Después de que Nico se fuera, Leo se quedó un rato mirando a la nada, tratando de ordenar sus pensamientos. Leo seguía creyendo que no era más que una tonta y pesada broma por parte de Nico; sin embargo, ¿Por qué haría ese tipo de bromas?, más importante aún, ¿Cómo se enteró de Calipso? Él nunca le dijo nada a nadie, salvo a Piper. Obviamente Piper no diría nada, entonces, ¿Cómo podría Nico mentir sobre eso? Porque no es mentira, y lo sabes, Calla, ¿Por qué no me apoyas si eres yo?, porque soy la parte realista destinada a joderte de ti. Finalmente decidió resolverlo todo, le mandaría un mensaje iris a Calipso.
-oh iris, diosa del arcoíris, acepta mi ofrenda; Calipso, campamento mestizo long island sound-El dracma de evaporó en el arcoíris y apareció una imagen- no puede ser.
Leo no daba crédito a lo que estaba viendo, Calipso, su Calipso estaba en el campamento mestizo, ella se encontraba en el comedor, vistiendo unos jeans viejos y una camisa del campamento, al parecer no había nadie con ella; pero algo no cuadraba, se supone que al verla Leo debía gritar de emoción y ser la persona más feliz del mundo... pero no fue así, lo que sintió fue solo un poco de felicidad, pero sobretodo curiosidad.
-Calipso, ¿qué haces allí?- atinó a decir con voz temblorosa.
Esperaba que se tratase de algún truco, que no respondiese, que el mensaje se difuminara y apareciera Ogigia, pero no fue así:
-Leo, veo que has recibido mi mensaje-hablaba con voz tranquila, lo que no animó mucho a Leo- AL parecer los dioses se acordaron de liberarme de mi prisión y terminé aquí.
¿Los dioses?... ¿Qué tenían que ver los dioses en todo eso? Que poca importancia le das a la persona que "quieres", recuerda que ella te dijo que los dioses habían accedido a liberarla de su prisión cuando Percy salvó el olimpo, cierto, lo había olvidado, olvidas lo que no te parece importante, ¡Calla! No importa si fue liberada, o sea, sí importa, pero llamé para saber si me terminó o no.
-¿Es cierto? –Estaba combatiendo con un nudo que se formó repentinamente en su garganta- lo que me dijo Nico, ¿Es cierto?
-Leo, recuerdas cuando te dije que me era fácil ver el pasado, pues a veces también logro ver el futuro, y he visto que no estamos hecho el uno para el otro... al principio no lo creí, pues te había estado observando y había visto que trabajabas en el astrolabio para encontrarme.
>>Me emocionó, finalmente un héroe mostró real interés en mí. Creí que tú serías quien podría salvarme de esta soledad... pero con el tiempo noté tu falta de interés y supe que cada día que pasaba te estaba perdiendo, menos y menos tiempo dedicabas a buscarme, en ocasiones parecías forzado en reparar el astrolabio.
>> ¿Sabes qué fue lo peor? Que a mí tampoco me dolió. Me dio igual, es decir, al principio me molestó, aunque al final acepté que eres como todos los demás, nunca podrías mantener tu atención mí por mucho tiempo, honestamente dudo que puedas con quien sea. Creo que lo más irritante fue saber que seguiría en la isla, sin embargo, cuando pude salir, yo también comencé a olvidarme de ti. Ahora los sentimientos de ambos son tan pequeños y frágiles, ahora ya no sentimos lo mismo, nada nos une. Sé feliz Leo Valdez, ya nada te ata a mí, ya no tienes que cumplir tu promesa.
-Pero-Leo se quedó sin palabras, pues lo que Calipso había dicho era verdad, cada día que pasaba, él la quería menos, pero aún la quería- yo...
-Shh, no digas nada, no lo hagas más difícil... lo siento-antes de que Leo pudiera decir algo más, ella pasó la mano a través del arcoíris, rompiendo la conexión y el corazón de Leo.
Desesperado, el hijo de hefesto se tiró en la cama y rompió a llorar, fue un sollozo silencioso, pero no duró mucho. En cierta forma la conversación con calipso lo libero de un peso que llevaba tiempo cargando. Por otro lado, algo le molestaba, Calipso dijo algo que no pudo sacarse de la mente "nunca podrías mantener tu atención mí por mucho tiempo, honestamente dudo que puedas con quien sea"... ¿Era cierto? Leo nunca fue una persona cuyas relaciones emocionales fuesen duraderas, de hecho, su amiga más antigua era Piper y sólo tenían un año de conocerse; además, estaba "su primer amor"... ¡Mierda! Tenía razón, Calipso acertó al decir que él no podría mantener una relación con alguien por mucho tiempo, pues, en el fondo, él sabía que no volvería a correr el riesgo de ser herido y por eso no tomaba en serio a las personas.
Pensando en las personas que no tomaba en serio, recordó su pequeña discusión con el joven di Angelo... ¡Lo golpeó!, demonios, él no tenía nada que ver con sus problemas, debería disculparse.
Saltó de la cama y corrió a buscar al rey de los fantasmas, a quien, como suponía, encontró en la enfermería atendiendo su herida. Al verlo se sintió terriblemente culpable, pues aunque ya no se notaba tanto el corte (gracias a la ambrosia) aún se podía distinguir una leve cicatriz por encima de la ceja.
-Nico-no sabía que decir, la palabras se atoraban en su boca-yo...
-¿Qué quieres?-Esas palabras las dijo con tal frialdad que podrían haber congelado la habitación.
-Lo siento. Estaba demasiado alterado y creo que me excedí al golpearte. ¿Podrías perdonarme?
Guardaron silencio mientras la tensión se hacía presente, era tanta que bien podría tejerse un suéter con ella.