El tormento del Alías

Mi otro Yo

ONE

Entre la lluvia que cae sobre mí me sumerjo en la profundidad de mi ser, aquella parte que nadie logra ver es donde encuentro mi paz; se halla en cada gota fría que choca contra mí. 

Me encuentro frente a frente con mi enemiga; La oscuridad. Tiene amordazado a mi otro Yo, aprovecho el momento para preguntarle...:

—¿Llevas la cuenta de cuántas veces he soñado con éste momento?

Como siempre ignorando no me respondió. A decir verdad, ni yo recuerdo haber estado en son de paz antes de hoy. 

"Al fin ha llegado el día de mi liberación" grita una voz dentro de mí, pero sin emitir sonido alguno.

Me había ahogado en el mar de mis lagrimas. Me esforcé en obligar a callar y mantener bajo las sombras en el lúgubre y quejumbroso lugar de mi mente a mi otro Yo, ese que todos tienen pero que logran llamar "subconsciente" para que no pueda ser escuchado por alguien más que mí misma. Callé de esa manera sus agonizantes gritos, esos que siempre lograban partirme un poco más mi alma torturada, y aun así lo mantuve oculto. Cuanto me arrepiento...

La inocencia que muestra mi exterior no es verdadera. Estoy constituida por capas de pintura, una el cual es difícil de borrar y de hacerlo quedarían secuelas de ella; un lienzo con un arte mal hecho, eso soy. Uno el cual el crítico es capaz de notar y por el hecho de no ser perfecto le da derecho a juzgar. Es un asco saber que no fui yo quien me amoldó, sino ellos. Aquellas personas crueles que me señalaron desde que tengo memoria, enseñándome facetas no muy gratas del mundo que me consume, tan grande y a la vez escalofriante, como tú, humanidad... Eres un asco escrito en todos los idiomas y en letras grandes.

Tormento número 01

Alías: Antes&Después.

Porque has ocultado tu esencia bajo una coraza poco atractiva, una el cual no deja mucho a la imaginación. Te dejaste envolver por el mundo pervertido en el que habitas. Te sumergiste en el mar profundo de la perdición, pero hallaste tu paz y con ella saliste a flote.

Te desenmascaraste, mostraste al mundo tu hermoso rostro que conlleva en la frente las palabras: Soy Libre. 

Disfruta tu libertad al máximo, manda a la oscuridad donde pertenece, que en este caso no es tu mente ni corazón.