No me dejes ||Joerick

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JOEL

Ver sus fotos no se compara a la sensación de tenerlo entre mis brazos.

*

Erick y yo tenemos los años de relación que CNCO tiene como banda, exactamente tres.

¿Poco? ¿Mucho? Vete a saber tú.

Desde el cumpleaños de uno de los chicos él está un poco distante a todo, no sólo a mí, sino también con el resto. Me irrita verlo y no poder abrazarlo o darle un beso en la frente.

En estos momentos me encuentro en el sofá de mi casa, pues nos dieron unas mini vacaciones y decidí visitar a mi familia.

Recién es el primer día de vacaciones.

Tomo el celular y veo que cada vez estoy subiendo de seguidores tanto en Instagram como en Twitter, sonrió con orgullo por eso. Erick dice que debería bajarme de las nubes, pero no puedo evitar sentirme bien al ver eso. Me llena de mucho júbilo que personas desconocidas sigan y apoyen mi trabajo.

—¿Y Erick? ¿No iba a venir contigo? ¿Qué pasó? —mamá suelta varias preguntas a la vez.

—Seguramente con su mamá. Iba, tú misma lo has dicho. Nada, mamá, él tenía cosas pendientes con su familia —respondo sin pensarlo.

—Joel...

—Lo siento, me está doliendo un poco la cabeza, iré a mi habitación.

Mamá suspira resignada y dice algo en un murmuro bajo que no llego a escuchar debido a que hablamos a la vez.

—Bien, luego le digo a Israel que te suba una pastilla.

Asiento, tomo el móvil y me incorporo lentamente del mueble. Estiro mis piernas, ya que habían estado encogidas por mucho tiempo y se encontraban un poco adormitadas.

Subo de dos en dos las escaleras y entra a la segunda habitación de la derecha. Mi habitación. Mi lugar favorito de todo el mundo.

Bueno, el segundo. El primero es estar abrazado a Erick.

—¿Qué nos está pasando? —susurro a la nada y me siento en la cama después de haber conectado el celular para que comience a cargar.

No sin antes haber dejado un mensaje a Erick, preguntado si había llegado bien a casa y que saludara a su familia de mi parte.

Retiro mis zapatillas y me tiro de espaldas poniendo mi brazo derecho a la altura de mis ojos, tapándolos para que nadie vea mis lágrimas que están saliendo poco a poco.

—Te amo...

Murmuro por última vez antes de quedarme dormido.

***

Puse algunos detalles más, pero casi no se notan.

Besos♥