Un paso más

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-POV Félix-

Ayer... es cierto, aconteció algo extraño, por lo menos para mí lo es, o... no lo sé... me quede pensativo toda la tarde, dándole vueltas a lo que había pasado, seguro soy un idiota por darle tantas vueltas a lago así, algo que normalmente seria insignificante para cualquier persona... pero no para mí, me sentí... extraño.

No sé cómo explicarlo, y no es como si necesitase darle explicaciones a alguien, si, como no, la persona más importante que necesita una explicación soy yo mismo, vaya cosas...

Hay algo que ha estado dando vueltas por mi cabeza, es... como una idea, o... no lo sé, ¿un plan?, tampoco lo creo, los planes suelen tener algún objetivo final, y aquí no hay alguno que yo pueda vislumbrar. Pienso en que... tal vez si fuese yo solo a ese establecimiento, podría tomarme mejor mi tiempo de analizar las cosas, y hacerlo con más profundidad, que os puedo contar, me gusta el café y me ayuda a relajarme, aparte de a pasar buenos ratos.

-Me levante de la silla frente a mi escritorio, ya he terminado algunas tareas del colegio, y aun no es tarde-

Como he dicho algunas veces, suelo reflexionar acerca del porque no soy como la mayoría de los chicos de mi edad, mi madre suele decirme que todos tenemos diferencias, tanto en gustos como en otros ámbitos, pero... también suele decirme que debería socializar más..., ya antes tuve problemas... con una posible depresión... y... desde ese tiempo... mi madre suele pensar que la soledad me afecta demasiado y se preocupa por ello, aunque es obvio, ella no puede salir y conseguirme los amigos (creo que si pudiera lo haría), pero puede recalcarme ello cada vez que solemos platicar un rato, no es que me moleste, pero... me gustaría poder dejarle claro que estoy bien así, aunque he tratado de hacerlo algunas veces..., creo que realmente se aferró a la idea de que la soledad es peligrosa en mi caso.

-Escuche que la puerta de mi habitación se abrió-

Madre: Oh, ¿interrumpo algo? –Me cuestiono sin abrir completamente la puerta-

N...no, nada –Conteste de manera normal, tal vez un poco alegre pues como he dicho ya terminé las tareas del colegio (lo cual significa toda la tarde libre ahora)-

Madre: -Entro a mi habitación sentándose en el borde de la cama- Félix...

-Me extraño un poco su manera de hablar, fui a sentarme junto a ella- E...Emm... que pasa?

Madre: Bueno... tu padre llegara de trabajar en alrededor de una hora, él y yo saldremos a... bueno... -Hablaba de manera normal, pero a la vez parecía que no quería decirme todo completamente-

¿Una cita? –Conteste tratando de acertar, no era algo muy complicado pues ya antes habían salido a citas (Si, son un matrimonio con dos décadas de estar juntos, pero aún pueden comportarse como novios... no sé en qué sentido sea bueno que su hijo los vea así)-

Madre: Exacto... -Suspiro de manera suave- Tu padre aun es tan romántico...

-No pude evitar soltar algunas risillas suaves volteando a mirar a otro lado-

Madre: ¿Eh?, te estas burlando de tu madre? –Coloco dos de sus dedos presionando la punta de mi oreja gatuna dispuesta a tirar de ella (Forma de castigo dolorosa para mi)-

N...no, no nada de eso... solo... es que pareces una enamorada... -Conteste un poco nervioso pues un jalón de orejas parece simple, pero si puede resultar doloroso-

Madre: Más vale que sea eso –Soltó la punta de mi oreja- y... no creo que tenga algo de malo ser una enamorada... el amor es hermoso... -Soltó un suspiro pareciendo aún más una chica que moriría por su amado-

Amo y amor inesperadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora