Holloway | l.s

Capítulo XVI

Ardía, todo en él ardía. Su cabeza, su torso, sus brazos, todo. Sentía un calor infernal. Abrió los ojos con desesperó y forcejó bajo las cobijas, intentando liberarse del abrasador edredón.

Por suerte, la habitación se encontraba en total oscuridad gracias al blackout el cual evitaba que la luz del día se colase por algún lado. Y aunque no fue sorprendido por los rayos del sol al abrir sus ojos, le fue inevitable no sentirse mareado y con un ligero dolor de cabeza debido a los cuantos tragos que se había tomado la noche anterior. Los recuerdos de lo que había pasado resurgieron en su cabeza como un sonido ensordecedor ¿qué había hecho? La culpa lo invadía hasta lo más profundo de su interior. Observó a Luke dormido a su lado. Sumido en sus sueños, respiraba tranquilamente sobre su costado derecho con el brazo izquierdo puesto sobre el abdomen bajo de Louis. Agarró el brazo de Luke con suavidad y lo colocó fuera de su cuerpo.

Buscó su celular entre la cama lo más sigiloso que pudo. Una vez lo encontró, lo desbloqueó para poder ver qué horas eran. Las siete y media de la mañana. No había dormido absolutamente nada, pero ya no tenía sueño. Bloqueó el celular, levantó su torso y se deslizó para salir de la cama sin despertar a Luke. Se sentó en el suelo, aún aturdido por los recuerdos. Decidió que lo mejor era vestirse y salir de esa habitación lo más pronto posible... tal como había hecho Harry con él. El sentimiento de culpa no desaparecía ¿debería irse? No quería que Luke sintiera lo mismo que él sintió la vez que se despertó con el frío de la ausencia del ojiverde. Louis no quería ser como él. Luke no se merecía eso. Se quedó en el suelo unos minutos más, disfrutando del frío que este le proporcionaba e intentando apaciguar la culpa.

Se paró y caminó a oscuras en busca de su ropa. El cuarto estaba hecho un desastre, ropa tirada por todas partes, cajas de comida sobre los escritorios, la cama de Harry sin hacer... Louis se quedó observándola, debatiendo frente a lo que estaba a punto de hacer. Caminó hacia esta y se sentó sobre las sabanas destendidas. Intentó hacer memoria sobre la noche anterior ¿había estado así desde que entraron en la madrugada? ¿o sí habría llegado a dormir? Si Harry durmió allí, significaba que lo había visto con Luke. No sabía si sentirse avergonzado o complacido. Si los vio, asumiría por lógica que ellos dos estaban juntos ¿qué habrá pensado al respecto? Louis se perdió en sus pensamientos y ante las respiraciones rítmicas de Luke. Se veía lindo mientras dormía, tan inocente y relajado, como lo era siempre. Lo quería, en verdad lo quería. Se sentía arrepentido de haber actuado de tal forma porque ahora no sabía qué debería hacer para no estropear –aún más– su amistad.

No supo cuánto tiempo se quedó así, mirando a Luke con todo el detenimiento que la situación requería. Volvió a la realidad por un sonido lejano de lo que parecía ser alguien carraspeando. Louis posó su mirada en quien habría sido el generador del sonido. Y como no, Harry estaba allí, con ojos cansados y sus manos metidas en los bolsillos. Louis se puso de pie como reflejo apenas lo vio. Llevaba el cabello mojado y olía a jabón aunque estuvieran metros de distancia, por lo que asumió que acaba de salir de arreglarse. Harry lo miró de arriba hacia abajo y Louis se percató de que solo llevaba sus bóxers puestos. Sintió la vergüenza apoderarse de su rostro.

—Eh —Louis rompió el silencio. Pasó una mano por su cabeza, llevando el cabello hacia atrás—. Uhm, hola...

—¿Qué haces aquí? —preguntó directo y cortante el ojiverde.

Louis se sentía fatal. La noche anterior la había cagado con Luke debido a lo frustrado que se sentía con Harry y ahora que estaba frente a él, este lo trataba como el ser humano más despreciable del planeta tierra. Quería golpearlo. Quería golpearlo o si no lloraría.

—Dormir, supongo... —dijo Louis con sarcasmo.

—Hablo en serio, Louis —atacó Harry, con una expresión fúnebre—. ¿Por qué estás aquí, con luke, en boxers? Solo se me viene una cosa a la cabeza ¿sabes?