Es más oscuro antes del Amanecer

Sapos y Comadrejas

"¡PERVERTIDO!"

Las mujeres en la casa de baños chillaron y se desaparecieron con un nuevo récord de 3.8 segundos. Jiraiya dejó escapar un gruñido irritado cuando se dio la vuelta y clavó una mirada feroz en la chaparra que le hizo perder su investigación. Ella simplemente lo miró con una sonrisa satisfecha.

"¿Hay algo mal, Jiraiya-san?" Ella cuestionó dulcemente.

"¡Hiciste que mi investigación desapareciera! ¡OTRA VEZ!"

Sakura se rió.

"Bueno, como no pudiste evitar que una niña de once años ahuyentara tu llamada 'investigación', me debes un poco de mochi".

Jiraiya la miró con incredulidad. Esa conexión no tenía ningún sentido.

"Mocosa".

"Abuelo pervertido". 

~

Él no estaba seguro de cómo lo hizo, pero lo hizo. La pequeña punk llamada Sakura Haruno le había manipulado para que comprara su mochi. Jiraiya la miró con curiosidad mientras tomaba un gran bocado del dulce. ¿Podría realmente ser la chica que asesinó a Danzo Shimura a sangre fría?

"Así que Jiraiya-san, ¿qué pasa?"

Él levantó una ceja.

"Normalmente no estás en el pueblo". Ella explicó: "He escuchado que usualmente haces cosas de tipo reconocimiento, y cuando vuelves a la aldea, tienes información que vale la pena contar en persona. ¿Te importa compartir?"

Sus ojos eran calculadores, pero en blanco. Sus emociones no se mostraban a través de sus ojos, pero una cosa que podía ver era que ella sabía algo. Jiraiya se inclinó hacia delante y apoyó la cabeza en su palma abierta.

"Los detalles están clasificados, pero permítame resumirlo por usted. Hay un pequeño grupo de filas S que consta de doce ex shinobi Konoha. Todos los que fueron enviados para recopilar información no habían regresado; ni siquiera yo podía acercarme lo suficiente. Necesito a alguien que se infiltre, simplemente no podemos encontrar a nadie para el trabajo".

Una sonrisa se arrastró a la cara de Sakura mientras se levantaba de su asiento.

"Nos vemos de nuevo aquí el viernes a las 12:00 pm, Jiraiya-san".

Salió de la tienda, dejando atrás a un sannin confundido. Su primer destino fue la Academia. Dejó una nota en el buzón de su sensei diciendo que estaría ausente toda la semana próxima. Después de eso, se fue a casa, tiró algunas cosas en su mochila y salió por las puertas de Konoha.

Ella no fue vista por seis días.

El viernes, Sakura había regresado a Konoha. Estaba sentada en la misma mesa de la tienda de mochis. Aproximadamente un minuto después, Jiraiya entró y se sentó frente a ella.

"Está bien, ¿qué es esto?" preguntó. Sacó una gruesa carpeta de manila y se la entregó. Jiraiya miró antes de agarrar la carpeta de mala gana y hojearla. Había alrededor de veinte páginas con descripciones de los doce shinobi de Konoha anteriores, sus técnicas y debilidades, y la lista de lugares posibles donde podrían estar sus bases. Sus ojos se endurecieron ante la información.

"¿Cómo obtuviste esta información?" cuestionó en voz baja. Sakura tenía once años, una niña. No había manera de que ella pudiera obtener esta información sola. Ella sonrió.

"Por favor, no malinterpretes, Jiraiya-san. No fui yo quien se metió directamente en la sede del enemigo, aunque estaba muy cerca de hacerlo".

"¿Entonces quien lo hizo?"

Sakura le guiñó un ojo.

"Tienes tus secretos, y yo tengo los míos".

~

Sakura prácticamente salió de la tienda de mochi y se estrelló justo en un Itachi que lo esperaba. Sus mejillas se hincharon mientras levantaba los ojos para encontrarse con sus ojos negros.

"No puedes simplemente quedarte en medio de la carretera así, Itachi-san".

"Si tuvieras los ojos abiertos y dirigidos frente a ti, te garantizo que me habrías visto y no habrías avanzado".

Ella sacó la lengua y se pegó a su lado mientras caminaban hacia el pueblo. Jiraiya, que todavía estaba sentada en la tienda de mochis, miró a las dos espaldas que se retiraban con una ceja levantada. Itachi Uchiha y Sakura? Qué par tan extraño.

Y una extraña pareja realmente fue. Quienes los conocían sabían que pasaban gran parte de su tiempo libre juntos, por extraño que fuera. Ese dicho debe ser cierto entonces, 'pájaros de una pluma se unen'.

Jiraiya se levantó de su asiento, con los ojos aún entrenados en la carpeta en sus manos. Sakura iba a graduarse de la academia en cuatro meses. Para entonces, estaba seguro de que Minato le asignaría a alguien lo suficientemente fuerte como para vigilarla. Después de todo, sería un hombre tonto si no tomas precauciones con un preadolescente que ya tenía la impresión de estar en nivel ANBU.

"Probablemente obtendrá a Kakashi..." murmuró para sí mismo. Arrojó algo de dinero sobre la mesa y salió. Él y Minato tenían algunas cosas que... discutir.