Between Dreams |Mark Lee (NCT) & tú|

Cap. 7

No dejé de pensar en ese nombre. Lee Minhyung, quería conocerlo. Quería saber todo sobre él. Por alguna razón, quería conocerlo. Aunque muy en el fondo dudaba de si era real. Tal vez Minhyung es sólo parte de mi imaginación y me estoy volviendo loca.

—Haber no entendí... ¿Aparecí en tu sueño? —preguntó Jiwoo a mi lado. Yo asentí avergonzada recordando lo que sucedió.

—Si, entraste gritando y le preguntaste su nombre. Por una parte me siento avergonzada y otra agradecida. —dije medio riendo.

—¿Por qué avergonzada? —preguntó confundida.

—Le dijiste que era guapísimo así como lo había dicho antes. —dije sintiendo mis mejillas sonrojarse.

—¿Y es guapísimo? —preguntó condeandome. Yo la fulminé con la mirada ante su coqueta sonrisa. —que te parece si vamos a la biblioteca y lo buscamos en Facebook. Tal vez aparezca ahí.

—¡Buena idea! —exclamé a lo que ambas corrimos por el pasillo. En medio camino nos encontramos con Xiao que de pronto sonrió hacia mí.

—¿Cómo has estado, Choi? —preguntó ignorando a Jiwoo.

—Estamos apresuradas, debemos ir a la biblioteca. —le dije en un intento de evitarlo, pero él se interpuso en mi camino.

—¿Sigue en pie lo nuestro? —preguntó hacia mí, a lo que Jiwoo me observó confundida detrás de Xiao.

—Ehm... Si. —dije observando a Jiwoo que pedía una explicación en sus ojos.

—¡Excelente! Nos vemos mañana. —dijo sonriendo de lado para luego guiñar un ojo.

—¿Que planeas con Xiao? —preguntó una vez que estuvimos en frente de la vieja computadora.

—Nada significante, solo ir a comer un helado el fin de semana. —dije econgiendome de hombros.

—¿Irás a una cita con XiaoJun? —preguntó ofendida. Ella se sentó a mi lado y luego golpeó mi cabeza.

—¡Auch! —exclamé deteniendo mis movimientos.

—¡No vayas! —dijo observando la computadora. —Si vas, te juro que haré un jugo mix de ambos.

—No sucederá nada... Es solo una salida. —dije volviendo mis manos a mi computadora.

—Por cierto, ¿Cómo se llama el chico? —preguntó observando mis pasos.

—Lee Minhyung. —dije tecleando su nombre en la barra de búsqueda. Varias opciones aparecieron, pero ninguna llamó mi atención, pues no aparecía su rostro en las fotos de perfil.

—He oído ese nombre... —dijo Jiwoo a mi lado. Exclamó algo intendible y sonrió. —Lee Minhyung, el esposo de Choi Yewon.

—¿Choi Yewon? —pregunté confundida. Jiwoo asintió sonriendome.

—¿No has oído su historia? —preguntó, yo rápidamente negué aún confundida. —Lee Minhyung de 25 años se casaría junto a Choi Yewon. En 1950 murieron cuando unos soldados del norte atacaron Seúl luego de que terminara la segunda guerra mundial. ¿Acaso no prestas atención a lo que el profesor de historia dice?

—A veces. Pero... ¿Qué hicieron ellos en esa época? Es decir, su nombre es igual al chico que aparece en mis sueños, pero sólo se casaron, ¿No? —pregunté hacia ella. Jiwoo rodó los ojos y me quitó el mouse de las manos para luego escribir en la búsqueda de Facebook.

—Realmente me interesó esa historia. Fue trágica, ambos murieron el día de su boda, justo cuando atacaron los norcoreanos. Es triste, aunque a muchos nos interesa su historia, así que hay un club de fans. —dijo. Jiwoo hizo unos movimientos rápidos hasta luego encontrar una página que de foto tenía un fanart.

—¿Es posible que tenga un club de fans? —pregunté divertida. Jiwoo me fulminó con la mirada sintiéndose ofendida, pero luego me ignoró dejando ver un texto largo donde contaba su historia.

—Sé que no tiene nada que ver con tu tal Lee Minhyung, pero el Chamán había dicho que es un espíritu. Tal vez sea el espíritu del soldado Lee Minhyung. —dijo sonriente. Comencé a leer un poco de la historia de Lee Minhyung y Choi Yewon, aunque al principio me pareció aburrida. Luego de haberla terminado, Jiwoo se acercó a la computadora y presionó una imagen. —Son ellos dos. Ambos tenían 25 años, él no sabía leer. ¡Qué romántico! Ella le enseñó a leer, ojalá tuviera un amor así.

Ante la imagen que veía, me quedé de hielo. —Imposible...

—¿Sucede algo? —preguntó Jiwoo confundida. La observé espantada y a la vez confundida. Una parte de mí se sintió dolida y un pequeño nudo en mi garganta se formó. —______...

—¿Él es... Lee Minhyung? —pregunté sintiendo como las mejillas se mojaban por lágrimas traicioneras.

—No me digas que... —empezó a decir Jiwoo. Antes de que ella pudiera terminar, un jadeo de asombro salió de su boca. —Imposible.

Asentí. —Él es el chico que aparece en mis sueños. Es él, d-definitivamente es él. —dije mirando la imagen aún sin poder creerlo. ¿Un muerto ha aparecido todo este tiempo en mis sueños? Peor aún... Me estoy enamorando de un muerto.

—Lo siento, ______. —dijo Jiwoo tomando mi mano y acariciándola.

En las horas de clase, no quise hacer nada. Jiwoo parecía igual de aburrida que yo, pero por una parte, yo estaba triste y las ganas de llorar aparecían cada vez que el nombre de Minhyung aparecía en mi cabeza. Lentamente cerré mis ojos y decidí que durmiendo podría deshacer eso pensamientos pesados y dañinos. Aunque corría el riesgo de encontrarme a Minhyung en uno de estos.

—______. —levanté mi vista. No había nadie, ningún alumno, ningún solo profesor. Sólo él. Minhyung me sonrió, y al verlo mis ganas de llorar se intensificaron. —¿Estás bien?

Negué. Las lágrimas salieron y el nudo en mi garganta me impidió hablar, pero hice un esfuerzo para preguntar: —¿Por qué no me dijiste que estabas muerto?