AMARRE. ⚊𝐯𝐡𝐨𝐩𝐞 ❞

CHAPTER TWO

Dos semanas pasadas desde aquel "incidente" ocurrió. Cada día y segundo apartados a él era como mil y un espinillas que se incertaban una por una de forma lenta y tortuosa sobre su delicada piel morena.

Aquella chispa que siempre se veía en él se había apagado.

Sus amigos lo habian dejado por su actitud de "cascarrabias".

Y cómo si fuera poco Hoseok se estaba volviendo cada vez más y más cercano a un tipo de último año, Min YoonGi.

Era cómo si lo hiciera solo para lastimarlo más, siempre los podía ver hablando o riendo, tomados de la mano o abrazados... hasta podía jurar algún día los vería besuqueandose justo frente su nariz.

Aquella "amistad", si es que se la consideraba así, lo tenia siempre de un humor de diablos ya hasta se resultaba difícil entrablar una conversacion con el joven gracias a que este se había vuelto algo mucho mas callado y siempre con esa mirada fria y tosca sobre uno.

El timbre anunció que era hora de la salida, todos amontonándose salieron apresurados por la entrada, el salón se había reducido a tan sólo dos personas, él y Hoseok.

Este mismo, cómo si nunca hubiera pasado nada, o cómo si no supiera de su existencia, se encargaba de guardar lo que restaba de sus pertenencias.

—¿Porqué me evitas? —hablo finalmente Tae mientras se acercaba a pasos lentos y agrandados.

—Tae, mira, yo... no te estoy evitando, solo quiero darte tu espacio par-...

—¿Porqué estas con él? —interrumpió lo que decia mientras estaba cada vez más y más cerca.

—¿Él?, Taehyung si no hablas con coherencia no lograré entenderte.—apresuro a tomar su mochila aquel ambiente y sin duda aquella forma de actuar del castaño no le agradaba.

—¿Porqué no me amas? —dijo ahora ya frente a él.

Hoseok incómodo ante la cercanía dio un paso hacia atrás.

—Taehyung, no nos vamos a poner a discutir el tema, ¿ok?, Soló olvidalo, olvida lo que alguna dijiste sentir.

—No es algo que pueda o quiera olvidar, hyung. —dio un paso hacia el frente mientras tomaba el cuerpo contrario por la cintura. — Usted no entiende, usted esta equivocado, yo soy quien debería amar, no a... él.

—Escucha Tae, no sé de quien hablas pero es mejor que pares todo. —dijo tratando de alejarse pero esto fue difícil ya que el agarre del contrario había incrementado llegando hasta el punto de sentir como sus sistemas nerviosos se activaban mandando una ola de dolor sobre él.

—Sabe perfectamente de quien hablo, usted esta tratando de lastimarme más, no se acerqué a él otra vez. —más que una petición fue una demanda lo cual hizo que una descarga de furia se instalara en él con lo que fruncio su ceño en busca de demostrarlo.

Antes que pudiera articular palabra alguna los labios contrarios atacaron los suyos en un beso no tan delicado o cálido, intento separarse mas una mano se poso en su cabeza obligándolo a acercarse más, el agarre de su cintura era ahora de uno solo pero sin duda incremento la fuerza hasta el punto de que posiblemente dejara unos hematomas.

Una fuerte mordida en su labio inferior hizo que abriera mas la boca tratando de liberarlo pero esto dio acceso a la lengua del contrario quien no desaprovecho ni un solo segundó.

La falta de aire hizo presencia, con ambas manos y valor empujo al menor de forma brusca haciendo que este caiga al suelo sobre su espalda.

Taehyung solo pudo verlo un segundo antes de que saliera corriendo.

Las lágrimas en sus ojos ya descendiendo en sus mejillas, sus labios rojos e hinchados por el precipitado beso y su ropa algo desordenada debido a qué había estado en movimiento al tratar de separarse de él.

Solo no pudo mas que quedar estático en donde estaba, aquella imagen sin duda nunca saldría de su memoria.

Permaneció así por un alargado lapso hasta que poso nuevamente sus pies sobre la tierra.

Algo entre sus dedos hizo que viera su palma.

Unos cuantos cabellos pelirrojos finos y sedosos entre sus dedos le hicieron saber que logró arrebatárselos de la cabeza.

Aquellos cabellos hicieron que algo en el hiciera "click" y una ingeniosa idea llego a su cabeza.

Tomando su pertenencias y con el cuidado de no soltar las hebras en su mano, emprendió carrera hacia quien sabrá donde.