Somos rivales

Volveras a mí

La practica con All Might había finalizado, dando como primer lugar una igualdad de puntos entre Midoriya y Shinsō, seguido por Bakugō en segundo lugar empatando con Yaoyorozu y en tercer lugar Todoroki Shōto.

El ex héroe numero uno felicitó a los cinco jóvenes por su esfuerzo, aunque corrigió el comportamiento de el rubio cenizo por casi explotar el escenario al no resolver uno de los enigma y frustrarse, cosa que le costo puntos en contra y termino empatando con la chica creación, de lo contrario hubiera podido incluso conseguir el primer puesto.

All Might se despidió de sus alumnos enviándolos de regreso a los cambiadores. Todos se despidieron del ex héroe agradeciendo que había decidido mantenerse en la academia como profesor aunque tuviera que estar oculto y cuidándose de la prensa.

—No creí que me pudiera agotar mentalmente a este extremo –comentó Denki quien caminaba con el cuerpo flojo, si bien no habían hecho casi ningún esfuerzo físico su mente por poco explotaba al no poder hayar respuesta a tales preguntas.

—Bueno, para ti el preguntante cuanto es la raíz de 144 ya es mucho –habló Jirō burlándose de el chico eléctrico pues de todos, era el que más se había tardado junto con Aoyama.

—¡Claro que si sé! –exclamó indignado caminando rápido para ganarse al lado de su amigo pelirojo al cual jalo ligeramente de su pantalón intentando que cierta chica no se diera cuenta– Kirishima ¿Cuánto es la raíz de 144?

El pelirrojo soltó un suspiro pesado, pues había escuchado la breve conversación entre los dos.

—¿Como tienes energías para preocuparte por eso? Después de todo lo de hoy no quiero escuchar una sola pregunta más.

—Ay, opino lo mismo –se unió Sero colocándose al otro lado libre del pelirojo– y yo que creía que la pregunta sin respuesta era eso del huevo o la gallina.

—¿Quienes creen que somos? ¿Del FBI o qué? –se coló la pelirosa al lado del chico eléctrico– Jirō –la nombrada se acerco un poco más poniéndose al mismo nivel que sus amigos– ¿Como hiciste para terminarlo más rápido que nosotros?

—Conocen esa de Tin Marín de Do pingüe, no se me ocurrió otra cosa y seleccioné las que salían, al azar.

—Y terminaste en sexto lugar sin esforzarte mucho –le dijo Kirishima quien había terminado séptimo.

—¿A quien le toca? –preguntó Sero señalando disimuladamente al cenizo quien caminaba muy por delante de ellos con las manos hechas puño y emanando una aura negativa.

—Yo lo hice la vez pasada, le toca a Jirō –habló Kaminari rápidamente.

—¿Ah? Yo lo calme la vez que ustedes dibujaron corazones en todos sus cuadernos.

—¿Cuál ustedes? Fue Mina solita –acusó el pelinegro.

—¡Pero tú estabas ahí al igual que ustedes dos, así que son cómplices! –se defendió la pelirosa señalando al de ojos rojos y miel, para acercándose molesta al chico de las cintas.

—Yo me gané una paliza la vez que se enojó por caerse a la piscina –dijo Sero mientras se movía alrededor del grupo andante, intentando no ser capturado por la chica ácido.

—Te ganaste la paliza por que fuiste tú quien lo empujó, estaba claro que se iría contra ti.

—Kirishima, no me ayudas –intentó callar a su amigo, antes de que lo empujaran y lo mandaran a hablar con el rubio para que suelte su ira.

Ya hace un tiempo los cinco chicos se la rifaban para ver quien era la persona que tenía que tranquilizar al ojirubí si no querían ver sus vidas arder.