Boda en medio de una guerra(SVT)

•Día 54• ESPECIAL JIHAN

Jeonghan

Desperté debido al ruido de agua caer y la luz que venía por debajo de la puerta del baño me alertó. Mire al rededor y encontré en el suelo la mochila con la que se había marchado Jisoo. Abri la puerta sin pensar y mire como detrás del cristal el agua recorría el cuerpo de mi demonio.
Tenia los ojos cerrados, ingrese en la ducha y agarre sus manos que estaban sobre su cabeza.

-¿Te desperte?

Habían pasado ya días y Jisoo aún no volvía, había intentado rastrear su paradero pero me habia sido imposible dar con él, llegué a pensar que podía estar muerto y esa idea me atormentó bastante.

-Me tenías muy preocupado.

Bese sus labios para asegurarme de que era real y no uno de mis muchos sueños. Él correspondió y sentí sus manos alrededor de mi cintura. El agua no dejaba de caer sobre nosotros pero estábamos tan sumidos en nuestra muestra de afecto que no nos importó.

No separamos por falta de aire, Jisoo apagó la regadera, él me pasó una toalla y yo susurró algo a su oído que al mismo tiempo mis mejillas se tornaron rojas.

-Eres todo un travieso.

Mientras Jisoo llenaba de agua caliente la bañera, yo cerré con seguro la puerta y continué con quitarme todas mis prendas para luego tomar lugar junto a mi amado.

El agua estaba de una temperatura calida soportable ya que estábamos en invierno. No queria romper nuestro momento íntimo, pero necesito saber porque tardo tanto en regresar.
Iba a decir algo pero Jisoo beso mi nuca, mientras sus manos recorrían mi torso, mordí mi labio para evitar sacar un sonido vergonzoso.

Tal vez la platica puede ser después.

Yo retorci mi cuerpo por cada caricia que me daba y él parecía disfrutar mi tortura ya que soltaba pequeñas risitas que provocaban que me sintiera apenado pero excitado a la vez.

No quería ser injusto con él por lo cual detuve sus manos y me senté esta vez quedando frente a él.

Unir nuestros labios era mágico para mí, sentía una chispa recorrer todo mi cuerpo, me sentia querido por él cada vez que tocaba con tranquilidad y sin apuro mi cuerpo.

Me susurraba cosas tiernas, dignas de él, era todo un caballero.

Con un sonrojo agarre su miembro por debajo del agua, comencé un nuevo beso y levante mis caderas, para luego introducirlo en mi.
Estaba tan sumido en el sabor de sus labios que no dolió tanto y prosegui por moverme lento mientras el acariciaba mis caderas.

El agua chapotear y caer por los bordes era lo que podía escuchar mientras besaba su cuello y el jugaba con mi miembro. Suspiros y jadeos salían de parte mía como de él.

Seguimos en esa danza tan excitante para ambos por un buen rato hasta que por fin ambos llegamos juntos al éxtasis más maravilloso. Descanse mi sudorosa frente sobre su hombro, cuando por fin calmamos nuestra respiraciones aceleradas, salió de mi interior.
Cambiamos el agua para tomar un baño rápido juntos y regresar a nuestro cuarto.
Una vez ambos estábamos vestidos y mientras Jisoo me peinaba el cabello, finalmente pregunté por su ausencia.

-No logre hablar con Wonwoo. Pero si con Mingyu por un corto tiempo y explicar que debe estar calmado, para que podamos continuar con el plan de Minghao.

-¿Y por qué  no pudiste?

Cuando abrí el portal Wonwoo parecía desmayado y Chan apareció-hablaba molesto-para evitar una tragedia, abrí un portal al azar para evitar que me rastrearán. No quería ponerte en riesgo.

Sus brazos me abrazaron por detrás y sonreí ampliamente feliz por su respuesta.

-Chan no es un vampiro común y corriente...él podía abrir portales según me contó Mingyu.

Acaricie su mano y tire de ella para que estuviéramos mirándonos frente a frente.
Hizo un pecherito con sus labios al cual no pude evitar dar un beso corto.

Lo eres todo para mí, a la próxima no me hagas algo así-dije mientras mis lágrimas caían al recordar todas las cosas espantosas que creí que le ocurrieron-e-estaba tan asustado.

Él  tenía la boca abierta pero la cerro formando una sonrisa para luego abrazarme.

-perdón amor, se me olvidó que eres lo único maravilloso que tengo.

Sus palabras eran tan cálidas que arreglaban mi corazón tan lastimado. Lo amo y a pesar de que por ahora no pueda decir esas palabras juro que así es.

Era aún muy temprano por lo cual decidimos descansar en su cómoda cama por un rato más disfrutando del calor mutuo que nos otorgamos.
Un calor mágico que solo ambos disfrutaremos y estoy seguro de que será así porque eso me dijeron sus ojos cuando me vi reflejados en ellos.

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