Spiel Mit Mir: Past | Björn x Ivar (Vikings)

Prólogo: El Hilo

Aquella mañana Aslaug se sentía totalmente extrañada, diferente. 

Tenía aquella sensación rondeándole el alma desde que era tan solo una jovencita más que apta para cumplir su propósito mandado por los dioses, pero la misma se fue acrecentando con el tiempo, con cada año que pasaba hacia su madurez de mujer. 

¿A caso esa sensación había alcanzado su punto más alto?

Tan solo con veinte años, la pelirroja mujer ya conocía que su destino estaba ligado al gran vikingo que estaría por llegar llamado Ragnar Lothbrok y conocía lo que debía hacer llegado el dicho momento y aguardaba el momento destinado. 

Brunilda apareció por la puerta abierta de la habitación de su hija, mostrándose tan poderosa como de costumbre. Portaba una imagen bella a la par que imponente, y su cabello rubio brillaba cual hilos de oro que tenía vida propia. 

—Madre.

Aslaug saludó con la propia educación de una princesa, una costumbre que nunca la había abandonado. 

La escudera legendaria tomó asiento a su lado, permitiéndole a la más joven que se acomodase. 

—¿Ocurre algo, madre?

—Me han dicho de tu futuro, hija mía. Un futuro que me veo obligada a comentarte. 

—No luces muy contenta, pero estoy lista para oírlo.

La mujer soltó un profundo suspiro antes de seguir hablando.

—Tu destino real está unido a otra doncella escudera, como yo.

—¿Quieres decir que no he venido al mundo a ayudar a Ragnar Lothbrok?

—Sí, pero me refiero a /tu/ destino, el tuyo Aslaug. Tienes un hilo amarrado al alma de una luchadora. Ese hilo es tan fuerte que pasará incluso a las generaciones siguientes.

La princesa frunció el entrecejo, confundida. Brunilda dejó una leve caricia en su cabellera rojiza, perdida en sus propios pensamientos.

—Ese hilo es tan fuerte que podrá contra la oscuridad que quiere cortarla, con los pleitos, las guerras... Pero será algo difícil. Fruto del vientre de ambas, los más especiales que nacerán de cada una. El amor, el odio, los celos... Pasarán por todo contando con corta edad. Romperán vínculos y se lastimarán.

—Pero... ¿el hilo seguirá firme?

                                                           "—Eso solo dependerá de ellos..."