ART 【ᴊɪᴍɪɴ + ᴊᴜɴɢᴋᴏᴏᴋ】

하나

Su rostro rebotó contra el pavimento, cortando a gran prisa su labio inferior, combinando saliva con aquel líquido espeso de tono carmesí que no tardó en recorrer directo a su barbilla. Sus nudillos chocaron de igual modo, trozando su dedo meñique enseguida. Sus pequeños ojos castaños entrecerrados y su labios abiertos en línea dejando escapar ligeros gemidos que fueron callados tras gritos de dolor, propagados por unos cuantos golpes contra su pared abdominal.

Jungkook sollozó, dejando escapar una ligera lágrima, la cual resbaló por su mejilla derecha, intentando evadir con velocidad la paliza de aquel sujeto que llevaba una capucha negra. Imploró devastado, tragando saliva y sacudiendo sus manos proponiendo tregua, sin embargo no bastó, había sido la peor decisión de su vida, fingir ser un héroe cuando no lo era.

Pero se detuvo todo en un instante corto: cinco segundos bastaron para que un sujeto de cabello verde-aqua moteado de tonos amarillentos deslavados, estrechara su puño contra el rostro del contrario; sus golpes eran definidos y acertados, tal cual atleta de artes marciales en práctica para principiantes, o al menos eso era lo que sus ojos leves y lastimados podían observar.

Intentó relamer sus labios, escupiendo ligeramente poco del sobrante del líquido carmesí sobrante; su lengua se encontró con el sabor a hierro y la abertura gruesa de extremo a extremo. Sus brazos enredados, cubriendo su abdomen inquiriendo leves muecas. Tragó saliva inmediato para después cerrar sus ojos, observando la complexión delgada y estatura promedio de aquel sujeto; lentes de sol, aquellos vaqueros negros ajustados,y una playera holgada de color blanco,la cual permitía una vista excelsa de sus brazos trabajados pero sin exageraciones.

Jungkook al lado de él se sentía flacucho y escuálido. Nada en él era atlético, prefería pasar tiempo escribiendo en su pequeño cuaderno,o pintando en lienzos cualquier imagen que a su cabeza llegase. Hasta ahora se había olvidado del verdadero problema,de su acto poco heroico de defender lo que era suyo, concentrado sus ojos en la expresión del contrario, el cual levantaba sus materiales que permanecían en el suelo. No se cuestionaba nada, estaba en blanco grabando la silueta, imaginando cientos de lienzos inspirados en él contrario,y en cada facción.

De pronto todo era oscuro y carecía de luz vital. Había caído dormido mirando con lentitud el panorama que anteriormente lo estaba rodeando, perdido en la faz de sus ideas internas, soltando levemente su cuerpo relajando todo aquello que había sido maltratado.