscuro que pudieron reconocer como ...
-¡¡¡HERMIONE!!!- Gritaron al unísono.
Ron,veloz como viejo q se entera q vino la carne a la bodega* fue hacia ellos sin dar tiempo a que Harry lo detuviera.
Sin vacilar fue directo hacia ellos. El chico platinado estaba de espaldas a él .Ron todavía ofuscado lo llamó por su nombre y al ver que no respondía no lo pensó dos veces :le propinó un puñetazo sorpresa que el rubio perdió el equilibro y cayó de culo en la acera.
-¡¡Eso es para que no te metas con mi chica!! -Gritó Ron al golpearlo-
Todos se quedaron atónitos, pero sin dudas el más sorprendido fue el mismo Ron al darse cuenta que la chica a la que vieron no era Hermione y al que acababan de golpear no era Malfoy, sino un desconocido con el cabello decolorado.
Harry llegó al lado de Ron y contempló aquella escena bochornosa. Ambos se quedaron paralizados pero tuvieron que reaccionar cuando el desconocido sacó de su bolsillo lo que parecía ser una navaja. Todavía con la boca ensangrentada el oxigenado se acercaba ellos. Solo tenían una opción para resolver el problema como magos honorables.
-¡Corre!-le dijo Harry a Ron.
Este no lo pensó dos veces y se fueron pitando del lugar. El agredido los siguió durante una distancia corta pero enseguida se cansó. Mientras tanto Harry y Ron corrieron tan rápido como sus piernas les permitieron, ya cuando miraron atrás lo habían perdido, para su gran alivio. Decidieron que ya era hora de volver a casa, pues Ron no tenía ganas de aguantar la cháchara de Hermione.
Se acercaron a la carretera para emprender el camino porque para los magos es ilegal realizar apariciones en el mundo muggle. Intentaron llamar la atención de algún que otro auto esperando que fuera un Almendrón*  pero no podían distinguir cuál era cuál pues para ellos todos eran solamente un montón de latas viejas. Lo que no sabía este par era que habían llamado lo atención de quien menos esperaban.
-Hola, les gustaría contratar mis...servicios...?- Les dijo acercandose una joven morena,alta, vestida de forma reveladora dejando ver entre el minivestido y las botas unas piernos tonificadas por el ejercicio y un cuerpo bronceado uniformemente. Sus ojos negros como dos pozos, aunque no tan profundos como los de Snape, miraban impacientes a Harry y Ron esperando una respuesta.
-¿Eso es con nosotros?- Dudó Harry.Ella entonces rió.
-¿¡Con quién iba a ser, mi amor!?- respodió de forma socarrona.
-¿Y qué es lo que haces?-  Interrumpió Ron
-Lo que tú quieras- se le acercó seductoramente
- ¡¿Lo que yo quiera?!-Preguntó emocionado
-Claro que sí...lo que tú quieras- Ron se quedó pensativo... desde que llegó al malecón con Harry, un deseo ardía en su interior, durante el pleito con el rubio se le alivió debido a la adrenalina. Ahora que pasó el peligro, ese deseo retornó. Sabía que se había vuelto tan fuerte  por haber descuidado sus necesidades básicas. Ron vio  en ese momento la  oportunidad de librarse de él.
- Ya que dices que harías lo que yo quiera... Ve a la esquina y búscanos algo de comer- Ron no veía la hora de librarse de esa hambre voraz que carcomía sus entrañas.
La chica pensando que era una broma se sintió ofendida y se fue, justo a tiempo, pues Harry mientras Ron estaba haciendo sus disertaciones filosóficas había parado un almendrón que iba hasta el hotel donde estaban.
Lo que estos amigos no sabían era que esta sería su última noche en aquel oasis de lujo en medio de La Habana...
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Aclaraciones📚📖:
Bodega: Tienda de productos básicos y controlados, regidos por una libreta,la mayoría se pueden comprar liberados pero son mucho más caros. Hay que estar muy atentos pues si no te avisan o no te enteras los mismo trabajadores se llevan la carne, el pan o lo que sea que pierdas.
Almendrón: Carros americsnos de los años 50's especialmente Chevrolet, actualmente son de uso particular y son como una especie de Taxis, son exclusivos de La Habana, en las demás partes de Cuba los hay, pero más aislados.

Magos en La HabanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora