Miro el piso en busca de respuestas, los chicos le habían prometido que no dirían nada y eso lo mantenía tranquilo aunque fuera sólo un poco.
Llegó a casa pero no había nadie, Yuuri le había mencionado que tendría que salir de la ciudad por unos días por lo cual se llevaría a Phichit. Estaría sólo por al menos unos tres días , ¿Qué haría? Podría salir con sus amigos sin preocuparse de llegar en la noche para ser tomado y ser lastimado de diferentes maneras.—¿Qué haré?— se preguntó mientras se sentaba en el sillón.
Había pasado tanto tiempo en el que no había estado sólo, hacer lo que el quisiera sin tener miedo a que ocurriera algo.
Soltó un suspiro y decidido se fue a su habitación, tal vez el día de hoy se iría temprano a la cama. No podía salir solo a menos que saliera con sus amigos pero estos tenían una vida.
Guang ya no podía darse el lujo de salir muy tarde por su embarazo y más si esposo era sumamente sobreprotector con el, Chris iría a uno de esos lugares que definitiva el nunca pisaria y luego estaba Otabek, su sobrino cuñado no era mucho de salir en fiestas y si lo había era tal vez para conocer un DJ famoso.No tenía más amigos a los cuales acudir, solo compañeros con los que había intercambiado una que otra palabra y además no podía acercarse a estos a menos que fueran omegas o Heras mujeres.
Se dejó caer en la enorme cama, hoy no tendría que soportar los golpes ni el sexo violento que estaba acostumbrado a recibir cada día. No pudo evitar sonreír y no es que fuera mucho de felicidad, bueno si lo era pero se le hacía gracioso que estuviera tranquilo.
Por alguna razón se topó con la fotografía de su boda con Yuuri.
En ella el vestía un traje blanco y su cabello en este tiempo estaba largo tomado en en trenza de lado, Yuuri vestía un traje negro y llevaba puesto unos lentes de contacto. Ambos sonrían.
Quién diría que todo eso ocurriría a causa de el, era un poco extraño pero era verdad pues en el paso el le había pedido que prometiera que se causarían y había sido justo el mismo día que se habían conocido.
[Flash Back]
Sus cabellos plateados estaban acomodados en una trenza que le quedaba perfecta, su madre se la había hecho momentos atrás.
Escuchó el sonido de un carro estacionarse enfrente de su casa, era su hermano mayor. Ya había regresado de la escuela, corrió rápidamente para llegar hasta la puerta.
—Hermano— se le lanzó al rubio que apenas entraba a la mansión.
El chico rubio por suerte no cayó al suelo y sostuvo a su hermano para que esté tampoco se fuera para atrás.
—Pequeño tonto debes tener cuidado— le regaño mientras su hermano se baja con una sonrisa.
—Lo siento mucho Yuri— le sonrió levemente.
Y entonces lo notó, atrás de su hermano mayor se encontraba otro chico. Llevaba unos lentes de marco azul pero aún así se podían apreciar que sus ojos eran cafés, un precioso color sin duda.
Un exquisito olor a café le llegó a la nariz. Un aroma sin duda perfecto para un Alfa.
—Bueno, por cierto este es el Katsudon de Yuuri Katsuki, el es mi hermano menor, Viktor— los presentó.
—Es un placer— saludo el pelinegro de rasgos orientales.
El por su parte le miraba de arriba hacia abajo buscando más detalles de lo que miraba, por alguna razón le sonreía como idiota. Era un Alfa bastante atractivo.
—Tu serás mi esposo— le confesó haciendo que el chico se pusiera nervioso por tal confesión.
Quería decir algo pero simplemente no podía, estaba comenzando a tartamudear por la confesión que la había hecho el hermano de su mejor amigo.
El rio por como estaba actuando el chico.
—Si ya terminaste de coquetear le a llegado Katsudon podemos continuar que tenemos mucha tarea— interrumpió el rubio haciendo que el lo volteara a mirar.
Negó con la cabeza para voltear al rubio.
—Es la verdad, el será mi esposo en el futuro— sonrió cerrando los ojos—. Ya lo verás, yo nunca me equivoco.
Su hermano negó con la cabeza mientras el japonés solo le miraba con un rubor en las mejillas.
Era sin duda un Alfa muy encantador, parecía demasiado dulce y amable a simple vista. No era como los demás que era serios y fríos. Yuuri Katsuki era un perfecto Alfa para el.
—¿Y qué dices sobre lo que acabo de decir?— se volteó preguntándole mientras se mecía de atrás adelante—. ¿Me pedirás en un futuro que me casé contigo?.
—Ah bu-bueno yo ah— no podía pronunciar muy bien las palabras.
El Omega que estaba ante sus ojos le parecía bastante hermoso.
Viktor rio para acercarse a él y guiñarle el ojo.
—Si tú no lo haces yo lo haré, es una promesa— extendió su meñique para señar lo que había dicho.
El japonés miró su bardo extendido sin comprender.
—Lo vamos a prometer, si tú no me pides que me casé contigo lo haré yo— explicó con tranquilidad mientras Yuri les miraba con aburrimiento.
Había hecha una mueca de asco. Benditos cursis que tenían que ser justo en ese preciso momento que el se encontraba ahí. Bien podría d firme a Viktor algo pero le regañarian además que probablemente su hermano estaría molestó con el por un largo tiempo y eso no queria.
Yuuri por su parte junto su meñique con el de Viktor mié tras este sonreía.
—Ya está, es una promesa que no se debe romper— murmuró Yuri—. Ahora vamos Cerdo que debemos hacer una tarea y todo este rato nos a quitado tiempo.
Les dio la espalda para dirigirse a las escaleras.
—Si, lo siento debo ir— se despidió del Omega que asintió.
—Espero no rompas la promesa, porque cuando lo haces también rompes un corazón— explicó Viktor.
El japonés asintió.
[Fin Del Flash Back]
—Y después de todo no solo rompió un corazón si no también un cuerpo y una alma— murmuró.
Nota: Meses sin actualizar, tengo mis razones. Hace poco abandoné Facebook y de hecho iba a hacer lo mismo con Wattpad pero primero debía de terminar el fic así que bueno me tardaré en actualizar. Espero lo comprendan.
También muchas gracias a las personas que han comenzado a leer este fic, lo aprecio demasiado. Y claro que soy chico no chica, no me molesta que me traten como una pero es algo incómodo.
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MASOQUISTA
FanfictionEl era su omega, el era suyo y de nadie más. -¿Que más quieres para saber que te amo?- habló el alfa sosteniéndolo de la mano bruscamente. - No quiero más de tu amor, no cuando duele- respondió el omega con lágrimas en los ojos.