Circulo del Alma

Insomnio

Thor se encontraba en su habitación, no la de la torre en la que estuvo esperando, sino en su habitación real, aquella que guardaba muchas secretos, algunos recuerdos de inocentes besos robados y guardados en la esquina de su habitación hasta la grande tina quién fue testigo de apasionantes noches con la persona quién alguna vez fue...su hermano.

Su Loki.

Entre sus pensamientos  aún rondaba el recuerdo de cómo Loki le ayudaba casi todas las madrugadas a olvidar su culpa con besos en la nuca y palabras alentadoras y sexys.

Si, porque era su hermano, adoptado.

El dolor en su pecho por acostarse y amar con locura irónicamente al Dios de las travesuras era reemplazada al recordar el como casi pierde a su hermano, Loki.

No podía evitarlo, no era fácil para él dejar de llamarlo hermano.

Se sentía extraño.

Thor se sentó en su cama matrimonial junto a su gran ventana, observando el amanecer, Loki había vuelto, pero esta vez en forma de un bebé, que babeaba y que lloraba casi cada minuto de su tiempo, mayormente en las madrugadas.

Era muy pequeño pero con  pulmones muy grandes.

No sabía qué hacer en realidad, nunca pensó en la paternidad porque sabía que Loki preferiría esperar que su relación fuese más formal para decidir sobre su futuro.

Por ello es que a pesar de tener a su pequeño travieso bebé durmiendo a su costado, no podía evitar sentirse nervioso y preocupado de cuidar de ese pequeño niño, lo único que sabía era que no quería dejarlo solo.

No podía tener nada con un bebé , sentía la misma ternura al verlo, la misma emoción de sentir su presencia, si con ser su hermano anteriormente tuvo una hermosa relación aún a pesar de sentirse culpable preferiría  esperar el tiempo suficiente hasta que Loki sea grande, no quería lanzarse ante un bebé, quería disfrutar la etapa de ver crecer de nuevo a su Loki.

O talvez lo llamarían el enfermo de Thor, odiaba esto, pero era mejor  esperar a que vivir mil años más sin Loki.

Lentamente suspiró con el nudo en su corazón, Loki es y será siendo su vida eterna, su serpiente atrevida, su corazón indomable, su caramelo de menta , su niño travieso, su....

¡¡¡Wuaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaáaaaaaa!!!

Su pequeño demonio.

Lindo pero con un carácter demasiado difícil, anteriormente Loki no era así, pero Frigga le dijo que los bebés eran así porque no tenían otra forma de comunicarse y Thor lo comprendió.
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Thor comenzó a caminar hasta la puerta, su reloj de arena marcó las siete de la mañana.

Llegó apenas hace una hora del entrenamiento, pensó en bañarse y aunque lo hizo no podía evitar pensar en Loki olvidando que este, aún siendo bebé, exigía su atención como antes, solo que esta vez es con intenciones más inocentes.

Al llegar a la habitación de su madre, tocó la puerta quién después de un "adelante", ingresó acomodando su cabello.

Su madre, Frigga , se había encariñado tanto con el pequeño Loki,  al cual siempre le recordaba al pasado, cuando Odin lo adoptó a su familia .

Ella estaba en una silla cantándole a un inquieto Loki, quién al verlo llegar, el  llanto antes insoportable comenzó a minimizar hasta llegar a ser pequeños gimoteos, sus ojos verdes jade estaban inundados en lágrimas, sus pequeños brazos se estiraban, necesitados de aquel rubio quién no podía estar más que feliz de ver ese pequeño detalle de su travieso.

Frigga soltó una risa tranquila y le entregó a Loki con delicadeza a un torpe rubio ,quién no se acostumbraba a cargar a tan pequeña criatura.

Loki al ver el atuendo de Thor se aferró a él hasta que se durmió entre pequeños balbuceos dejando encantada tanto a Thor como a Frigga.

Thor le acarició con ternura el cabello negro del pequeño bebé quién  suspiró tranquilo de sentir las caricias del grandote.

_ me recuerda cuando Odín te permitió ingresar por primera vez a observar a Loki, era casi lo mismo que en ese tiempo, solo que él ahora llora por ti y ya no por mí, mis amores unidos está vez,Thor....solo protege a mi bebé, cariño, por favor, protegelo_ susurró  en ruego Frigga abrazando a Thor y a Loki con cariño, sus amados hijos siempre serán su mayor tesoro.

Thor sabía que la perdida de Loki para su madre fue uno de las peores cosas que pudo experimentar y pensó que este nuevo comienzo con este pequeño Loki no termine en tragedia.

Ignoró cuando su madre rogaba que cuidara de Loki como si fuese su hermano, Thor no quería seguir siendo su hermano, quería que todo siguiera como antes, aunque puede que imposible, el dolor en su pecho seguía creciendo ante los ruegos de su madre , no quería ocultarle a su madre la verdadera naturaleza de la relación que tanto él como Loki poseían.

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Thor dormía plácidamente mientras que en su pecho, como un pequeño gatito inquieto estaba el bebé Loki, quién esperaba ser alimentado pronto, ese rubio tonto no quería despertar.

Pero en la oscuridad de la habitación junto al cuerpo formidable del rubio , con sus horrorosos ronquidos como el de un león en pleno sueño.

El pequeño Loki, tan adorable como siempre no le importaba el cansancio del rubio, exigía su alimento y la leche de tres minutos atrás no había llenado su pequeña barriga por completo.

Al verse ignorado, el pequeño comenzó entre gimoteos mientras su llanto comenzó a notarse aún más

Y el rubio dormido... Volvería a obtener otra noche de insomnio.
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Otra vez.
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Continuará