Drawings- Jilix

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[POV de Jisung]

"Estás usando mis celos como una excusa para quitarme la ropa, ¿verdad?" Félix declaró sin rodeos. Me quedé sin aliento por lo sencillo que era, pero luego lo recuperé.

"Tal vez~" sonreí, mi mano inclinando su barbilla hacia un lado para tener un mejor acceso. Me mordí el labio y comencé a marcarlo. Un suave gemido escapó de los labios del chico de cabello naranja cuando dejé marcas moradas en todo su cuello. Mis manos se deslizaron bajo su camisa mientras lo empujaba hacia abajo. Me subí encima de él y me quité la camisa. Me alejé.

Pero él no lo estaba teniendo.

Escuché a Felix chillando mientras deslizaba mi lengua en su boca. Sus manos se abrieron camino hacia mis jeans y tirándolos hacia abajo. Agarré sus manos y las puse sobre su cabeza. Félix hizo un puchero.

"Pero quiero tocarte..." Me reí entre dientes ante su ternura y le besé la frente.

"Bebé, ten paciencia~" Lo calgué y dejé besos por todo el cuerpo. Sentí que sus piernas se envolvían alrededor de mi cintura mientras huía con el dobladillo de sus vaqueros.

"Bebé... ¿está bien?"

" ¿Qué?"

"Yo... no quiero causarte dolor ni nada, ¿de acuerdo?"

No quiero que Félix piense que soy feo, mis muslos son tan gruesos y gruesos y...

Me mordí el labio recordando mis problemas para caminar después de esa noche. Félix se dio cuenta de lo que estaba pensando y me besó una vez más.

"Cariño, está bien, lo prometo. Tu cuerpo es perfecto, no tienes que ser tan inseguro, creo que estuviste hermoso esa noche. Creo que eres hermoso cada segundo del día. Dios, te quiero tanto, yo..." Lo callé con un beso y lo atraje más cerca. El aire que entraba por la ventana estaba caliente cuando mi cuerpo estaba presionado contra el suyo, dejando besos en su piel de vez en cuando mientras las uñas de Félix se clavaban en mi espalda dejando arañazos en mi espalda. Me acosté a su lado. Mis manos en su cintura mientras plantaba besos por toda su cara. Lo más importante sus pecas.

Después lo besé.

Sus manos estaban en mi pelo, sus ropas estaban en la habitación.

Su cuerpo estaba caliente, su corazón latía al mismo ritmo que el mío.

Pero lo más importante, su ser era todo lo que podría haber deseado, ya que nunca he visto a alguien tan hermoso como Lee Felix.

"Te he besado cientos de veces, pero este beso quedará en mi memoria para siempre", le sonreí y le di un beso en la frente.