Parte 5 Crueldad

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Cuando Lan Zhan regresó a la habitación Wei Ying se encontraba sentado con su espalda recargado contra la cabecera de la cama. A diferencia de cómo lo había dejado Lan WangJi; con la respiración agitada y con su rostro pálido marcado con notorios chapetes, en ese preciso momento volvió al rostro que tenía momentos después de despertarse, es decir, tenía la mirada ausente y apagada. Lan Wangi se preocupo ya que solo habían pasado escasos minutos desde que habían estado en la cama besándose profundamente.

Le acerco una pequeña mesa donde esta contenía un plato de avena, un tasa con té caliente y un pequeño plato con fruta. Era una comida ligera para alguien que llevaba varios días sin comer. Nuevamente Wei Ying miró durante uno momentos la comida antes de decidirse a tomar el plato entre sus manos y comenzar a comer por cuenta propia.

Su cuerpo se sentía débil, sus manos a duras penas lograba levantar el peso del plato, sus manos temblaron, siendo notado esto por el segundo jade, tomando de inmediato entre sus manos las manos del contrario para después retirarle el tazón de sus manos. De nueva cuenta se sento a su lado para empezar a alimentarlo como tenía planeado desde un principio cuando el más joven había despertado.

Wei Ying no hizo mucho para negarse recibiendo la comida cuando esta le era ofrecida. Durante todo el proceso no dijo nada hasta terminar el tazón de avena. Lan WangJi tomó la taza de té y la acerco a sus labios para que pudiera beber de ésta. El té era de Jazmín, un dulce sabor lleno la boca del más joven relájandolo considerablemente. Para cuando Lan WangJi tomó el plato con frutas para seguir alimentando, Wei WuXian levanto su mano en señal de deterlo.

-Estoy satisfecho, ya no puedo comer más- Era poca comida para alguien quien había pasado 8 días desde su último alimento pero también debido al mismo ayuno no pudo ingerir demasiada comida.

Lan WangJi vacilo uno segundos antes de dejar todos los recipientes en la mesa y retirlos de la cama. Se detuvo dandole la espalda al mas joven durante un breve momento.

- ¿Qué paso exactamente, qué te paso para estar en este estado?- Pregunto aún de espaldas a la cama sin encarar al menor.

El silencio se prolongo durante mucho tiempo sin recibir ninguna respuesta.

-Tengo sueño - Fue el único sonido que se escucho en la habitación.

Lan WangJi se volteo y dirigio por fin su mirada a Wei WuXian. Este seguía sentado en la cama con su mirada apagada y el rostro decaído.

WangJi soltó un suspiro y se acerco para ayudarlo a recostarse en la cama, ya más tarde intentaría nuevamente que le contará lo sucedido.

La rutina de alimentarlo y dormir se prolongo durante dos día más, hasta que Wei WuXian tuvo la sufiente fuerza para levantarse y darse una ducha con agua caliente mientras era asistido por el joven Lan para lavar su cuerpo y su cabello. Irónicamente esta situación trajo recuerdos al mayor de la noche en la que él ebrio se baño en la tina para terminar besándose lujuriosamente con Wei WuXian. Dedicó un par de miradas para comprobar si el otro le traía los mismos recuerdos, para su sorpresa esto no fue así. Wei Ying continuaba con la mirada pérdida sin siquiera molestarse con la presencia del segundo jade. Sus pensamientos abstraídos ni siquiera ponían atención a los movimientos del mayor.

Lan WangJi paro todo movimiento para centrarse en el más joven y develar de una vez por todas que era lo que lo angustiaba y lo hacia sufrir de esa manera. - Wei Ying, habla conmigo. No sé si seré de mucha ayuda pero por lo menos puedo escucharte.- Wei WuXian no reacciono a sus palabras solo se quedo ahí durante un momento para luego levantarse y tomar su bata para cubrir su cuerpo.

-Estoy bien. Mañana hay que partir, ya me siento mejor- No dijo nada más y se fue directo a la cama dejando a Lan WangJi en el mismo lugar viendo su espalda.

A la mañana siguiente salieron de la posada para no volver ahí. El silencio se mantuvo entre los dos. Wei Ying no tenía fuerzas para hacer alguna broma, sus pensamientos se encontraban inmersos en los problemas que tenía que enfrentar. Por un lado estaba el hecho de que su alma se encontraba en modo de excitación y podría en cualquier momento intentar abandonar nuevamente ese cuerpo ajeno a su pertenencia y por otro lado el recordar sus orígenes. El hecho de haber olvidado todo aquello lo hacía sentir inmensamente culpable, se olvidó de su madre y padre biológicos los cuales le amaban con toda su alma y se sacrificaron por su bienestar, sobre todo su madre la cual había tenido una muerte horrible y el solo pudo presenciarlo sin poder hacer nada para evitarlo.

El haberse olvidado de aquellos que amaba y le amaron le hacia sentir una enorme culpa en su corazón y más aún que nunca pudo vengarlos y no sabía nada sobre aquellos que les hicieron tanto daño. En todo el tiempo que estuvo en Yunmeng Jiang jamás había escuchado de un reino caído en los alrededores de las 5 grandes sectas.

Lo que Wei Ying aún no recordaba era que para llegar a Yunmeng Jiang no solo había recorrido grandes distancias sino que también habían cruzado el mar, ya que su reino se encontraba en una isla a un mes de distancia en barco de las grandes costas de las sectas que conocia actualmente. Al haber sido un golpe de estado este hecho no atrajo la atención de la gente foranea ya que el levantamiento fue algo que surgió sin aviso alguno y al pasar solo un par de días la familia real había caído siendo sustituida par la rama secundaria de la familia real usurpando de esta manera el trono y calmando cualquier fuga de información innecesaria.

Siendo un reino independiente y grande no necesitaba de la ayuda externa para la economía por lo que los visitantes de islas cercanas era mínimo.

Mientras caminaban Lan Zhan se acerco a un puesto para comprar el desayuno de ambos, sin esperar que algo sucediera un perro que venía corriendo tras un gato desde un callejón quedo frente a Wei Ying al encontrarse este en medio de la calle le comenzo a ladrar. Lan Zhan reacciono de inmediato al escuchar los ladridos creyendo que Wei Ying saldría corriendo hacia él. Para su sorpresa vió como Wei WuXian se quedaba en su lugar viendo al canino con completa indiferencia. Levanto lentamente la mano y energía resentida rodeo al perro, este comenzo a retroceder asustado nuevamente al callejón, Wei Ying le seguía con la mirada sin quitar la energía resentida de este. Lan WangJi asombrado y sin saber que pasaba corrió hasta el más joven y le sostuvo su mano fuertemente para que se detuviera pues era pleno día y podría llamar la atención de las personas.

Contrario a lo que espera Wei WuXian cerro su mano en un puño y solo se escucho y un pequeño quejido por parte del canino y un sendero de sangre deslizándose de su cuerpo inerte.

-WEI WUXIAN- grito Lan WangJi al darse cuenta de lo que había hecho el menor. Este le volteó a ver y siguió caminando como si nada en el mundo hubiera pasado. Lan Zhan le tomo fuertemente del brazo y le hizo que se girara para verlo de frente - ¿Porqué hiciste eso? - Pregunto algo molesto y shoqueado, pues el mejor que nadie sabía de la fobia del menor hacia los perros, pero ahora este les atacaba sin misericordia y los mataba. Este cambio era una diferencia entre el cielo y la tierra. Lo cual lo preocupo enormemente ya que Wei Ying era una persona bondadosa por naturaleza, atacar en esta magnitud a un cachorro indefenso era algo cruel.

Wei Ying sin decir una sola palabra volteo a ver su crimen nuevamente al parecer había vuelto a él el raciocinio, hace unos momentos atrás estaba sumido en la culpabilidad y resentimiento, dejándose llevar por sus emociones negativas actuó sin pensar. Sin saber qué decir o cómo disculparse por lo que acaba de hacer se solto bruscamente del mayor y camino nuevamente sumido en sus pensamientos recapacitando por su forma de actuar.

-... Lo siento...- Dijo quedamente para seguir caminando.

Algo salió malDonde viven las historias. Descúbrelo ahora